3. Seis

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Las guardias que estaban allí levantaron sus armas aún más.

-No nos obliguen a usarlas. El margen de error es nulo. Un movimiento en falso y oprimiremos el gatillo-hablo una guardia. Los tres hombres se acomodaron las correas de sus armas en el hombro, uno se puso detras de mi hermano, otro detras de Minho, el último detras de mi novio, mientras una de las mujeres se ponía detras mio.

Los guardias eran como cuatro veces más grandes que nosotros, bastantes formidos, sus armas eran enormes.

El guardia que estaba detras de mi hermano lo sujeto del brazo, doblandolo hacia atras, y lo empujó para que caminara; otro guardia arrastraba a Minho mientras este tiraba patadas y groserias; el tercero arrastraba a Newt, que luchaba a más no poder para intentar liberarse.
En cuanto a mi, caminaba tranquilamente, mientras la guardia que me llevaba presionaba la punta de su arma en mi espada, prefería no hacer nada antes de recibir un balazo o salir dañada.

Al llegar frente a una puerta, otra guardia, que estaba detras de todo, pasó adelante, sacó una tarjeta de acceso de su bolsillo y destrabó la puerta; cuando la abrió, pude ver una habitación blanca con dos juegos de literas y una cuna, una pequeña cocina con una mesa cuadrada y cuatro sillas en una esquina, un pequeño refrigerador y la puerta que imaginaba llevaría al baño.

-Entren-ordenó la guardia que me habia traido a mi-Les traerán algo de comida. Pueden agradecer que no los dejamos morir de hambre unos días después de como se han comportado. Las pruebas son mañana, así que traten de dormir un poco esta noche-terminó, los tres hombres empujaron a los chicos dentro de la habitación, mientras yo entré tranquilamente, no causaba problemas porque sabía que terminaría perdiendo, y terminaría adentro de todos modos, o en peores condiciones.
Al estar adentro, cerraron la puerta de golpe.

De inmediato, mi hermano se dirigió a la puerta, movio la perilla, trató de hacerla girar con mucha fueza, pero estaba cerrada. Golpeó la puerta con los puños dejando salir un grito, para que nos dejaran salir; de inmediato escuché un gemido, como un quejido de bebé.

Me dirigí rapidamente a la cuna que estaba allí.

-Calmate-escuche decir a Newt-Nadie va a venir a darte el beso de las buenas noches.

Al llegar a la cuna, que era un poco más grande de lo que me imaginaba, encontré la escena mas linda de mi vida: Dylan sentado en esta, tomando la manito de Alaia, quien dormia tranquilamente.

-Supongo que dejamos pasar la ocasión-escuché a Minho-Thomas, cuando por fin llegue tú mágica oportunidad, seremos unos ancianos o estaremos muertos. Ellos no van a hacer un gran anuncio: Ahora tienen una excelente oportunidad de escapar porque estaremos ocupados durante los proximos 10 minutos. Tenemos que arriesgarnos.

-Lo siento. No creí que fuera el momemto adecuado. Y una vez que tuvimos todas esas armas encima, me pareció que ya no tenía sentido intentar algo-explicó mi hermano.

-Claro, bueno-balbuceo Minho-Tú y Brenda tuvieron un agradable encuentro.

-Ella me dijo algo.

-¿Qué?

-Me dijo que no confiara en ellos, que confiara solamente en ella y en la Ministra Paige.

-¿En qué andará esa maldita chica?-preguntó Newt-¿Trabaja para CRUEL?

-Si, me parece que ella no es mejor que el resto-contestó Minho.

-Escuchen, yo trabajé para ellos, ______ también, pero ustedes confían en nosotros ¿no es cierto? No significa nada. Quiza no tuvo alternativa. O cambió. No lo sé-ninguno de los dos le respondió, Newt se sentó en el suelo cruzado de brazos, y Minho parecía pensar en algo.

