—Mamá —dice avergonzado. Mi mamá salva la situación anunciando la cena.

—Fue un placer conocerte Kimberly. Confío en ti para que no le rompas el corazoncito a mi bebé —dice ella en forma de broma mientras le agarra los cachetes a Jason.

—Basta. Estás haciendo sonrojar a Jason —el señor T. interviene.

—Se lo prometo Jeannette —levanto mi mano derecha en señal de la promesa. Ella se acerca hasta mí y me da un beso de despedida. Lo mismo el papá de Jason.

—Katherine. Entonces, ¿mañana en el café? —acuerdan Jeannette y mi madre.

—Claro. A las 4pm.

—Hasta mañana. No sabes lo feliz que fue volver a verte.

Ellos se van alejando hasta el auto y Jason se queda en la puerta para despedirse.

—Les caíste bien. —sonríe.

—Así parece —me rio—. Todavía estás un poco sonrojado.

—Cómo no. No sabía que era así con las chicas. De saberlo te la hubiera mostrado el día de nuestra boda.

—Jamás por Dios. Iré a visitarla a menudo, para que me dé información —le digo. Él sujeta mi mano en ese momento y me da un tierno beso en los labios, que se va tornando un poco más profundo a los segundos.

—Está bien. Quizás al final quieras correr lejos de mí —esboza todavía cerca de mis labios.

—Jamás haría eso —le sonrío—. Aunque me alegra que te haya empezado a gustar el cepillarte. Te lo agradezco.

Él ríe a carcajadas.

—De nada. Mis dientes también lo agradecen. Es hora de irme. Te llamo cuando esté en casa. Hasta mañana —me da un suave beso. Y se retira.

—Te veo mañana.

Entro a casa y me siento junto a mamá en el sofá con las niñas.

—Son adorables los padres de Jason. Jamás imaginé que Jeannette, tu súper BFF, sea la mamá de Jason.

—No más que yo. La verdad es que es una gran conmoción volver a verla, después de 20 años.

—Debe ser difícil. No me imagino que pasaría si se me pierde Isa de vista. Enloquecería. ¿Cómo fue que perdieron contacto?

—Cuando ingresé a la Universidad y me dieron la beca para ir a Francia a hacer la maestría, estuve muy ocupada y abrumada. Olvidé mi libreta de apuntes donde tenía el número de su celular. Llamaba a su casa y me salía fuera de servicio, y fue hasta meses después que me enteré que se habían mudado a Boston. Después de allí, no volví a saber de ella. Y además tuve el entretenimiento de tu padre. Creo simplemente fue descuido o algo de desinterés.

—¿Crees que está algo molesta con eso?

—Imagino que en algún momento lo estuvo, sin embargo, creo que el tiempo simplemente cerró las heridas. Supongo que mañana cuando hablemos será hora de sanar esas heridas. Son muchas las cosas que tengo que contarle.

Sonrío.

—¿Van a hablar de chicos? —le pregunto un poco intrigada.

—¿Hablas tú de chicos con Isabella? —me contraataca.

—Le cuento sobre Jason. Pero no hablamos más que de él.

Mi madre comprueba que Katie está dormida y continua hablando.

— ¿Hablan de lo que hacen?

—¿A qué te refieres con "lo que hacen"? —hago un gesto con las manos presentando las comillas.

TRUST ME© El amor rompe todas las barreras.Where stories live. Discover now