Capítulo 15

148 4 0
                                    

Jason: "Espérame y volveré a despecho de mil muertes, los que no me esperaban quizás dirán: "tuvo suerte". Ellos no comprenderán que en el rigor del combate tu esperar me salvó, más como sobreviví, solo tú y yo lo sabremos, pero tú supiste esperar como nadie esperó."

Jason: Buenos días Princesa. Te tengo una propuesta, no sé si te vaya a gustar, pero lo intentaré.

Kimberly: Buenos días mi Príncipe. ¿De qué se trata?

Jason: no nos veremos hasta el viernes. ¿Sabes para qué?

Jason: Para extrañarte locamente. Es solo si quieres, ¿qué dices?

Kimberly: Estuve un poco loca cuando te fuiste, no sé si soporto.

Jason: Bueno. Yo también estuve un poco loco.

Kimberly: pero acepto. Trato hecho. ¿Sin nada de comunicación?

Jason: JAMÁS. CLARO QUE NO.

Jason: ¿No quieres que llegue vivo al viernes?

Kimberly: jajaja ok ok perdón.

Jason: ¿Y qué harás todos estos días? Sin mi presencia...

Kimberly: pensaré en ti. Mucho, mucho, mucho...

Jason: Yo también, mucho más de lo que imaginas.

Jason: Gracias.

Kimberly: ¿Por qué?

Jason: Por hacerme diferente. Por cambiar mi vida, en un giro de 360 grados, por hacerme el hombre más feliz del mundo, solo con el simple hecho de poder escuchar tu voz, me hace feliz.

Jason: Solo tienes que decir "hola" y esa es la cura de todas las enfermedades, la paz mundial y el premio gordo de la lotería. Todo eso, reducido en un "hola" de tu voz para mí. Solo es lo que necesito.

Kimberly: Nota de voz. "Hola. Te amo mi príncipe."

Jason: Nota de voz. "Eso es todo lo que necesito. Yo también te amo."

Kimberly: Pero quiero que sepas que tú eres también todo para mí, si estoy contigo, el miedo no existe, ni la inseguridad. Gracias.

—Ma, Jason te manda muchos besos, que te extraña y que lo perdones, pero es por el bien de todos —le grito desde el teléfono.

—Dile a Jason, que no sea mentiroso, que el vino de su viaje y ni siquiera ha pensado ni un momento en venir a decirme hola —dice—. Pónmelo al teléfono —le paso el teléfono y empiezan a hablar.

—¿Cerró? —pregunto, porque no se despidió.

—Le cerré sin querer. ¿Qué es eso de "terapia de parejas"?

Me rio a carcajadas.

—¿Te dijo que no nos vemos por terapia? —me sigo riendo—. Es terapia, sí, pero no es por nada malo. Él dice que tenemos que extrañarnos.

—¿Qué tiempo? —pregunta.

—Siete u ocho días, creo.

—¿Será posible? Eso suena un poco raro.

—Lo sé. Pero es genial, será muy bueno cuando lo vuelva a ver.

—Siento decirte que lo veré hoy. Estaré en la casa de sus padres esta noche con las niñas y cenaremos todos juntos. Solo faltarás tú.

TRUST ME© El amor rompe todas las barreras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora