8°- Car crash

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~Kat~


La cabeza me daba vueltas, sentía como un líquido caliente bajaba por mi frente, escuchaba gritos, sentía como me zarandeaban pero no lograba despertar

-Despierta-

-Despierta- gritaban- oh dios la mate, que le diré a su hermana, despierta.- continuaba gritando esa persona.

Abrí los ojos lentamente, tenia nauseas, estaba colgando de cabeza sostenida solo por el cinturón de seguridad, mientras un caminante se abría paso atreves del parabrisas.

Tan rápido como el dolor de cuerpo me permitía saque la navaja que andaba en el cinturón del pantalón y se la clave al maldito zombie en el ojo salpicando todo de sangre negra putrefacta.

-Lori -grite – mierda Ouch duele gritar -respire lentamente atreves del dolor- quien putas te dio la licencia un niño de tres años tal vez, casi nos matas a los dos- como pude desabroche el cinturón y caí dolorosamente sobre el techo del automóvil golpeandome mas en el proceso – la próxima vez le pasas encima con el auto al hijo de puta caminante. - Saliendo a rastras del auto observe alrededor como se iban acercando cinco caminantes atraídos por el ruido del accidente. Arranque un pedazo de la camisa y me cubrí la mano, y cerrándola un puño golpee la ventana trasera varias veces hasta romperla para poder agarrar mi ballesta que estaba en el asiento trasero. Con ballesta en mano voltee a donde se acercaban los caminantes y les dispare a la cabeza, acabando con su miserable existencia. Luces de un auto me encandilaron hasta que una camioneta se estacionó junto al auto volcado.

-Lori sube a la camioneta Rick está a salvo, ya regreso a la graja – le dijo Shane – y tu también pequeña mierda –. Sonriendo le saque le dedo y rodee a camioneta para subirme en el cajón de esta. El camino de regreso a la granja fue silencioso e incomodo

Al estacionar frente a la casa todos se acercaron corriendo para ver qué había ocurrido. Me quede en la cajuela, sentada nada más tratando de respirar a través del dolor abrumador que sentía.

- ¿Están bien?, ¿qué sucedió? ¿Mi hermana donde esta? ¿Lori porque te fuiste asi?- todos hablaban al mismo tiempo.

-Se volcó el auto- contesto Shane por Lori- Las encontré a la orilla de la carretera.- dijo refunfuñando.

-Glenn ¿Donde está Rick?- Pregunto Lori - ¿Rick? Lori Rick no ha vuelto – contesto el asiático.

-Me mentiste Shane, quien te crees, para engañarme. Es mi esposo el que está ahí afuera. -Replico furiosa la mujer.

-Lori debes pensar en el bebe yo solamente quiero que estén a salvo tu, Carl y el bebe.-dijo el hombre calvo. ¿Bebe? ¿Está embarazada? la mujer me convenció de ayudarla sabiendo que si algo pasaba, yo hubiera cargado con dos muertes. No lo puedo creer, que sea tan estúpida y arriesgada- Déjame en paz Shane, porque Rick es MI esposo y el padre de MIS hijos. Y no tienes por qué meterte conmigo, aléjate de mí y de mi familia no quiero verte nunca más. - Se empezaron a alejar de la camioneta las voces. Al ya no escuchar ruidos levante la vista y ahí frente a mi estaba Daryl con el ceño fruncido, viéndome con intensidad. A veces solo desearía lograr entenderlo mejor.

- ¿Estás bien mocosa?- pregunto. y al parecer seguirá diciéndome mocosa, será que no se aburre de decirme así- Estoy bien cazador, solo me duele el cuerpo, me lleve la mayor parte de los golpes- cerré los ojos y recosté la cabeza contra la camioneta. Sentí como la camioneta se movió un poco por un peso extra. Una mano toco mi rostro con una suave caricia, a continuación movió mi cabello para ver la herida que me sangraba en la frente.

Abriendo los ojos encontré la intensa mirada azul de Daryl, se fue acercando lentamente hasta posar sus labios sobre los míos. ¡Me beso! Con gentileza movió sus labios besándome lentamente, sus grandes manos tomando mi rostro con suavidad. Nos besamos sin prisas, hasta que separando nuestros labios con un suspiro, apoyo su frente sobre la mía. -No vuelvas a asustarme mocosa, te fuiste sin avisar. Y vuelves como una mierda toda lastimada. Ven te ayudare a llegar a la tienda para que descanses. – dijo levantandose.

-Bueno cazador querías que te dejara solo ¿no?- Conteste riéndome. Negó con la cabeza y me tendiéndome la mano – Si, pero no de esa manera- replico ironicamente tomando su mano me ayudo a levantarme. Apoyándome en su hombro bajamos de la camioneta y caminamos hasta mi tienda, mientras él me llevaba firmemente agarrada de la cintura. Al llegar note que Kim no estaba, pero necesitaba urgentemente cambiarme la ropa llena de sangre. Daryl se estaba yendo cuando lo llame.

- Cazador me ayudas a cambiarme la camiseta. No te lo pediría pero el hombro y las costillas me duelen- Asintiendo Daryl tomo el borde de la camiseta con sus manos y fue levantándola con cuidado hasta sacarla por encima de mi cabeza. Sus ojos recorrieron de arriba abajo mi cuerpo cubierto solamente por un sostén sencillo de color negro, una sonrisa ladina se formo en su rostro.

- Gracias Daryl- Sonreí totalmente sonrojada y me gire para poder alcanzar una camisa para dormir. Escuche la rápida inhalación que hizo el cazador, al ver mi espalda ¡El tatuaje! ¡Lo vio! No lo habrá reconocido ¿O sí? Gire para ver como el Daryl desaparecía rápidamente en dirección de su tienda. ¿Qué le paso? Nunca había conocido un hombre tan cambiante como él, me desespera. Suspirando me puse una camiseta enorme para dormir y me quite los pantalones quedando en cachetero. Me senté en el suelo acomodando las cosas para dormir cuando Kim entro en la tienda

-¿Hermana estas bien cierto? - pregunto sonriendo divertida- ¿De qué te ríes idiota? me duele hasta el cabello-conteste malhumorada, -ugh se me está pegando el carácter de Daryl. - dije impresionada. Eso hizo que se riera la estúpida - Bueno pero tan mal no te encuentras, si besaste a Daryl- ¿Qué? ¿Cómo se entero?- Y no te atrevas a negarlo porque, yo como una hermana preocupada me acerque a verte en la camioneta. Deseosa de saber tu estado de salud, cuando ¡Sorpresa! Veo mi hermana en los brazos de Daryl. Besándose.....Ahora entiendo porque me pedias que me alejara de él. - dijo cruzandose de brazos.

-Okey si nos besamos, no fue la gran cosa tampoco- dije sintiendo como me sonrojaba y una sonrisa boba se extendía por mi rostro.- Claro hermana, por eso te sonrojas porque no significo nada. Voy a traer algo para limpiar esa herida de la frente- dijo poniendo los ojos en blanco. Salió de la tienda y me dejo pensando en porque habrá huido de mi.

~Daryl~

Corrí como cobarde. Fui impulsivo y estúpido, la había besado, pero no me rechazo como pensé que lo haría pero ver ese tatuaje, ese que nunca creí que vería de nuevo. Maldición, como puede ser la misma chica que aquel día ya hace tantos años. Esas alas que me llamaron la atención y me hicieron acercarme a ella. Al verla ahí sentada, cantándole al bosque, su rostro de sorpresa al notar que la observaban.

Ya no era la niña que vi en el bosque, se había convertido en una hermosa mujer cuyo rostro había perdido su vivaz expresión, cuyos ojos habían perdido su brillo de inocencia. Pero eso no la hacía menos bella porque su rostro demostraba madurez y decisión, sus ojos aunque cargados de tristeza seguían siendo hermosos. Su cuerpo golpeado, lleno moretes y cicatrices, demas de demasiado delgado, pero todo eso demostraban que era una sobreviviente, una mujer fuerte.

Como podre ver a los ojos a pequeña la mocosa, después de haber huido de ella. Si Dixon eres un completo imbécil.

150 lecturas *-* Soy una autora muy feliz.

Gracias a los que leen, espero que les siga gustando.

Nos leemos pronto.

Un Futuro Incierto (Daryl Dixon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora