the police. »j.b

12

—Que tonto eres, al creer que soy la buena de la película.

—No creí tampoco que fueras la maldita zorra de la película, se que eres buena. No seas estúpida.—Justin respondió en seguida un poco tenso.

—Ya sabes Bieber, si algo pasa tú y tú familia terminaran en un lindo cementerio.—guiñandole el ojo.

—Como quieras. Se que igual no serías capaz de hacerme esto a mi.—dijo riendo con hipocresía.—Soy el único que te haría sentir bien en la cama.

—¿Me estas retando?—pregunto.

—No, para nada. Pero, sabes que es así, el tiempo decidirá todo, nena. Ahorita estas un poco pasada con los tragos, mañana estarás llorando por sentirte culpable de la muerte de tu hermana, maldita estúpida.

—¡Callate! No la nombres aquí.

—Vamos Kendall, calmate un poco—la abrazo fuertemente.

Estos dos tenían serios problemas de locura o de bipolaridad, están totalmente locos, pero ellos sabían que cada uno era él tornillo del otro.

—¿Por qué me haces esto?—de un momento a otro Kendall comenzó a sollozar.—eres una persona buena, yo no Justin. Tienes que ir lejos de mi, abandona esta misión...

—Y... ¿sí ya lo hice?—Kendall volvió a mirarlo a los ojos con los ojos un poco rojos.

—¿Abandonaste la misión?

—No, pero la deje para que nada te pasara. Se lo mal que estas por lo de tu hermana, lo menos que quisiera es que te mataran.— besó su frente y la abrazo de nuevo.

Al separarse de ella, llamaron a su timbre, eran las once de la noche, ¿quién molestaría a esta hora?

—Quedate aquí, iré a ver quien toca.—señaló en el mueble.—sí escuchas a un señor mayor de edad, escondete. Si no terminaras muerta.

Kendall asintió, y se sentó en el mueble a ver quien seria.

Al abrir la puerta se encontró con su querido amor de su vida.

—¿Cara?—sorprendido por la visita de la chica.

—Vine solo a decirte algo, Justin. La misión esta un poco atrasada, tienes que matarla.

Kendall pudo escuchar lo que decía la chica que se encontraba en la puerta con Justin. De un momento a otro se paro, y quiso enfrentar a la chica, pero pensó que pasaría si lo haría, un enfrentamiento entre Justin y la chica, o que pasaría.

—¿A quién va a matar?—se paró Kendall y miro a la rubia de cabello amarillo, y ojos azules al frente de ella enfrentándola.

—¿Te estas acostando con ella?—
Preguntó Cara un poco celosa.—Ahora resulta que te acuestas con la misión. Pensé que eras un buen policía, no uno que quiere tener sexo con su misión. Idiota.—se fue y dejo a Justin con los nervios en las manos.

Justin se tenso de un momento a otro, y cerro la puerta de un tirón que hizo que Kendall se pusiera nerviosa. Estaba apunto de meterle una cachetada, pero calmó ese demonio que tenía adentro, sabia lo que pasaría si lo dejaba salir.

—Ahora para ti soy una maldita misión, ¿no?—Kendall tenia lágrimas en los ojos por lo que la rubia había dicho.

—Callate, no sabes lo que acabas de hacer.-se paro y se preparo un vaso de jugo de naranja.

—Sabía que eras un maldito estúpido, no debí confiar en ti.—se paró y se dirigió a la puerta.—Adiós, Justin. De nuevo hiciste lo malo, gracias.

—Adiós.

Salio de la casa de el chico, ya era un poco tarde y eso no hacía que se detuviera. Pero lo pensó bien antes de que la mataran en la calle.

Tocó el timbre de la casa de Justin.

—Sabía que volverías.—rió.

—Llevame a mi casa, ya mismo.

—No.—la agarro fuertemente del brazo.—¡No sabes una mierda lo que acabas de hacer! Eres una estúpida, acabas de arruinar todo con ella.

Las últimas tres palabras para Kendall fueron un gran dolor en el corazón, pero así fue, esas tres simples palabras solo hicieron que rompiera en llanto. Sus ojos se nublaron gracias al gran chico que no sabía lo que decía dolía, pero llorando dijo en sí misma "todo estará bien, kendall."

—Dormiras en mi habitación, yo aquí en el mueble. Aquí tienes una camisa mía para que te la coloques y duermas cómoda.—dijo realmente serio.

Los dos caminaron en un gran silencio hacia la habitación de Justin, todo lo que había ocurrido los dejo pensando.

—Esta es tu habitación por hoy. Que duermas bien, Jenner. Buenas noches.—y se fue de la habitación dejando un gran silencio.

Al salir el chico de la habitación, empezó a llorar y es que ni ella misma sabía que ese chico era el primero en tocar sus labios y sentirla totalmente sobresaltada. Duro más de una hora llorando, mientras que Justin sólo pensaba.

¿Qué habrá pensado Cara de Kendall o al revés? Soy un maldito estúpido, debí ser bueno con Jenner, por que sí no me mataría. Además Cara esta casada, el sabía que a Kendall eso le dolió lo ultimo que había dicho.