Capítulo: 7

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¿Acaso ella recuerda?
La noche antes del adiós
Ella dijo por siempre,
Y me hizo jurar que nunca la dejaría,
Ella dijo que no me ama,
No le creas, si la ves
Dile que haría lo que sea, la necesito.

<<LANY, "If you see her">>

Adrien.

Cada vez que le contaba a mi padre el cómo me sentía con respecto a lo que le había hecho a Eliane, me contestaba con una simple frase, "Cosecharás lo que siembras".

Pensé que aquella vez Eliane acababa de cosechar todo lo que ella había sembrado, y me llevaba demasiada ventaja, porque si de algo estaba seguro, era que apenas comenzaban a salir los primeros brotes de mi cosecha.

An paso su lengua por sus labios, mientras que jugaba con sus dedos; su mirada estaba perdida, como lo  había estado por más de media hora; y la mano de Sasha sobre su rodilla en un intento de tranquilizarla.

Si hubiese tenido dieciocho años probablemente habría estallado en ira, gritando y golpeando todo lo que se me pusiera en frente; pero aquella vez fue distinto, solo me quede mirando como Sasha mantenía su mano en An.

-...Y no supe qué hacer- término de decir An, su voz estaba realmente rota y había lágrimas que caían por sus mejillas, claro que estás no duraban mucho tiempo ahí porque Sasha casi de inmediato las limpiaba, -No contestaste, y me aterró...-

-Que no estuviera listo- la interrumpí.

Aquel día finalmente había comprendido el por qué habíamos llegado a aquella situación.

Y es que Eliane siempre había tenido la razón, no estaba listo para aquella responsabilidad, ni siquiera en aquel momento lo estaba. Pero, como siempre, lo quería escuchar de ella.

-¿Por qué lo hiciste?-

La mirada de An era de alguien agotada, y es que todo aquello se había convertido en una montaña rusa emocional, que ninguno de los dos estaba resistiendo.

-Iba a arruinar tu vida- dijo al  mismo tiempo que su voz terminaba de romperse, y un sollozo se le escapaba, -Ibas a renunciar a todo y tirarlo por la borda... Yo simplemente no podía permitírtelo, y si te decía de Edrian... No estabas listo, no lo estábamos-

Luego rompió en llanto, y tuve que evitar el impulso de lanzarme a abrazarla; en lugar de ello solo observe cómo Sasha lo hacía. Y juro que sentí como si alguien me golpeara justo en el pecho cuando lo hizo.

Solo mire.

Y era lo que sentía que me correspondía, por qué era lo que al final me tocaba cosechar.

Admitiré que jamás logre que Sasha me agradara; y es que, estaba tan celoso de él.

Sin siquiera intentarlo el era todo lo que yo pensaba que nunca llegaría a ser, y había estado en los momentos en los que yo deseaba con toda mi fuerza el haber estado ahí.

Estuvo en el nacimiento de mi hijo, cuando An lo necesito. Y puedo asegurar que esto último ocurrió más de una vez.

Agregando que yo en aquel momento moría por ser la mitad de maduro de lo que él era, y es que a mí me costaba demasiado trabajo, algo que él hacia sin siquiera pensárselo dos veces.

Me quedé ahí sentado, observando y evitando hacer una mueca.

-An, creo que ha llegado el momento de ser honesto- admití, y opte por el tono más tranquilo que logre hacer, que para sorpresa mía, soné demasiado cansado, como si estuviera harto de todo aquello. Y quizás si lo estaba, -Me enoje contigo por que me arrebataste la oportunidad de estar ahí para ti y para Edrian; pero siendo honestos, dudo que si la situación hubiese sido distinta yo hubiera hecho lo correcto- An frunció el ceño y note como Sasha le dio un ligero apretón sobre su rodilla, y de nuevo los celos amenazaron con volarme la cabeza, -Creo que quien debe de disculparse aquí soy yo, por que si tu creías eso de mi, el error fue mío, porque te demostré que no era capaz de tomar responsabilidad de mis acciones. Y en serio lo siento-

El perdió másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora