Nuestro Destino - Nuestro Futuro

Capítulo 36 - Mi familia

Capítulo 36 - Mi Familia
Advertencia contiene Lemon

Karma PO
Nagisa se removia en mis brazos, sobaba su espalda y le hacia mimos y se tranquilizaba por un rato.

Con mucho cuidado de no despertarlo, lleve mis dedos a su entrada y con delicadeza la roze y mire mis dedos aun estaban manchados de sangre, pero ya era menos.

Sanaras mi Nagisa, solo espero poder curarte las heridas del alma.

Ya los rayos del sol, pegaban en mi rostro, deje a Nagisa sobre la cama y fui a bañarme.

Pedi que nos trajeran el desayuno al cuarto y busque las medicinas y desperte a Nagisa.

-Nagisa, buenos dias mi amor, cariño es hora de despertar.

-Karma, buenos días, me dijo con un bostezo

Lo ayude a sentarse, para desayunar y que pudiera tomarse las medicinas.

-Karma, ¿quiero ir a ver mis hijos? me dijo Nagisa.

-Te ayudo a bañarte Nagisa y vamos a buscarlos, pero tenemos que quedarnos en el hotel unos días, ya estoy viendo lo de conseguir una nueva casa, tu no te preocupes por eso, le comente.

Alquile un carro y fuimos a buscar a nuestros hijos. Trataba de animar a Nagisa en el camino.

Ibamos en el elevador y cuando se abrió la puerta Nagisa practicamente corría, en dirección al apartamento de Asano y toco el timbre.

Nagisa PO
Estaba desesperado a que abrieran la puerta, entre sin saludar a Gakushuu y a los demás y fui a donde sentía la presencia de mis hijos.

Mami, y Mina corrió a mis brazos y la abrase. Lágrimas salían de mis ojos de verla, la tome de la mano y busque a su hermano.  Angela lo tenía en brazos dándole su biberón.  Cuando me vio inmediatamente me lo entregó, me senté con Mina en mis piernas y Edian en mi regazo.

Karma, se sentó a mi lado y cargo a Mina yo me acomode junto a él, para sentir su calor, Eidan nos miraba con sus ojos celestes y el chupon en la boca, estaba rodeado de mi familia, estaban bien, protegimos a nuestros hijos. Seguía muy sensible, no paraba de llorar.

Le di las gracias a todos por cuidar de mis hijos, le informe a Angela que cuando me mudara a mi nueva casa, le daría la dirección, para que pudiera seguir cerca de nosotros.

Regresamos al Hotel, nos quedaríamos algunos días aquí, tal y como me dijo Karma.  Decidimos ir a cenar al restaurante en vez de quedarnos en el cuarto.

Extrañaba mucho a mis hijos, Mina estaba acostada en nuestra cama, con un lindo puchero en su rostro porque su hermano no deseaba dormir, yo caminaba por toda la habitación, tratando de dormirlo en mis brazos, pero inmediatamente que me detenía, empezaba a llorar. Yo también ya quería llorar, pero era feliz, esta es la vida que quería vivir con mis seres queridos.

-Dámelo Nagisa, me dijo Karma. Se lo entregue y empezó a caminar con Eidan en sus brazos, hasta que se detuvo y empezó el llanto, lo miro y le dijo a dormir Eidan, que todos queremos dormir y soltó un poco su sed de sangre mientras veía al bebé en sus brazos, yo me alarmé como a Karma se le ocurría hacer eso, pero funcionó increíblemente dejo de llorar.

Así pasaron varias semanas nos mudamos a una casa nueva, mis heridas sanaron, regrese a mi trabajo de profesor, me había hecho la cirugía con Láser, para borrar la S que me quedó marcada en mi costado, pero Karma no me tocaba, creo que tenía miedo de hacerlo por miedo a que lo rechazara por no estar listo.

Mina y Eidan estaban dormidos, decidí darme un baño para relajarme.

Karma PO
Estaba acostado en la cama pensando, ya mi Nagisa estaba curado, me moría por hacerle el amor, pero no quería incomodarlo y que recordara su abuso.

Nagisa salió del baño y caminaba hacia mi, con la toalla en su cintura, se sentó en mi regazo y junto mis labios con los suyos, pase mi lengua sobre ellos, y succione el labio inferior, inmediatamente introducid mi lengua en su boca, saboreando nuestras lenguas, nuestras salivas, nuestro aliento, nos separamos por la falta de aire.

Le pregunté si estaba seguro de querer continuar y me dijo que sí. Mordí el lóbulo de su oreja y con mi nariz hice una caricia por su cuello y su hombro, volví a repetir el mismo recorrido pero con pequeños besos escuchaba su suspirar y su jadeo.

Estruje sus tetillas con mis dedos y lo acosté en la cama. Mnnnn.....Karma. Dirigí mis labios a esos botones rosado, chupándolos y mordiéndolos, primero uno y luego el otro. Continúe mi recorrido por su vientre y besaba toda la piel que tenía a mi paso y le quite la toalla.

Ante mis ojos se elevaba una gran erreccion y sonreí de manera lasciva y me la introduje en mi boca de una sola vez, pasaba mi lengua por su glande y por su miembro, escuchaba los deliciosos gemidos de Nagisa que era música para mis oídos.

Sentía el líquido pre-seminal salir de su miembro, acaricie con mi lengua la punta y empece a succionar, mientras masajeaba sus testiculos, sentí su miembro crecer de tamaño en mi boca, se acercaba el climax, aumente el ritmo de mi boca en su miembro y el abundante semen en mi boca y su gemido me indicaron la llegada del orgasmo.

Puse mis dedos en la boca de mi ángel, el los chupaba para lubricarlos, los retire y metí mi lengua en su cavidad bucal, saboreando su lengua, mientras introducía dos dedos en su entrada, los movía en su interior, metí el tercero y lo dilataba, cuando sus caderas se movían al compás de mis dedos, los retire, me miró molesto.

Listo le dije, voy a meterlo Nagisa.

Introducir mi miembro en su entrada, el placer me recorría entero, su recto apretaba delicioso mi extensión. Espere que se acostumbrará y mi pene entraba y salía dentro suyo. Escuchaba sus gemidos pidiéndome más, más rápido Karma gemía Nagisa. Di contra un punto que soltó un grito de placer, lo había encontrado y la punta de mi miembro daba en ese punto, me concentré para que sintiera el mayor placer.

Su entrada se contraía alrededor de miembro y dirigí mis manos a su miembro para masturbarlo, veía las gotas de sudor correr por su rostro, su boca jadeante en busca de aire y sus ojos nublados por el placer era la imagen más excitante que había sobre la tierra y era sólo mía.

Su cuerpo se convulsionaba mientras gemía mí nombre y apretó su entrada aprisionando mi miembro, se sentía tan caliente y derrame mi semilla dentro de él. Te amo Nagisa.

Salí con cuidado de su interior le pregunté si estaba bien y asintió.

-Te amo Karma, estoy tan feliz de estar en tus brazos me dijo Nagisa

-Yo también cariño, mi ángel mi Nagisa, te amo, le respondí.

-Nagisa, tenemos que aprovechar un día que no estén los niños, para marcar la casa, como es nueva no lo hemos hecho y tenemos que tener sexo en el baño, la sala, la cocina, el comedor, la terraza y el estudio, le comente.

-Karmaaaaaaaa, no digas esas cosas y su rostro estaba muy sonrojado.

-No te hagas Nagisa, que te gusta que te folle duro por toda la casa le dije de manera lasciva.

-Waaaaaaaaaaaa no digas eso y cerramos los ojos adentrándonos al mundo de Morfeo.

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Se les quiere y cuídense 🙂💝