Tomé a Dylan en brazos, que soltó delicadamente la manito de su hermanita, y me miró con una gran sonrisa.

-Alai...-me dijo señalando a la bebé.

Lo miré con los ojos muy abiertos, sorprendida y feliz.

-¡Chicos, vengan!-ellos rapidamente se acercaron.

-¿Qué ocurre?-preguntó Minho.

-Dilo de nuevo, Dyl-pedí, pensé que no lo entendería y no lo haría, pero sin embargo, él volvió a señalar a la bebé.

-Alai-repitió con una sonrisa, haciendo que los chicos sonrian; ellos podrían estar alterados, pero Dylan siempre los haría sonreir.

-Ven mi pequeño-Newt lo tomó en brazos y dejó un beso en su mejilla.

-¡Papi!-soltó Dylan emocionado y Newt sonrió, minutos después miró a los chicos y volvió a hablar-Tio- estiró su manitos hacia Minho, pidiendole que lo cargue, y este lo hizo.

En ese momento, entró una mujer con platos de costillas de cerdo y papas, y dos mamaderas. Al principio no entendía por que dos mamaderas, si Alaia tomaba pecho, pero luego recordé que Dylan se levantaria con hambre en la madrugada.

Nos sentamos en la mesa para comer, Minho le pasó el niño a Newt.
Comimos en silencio, a pesar de los balbuseos de Dylan, que parecia querer hablar.

Cuando terminamos de comer, Minho habló.

-Tal vez deberíamos entregarnos a esos malditos mierteros

-Maitos Merteros- repitio Dylan.

-¡Minho!-le regaño Newt-no quiero que hables asi en frente de él, ni de Alaia.

-Lo siento-se disculpó, pero sonreía por lo que Dylan había aprendido. Siguió hablando-CRUEL descifrará esa cuestión del plano y todos viviremos felices y comeremos perdices.

-Eso ni siquiera es gracioso-repuso Newt-Aun que realmente encontraran la cura, ya lo vieron allá afuera en el Desierto. Tendrá que pasar un maldito montón de tiempo antes de que el mundo vuelva a la normalidad. Y si eso ocurre... nosotros no llegaremos a verlo.

-Después de todo lo que nos han hecho, yo ya no les creo nada-afirmó mi hermano-Ese Janson se cree muy inteligente, piensa que todo se reduce a una especie de bien mayor: dejemos que la raza humana estire la pata o hagamos cosas terribles para salvarla. Hasta los pocos que son inmunes probablemente no durarían mucho donde el noventa y nueve punto nueve por ciento de las personas se han convertido en mountruos psicópatas.

-¿A dónde quieres llegar con eso?-preguntó Minho.

-Lo que digo es que antes de que me neutralizaran la memoria, yo debía estar de acuerdo con toda esa basura. Pero ya no-explicó.

-Entonces, Tommy, no desperdiciemos nuestra próxima oportunidad-dijo Newt.

-Mañana-añadio Minho-Como sea.

-Esta bien. Como sea-concordo mi hermano.

Newt bajó a Dyl, que pataleaba para bajar, y este comenzó a caminar tambaleandose.

-Será mejor que dejemos de parlotear e intentemos dormir un poco-Dijo Newt, luego de unos minutos, levantándose y tomando a Dylan de nuevo en brazos, este volvió a patalear para bajarse, pero se rindió al ver que Newt no cedía.

Thomas se acostó en una de las literas, en la de abajo, y Minho se acostó en la parte superior de la misma.
Newt y yo nos acostamos en la otra litera, en la parte de abajo, con Dylan en medio de nosotros. Ninguno de los dos estaba dispuesto a que él y Alaia duerman juntos. Porque Dylan era muy inquieto y podría lastimarla.

Luego de dar muchas vueltas en la cama, sin poder dormir; sin darme cuenta, me quede dormida.

Los amodoro ♥♥

*Belu

Un Bebé En El Área (Newt y tú) CORRIGIENDO ORTOGRAFÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora