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Capítulo dedicado a JolbertC ;-; me estuvo acosando para que actualizara y he aquí el resultado. Espero que te guste, wey e.e

Pd: Este aviso es solo únicamente para avisar que los próximos capítulos +18 serán privados, tuve problemas con una historia por este tipo de capítulos, así que quiero prevenir de que me eliminen esta también. Si quieren leer dichos capítulos deberán seguirme y listo. 

¡Disfruten su lectura! 

~*~

Estoy de pies junto a Alison, observando la enorme casa que está delante de nosotras. La visión de varios hombres entrando y saliendo de la misma con varios de mis muebles, solo logra confundirme un poco más.

—¿Fue tu idea, no? —pregunto, dirigiéndome a Alison sin siquiera posar mis ojos en ella. Dash, Elton y Héctor nos había dejado solas, querías ayudar para así terminar más rápido, cosa que me ponía algo nerviosa.

¿Cuándo él había conseguido la llave de mi casa?

—Sí —dice sin quitar la sonrisa de su rostro—, tenía una copia de la llave y se la di.

Pongo los ojos en blanco mientras la observo. Lidiar con Alison eran igual que lidiar con una adolescente de quince años. ¡Y ella era la mayor de las dos!

Dejo mi atención en Dash y Elton, ambos intercambian palabras mientras entran uno de los muebles más grandes. ¿Qué podrían estar hablando?

El tatuado parece percatarse de que lo observa y logra desviar sus ojos a los míos. Una pequeña sonrisa crece en sus labios y, con un simple movimiento de labios, murmura un "Los amo".

Sé que no debería sentirme feliz, que el tener a Adrien en la cárcel era algo como para que todos estuviéramos buscando la manera de sacarlo de ahí, de encontrar un modo para que Darikson Parks no logre acabar con él, sin embargo, no era así.

Dash estaba encabezando una mudanza de la que no sabía nada, teniendo a Elton y Alison como ayudantes. ¿Por qué ninguno de ellos no se encontraba preocupados?

—No me siento bien —digo, llamando la atención de mi tía—. Adrien está en la cárcel, no deberíamos estar haciendo esto. No justo ahora.

Alison bufa por lo bajo. Una de sus manos se detiene en mí estomago, el cual se encontraba algo crecido, y dice—: Adrien no está solo, Holly, su abogado es el mejor de la ciudad, saldrá de esto y, si no lo hace, estaré dispuesta a hacer todo lo que sea para sacarlo de la cárcel.

>>Es hora de que mi padre sepa que la ciudad no le pertenece, pero, por ahora, seremos felices.

Me empuja, con suavidad, hacia la entrada principal. Dash y Elton ya han entrado y no dudo en seguir el paso de ambos. El olor a desinfectante me golpea de lleno, haciendo que el malestar empiece a formarse en mí estomago. Sabía que era normal, por lo que me empujo a respirar con lentitud y, sin dudarlo, me obligo a enfocarme en mí alrededor.

Las paredes se encontraban completamente limpias, sin ningún cuadro o fotografía decorándolos, el olor a pintura aún se sentía en el ambiente, haciendo una extraña mezcla con el olor a desinfectante.

—Será mejor que salgas, Holly —Dash llega a mí, una capa de sudor cubre su frente, lo que me indica que su trabajo no era nada fácil—. El olor es demasiado fuerte.

—Estoy bien —Sujeto la mano que me ofrece—, ¿podemos hablar un segundo? —pregunto, tenía que hablar con él, aún cuando no iba a terminar nada bien para mí—, a solas.

BAD GUYS I: AGGRESSIVE © |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora