Anioł [Park Jimin]. (¡HIATUS-TOTAL!)

11

El aceptó y me miró, yo seguía mirando el techo como si estuviera en un trance, estirada ocupando toda la longitud del sofá.

Hoseok golpeó levemente mi frente.

- Ve a cambiarte.

- Ni siquiera he dicho si quiero ir o no - me quejé intentando levantarme pero fallé, Hoseok me ayudó tomándome del brazo - iré a cambiarme espérame.

Cuando entré a mi habitación ignoré el polvillo de la muralla y me fijé solo en el gran cuadro en mi habitación, realmente era increíble el parentesco entre la chica de la pintura y yo, mi mamá había dicho que no era así, que solo era una chica que creo en su mente pero definitivamente era yo, la chica compartía la cicatriz en mi vientre, mi madre trató de hacerlo muy fugazmente para no hacerla tan notoria pero aun así me había dado cuenta.

Ella sabía que si decía que era yo la que estaba pintada no la iba a querer tener en mi habitación, así que simplemente dijo que no era yo pero si lo era, ¡Dios! solo le cambió el color de cabello a uno mas rojizo y mis feos ojos color caca a un verde pardo.

Me saqué el camisón para finalmente vestirme y ir con Hoseok a comprar un pastel, antes de que mamá me sacara a la fuerza de la habitación sólo con el camisón puesto, buscaba el sostén que tenía puesto ayer pero parecía que la señora Jung ya lo había puesto a lavar, no era necesario, solo me lo había puesto ayer pero de igual forma no lo encontré. Así que simplemente me puse otro, salí cuando estaba lista y mientras caminé por el pasillo me sentí extraña, observada, di media vuelta encontrándome a Hoseok al final del pasillo, apoyado en los bordes de la ventana de este.

- ¿Cuánto llevas ahí? - le pregunté.

El mantenía su vista en mí, era extraño, su mirada parecía tétrica.

- No mucho - pasó por mi lado - ¿nos vamos?.

•••

Estábamos en la camioneta yendo al pueblo nuevamente, Hobi iba a comprar el pastel en la tienda donde trabajaba y cuando entró, yo me bajé y fui a la cafetería.

Entré y salude a todos pero Jimin no estaba ahí, me sentí un poco defraudada, hablé con Robert para decirle que volvería en un par de días, mi hombro ya estaba mucho mejor, a pesar que pensé que iba a quedar lastimada por lo sucedido en el edificio abandonado pero no, no se si Jimin había hecho algo o simplemente mi mente se volvió loca y exageró todos los escenarios, necesitaba hablar con el y que él mismo me dijese que no fui yo la que imaginó todo eso.

Igual me sentía frustrada por ello, quería que fuera Jimin el que me contara toda la situación por que yo no podía confiar en mi misma.

Salí de la cafetería para ir a la tienda de en frente, pero antes de poder entrar Hoseok salió con el pastel.

- Esta vez fuiste rápida - dijo - ¿el tipo no estaba? - preguntó con una sonrisa engreída en su rostro.

Yo rodeé los ojos y me subí a la camioneta, de camino de vuelta Hoseok no dijo nada porque sabía que me había molestado lo que dijo. De repente la camioneta se quedo parada en medio del camino, él se bajó para revisar que estaba mal en el capó pero ni así logró hacerla partir, llamó a mi madre para que me fuese a buscar con el pastel también llamó a un amigo que es mecánico.

- Sentémonos aquí, mientras esperamos - dijo apuntando al pasto del costado ya que el sol llegaba a la camioneta y hacía mucho calor.

Y ahí estuvimos varios minutos en silencio, hasta que me decidí en hablar.