Capítulo 24

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Su cuerpo se nota tenso y siento como respira profundo.

—Kimberly, yo... —su teléfono suena e interrumpe la oración—. Dame un minuto por favor —él se levanta y contesta la llamada, mientras camina por la sala con el teléfono en mano. Al cabo de varios minutos él vuelve a tomar asiento.

—Me decías... —le reitero.

—Te decía que... —él vuelve a dudar un momento y no encuentra modo de soltarse—. Te decía que merezco ir a la cárcel, porque... No sé, es difícil decirte esto porque, la verdad es que no quiero que pienses mal, pero yo... —sigue dudando.

—Si vas a decir algo dilo, me está volviendo loca tu redundancia.

—Lo siento, es que... —sigue temiendo.

—¿No es fácil decir que estuviste a punto de matar a Jason? —la desesperación me envuelve y suelto la frase sin pensarlo.

—No, no quise hacerlo. No hicimos nada para que muriera —dice desesperado.

—¡Lo iban a matar con un somnífero! Está vivo de casualidad.

—Ella se excedió y le dio más de lo necesario, le dije que era una pequeña dosis —dice a modo de disculpa, siento el tono de arrepentimiento en sus voz arrugada.

—¡Por qué demonios lo hiciste! ¡¿Sabes que puedo enviarte a la cárcel por intento de homicidio con esta declaración?! ¿Lo sabes? —le grito.

—Lo sé —dice cabizbajo.

—¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué te uniste a su juego? —le digo y las lágrimas no tardan en caer. Es distinto tener la suposición de que te decepcionaron, a tener la certeza de que sí lo hicieron.

—Lo hice por ti, porque quiero estar contigo. Al principio parecía el plan perfecto, pero todo se arruinó.

—Sí, resulta que Jason piensa un poco más adelantado que ustedes y no tienen ni idea de con quién se metieron. ¡Qué estúpidos! —exclamo—. Siempre te dije que no quería estar contigo, aunque nunca hubiera conocido a Jason, aunque él no hubiera nacido, no hubiese estado contigo. Jamás —le confieso, sintiendo como mi voz se fortalece y le grita—. No eres lo que necesito. Nunca lo serás.

—¿O sea, que me rechazas por mi origen, por mi clase? —pregunta ofendido.

—¿Por qué demonios todo tiene que girar alrededor del maldito dinero? ¿Por qué? ¡No tengo la culpa de que te sientas resentido por el maldito dinero! pues ahógate en tu mar de resentimiento. No tener una cuenta bancaria jugosa, tarjetas de crédito y autos de lujo no te hace menos que nadie, lo que si te hace menos que una basura, es pensar que la plata es lo que necesitas para ser importante, ¿y sabes qué? por eso sí te tengo lástima.

—Pero sé que ninguna chica de tu clase jamás tendría una relación conmigo.

—Piénsalo y como te dije muérete en tu mar de autocompasión. Aunque lo peor no es el hecho del dinero, sino que hayas siquiera osado en intentar algo así con Jason. Eso es muy bajo la verdad. No creí que fuera necesario que hicieras algo así con una mujer. Pero eso ya no importa, solo preocúpate por lo que podamos hacer en su contra, que puede ser mucho. No quiero verte más aquí, me defraudaste y ahora no me tienes ni como novia, ni como amiga, ni como compañera.

—Solo quiero decirte algo —dice a modo de permiso.

—Dilo.

—Sé que tienes la duda y quieres saberlo. Stacy es la hija de mi padrino. Por eso la conozco.

TRUST ME© El amor rompe todas las barreras.Where stories live. Discover now