Cap 43.

2.5K 163 2
                                    

Lucas.

La mayoría se había ido a dormir. Yo aún no podía pegar un ojo. Pensaba en todo lo que pasó, en los ojos de mi princesa llenos de dolor, en su voz débil cuando me decía que me fuera, en su pequeña carita roja de tanto llorar, en como se alejó de mí cuando la fui a besar, en todo. Me siento malditamemte mal. Antes de dormirme subí hasta la habitación y puse mi oído en la puerta para ver si se escuchaba algo. Lo que escuché me partió el corazón. Mi princesa, mi bebé, llorando por mí culpa, por mi estúpida culpa. Sus sollozos se podían escuchar, no tan altos pero si audibles. Pensé en tocar la puerta, pero no quiero hecharle más leña al fuego.

Maldeci para mis adentros y bajé. Pues, me tocaría dormir en el sofá. Bueno, no está tan mal. Apagué las luces y me acosté.

De tanto pensar no me di cuenta que estaba llorando. Dios, primera vez que lloro por una chica. Vale la pena que es lo importante.

Me acomode bien y entre lágrimas y pensamientos me quedé dormido.

Kendall.

Mire la hora en mi reloj, marcaba las 4:17am y yo aún no pegaba un ojo. No podía dejar de pensar en esa escena. No sé qué me dolió más, si lo que vi o la cara de Lucas cuando le dije que lo odiaba. Me partió el corazón verlo llorar pero no puedo ser tan frágil. Estaba acostada, acariciando el lado donde él duerme, ¿donde estará?. Su perfume entro en mis fosas nasales, lo cuál hizo que pensará en él. Recordé todos los momentos felices junto a él, sonreí inconcientemente por eso.

No, no puedo estar feliz con él. Debo ser firme.

Estaré bien si se que está aquí en la casa. Abrí la puerta con cuidado y miré a los lados. Silencio, mucho silencio, y un poco oscuro. Caminé con cuidado con miedo a tropesarme y caer por las escaleras. Bajé poco a poco. La luz de la cocina está prendida, así que baje en silencio por si allí estaba alguien, tire mi vista y nada, no había nada.

Apenas volteo, Dios. Me sentí tan mal verlo dormir en el sofá por mí. Estaba sin camisa. Sé que Lucas tiene el sueño pesado así que con cuidado me senté a su lado. Sonreí, lo amaba y mucho. Acaricie su cara, a lo cuál él se acurruco un poco. Volví a sonreír, Dios hasta dormido me saca sonrisas. Decidí subir y dormir, ya es tarde.

Llegué hasta mi habitación, le busque unas sábanas a Lucas ya que hacía frío allá abajo, y una almohada. Fui y se la puse con cuidado de no despertarlo, luego lo arope. Vi como se acurrucaba entre las sábanas.

Subí, creo que no pasaron ni 10 minutos cuando me quedé dormida.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~⊙~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Siento algunos rayos de sol en mi cara, lo cuál es un poco molesto. Después de un buen rato debatiendome si levantarme o no, decidí levantarme. Cepille mis dientes, lavé mi cara y cambie mi ropa.

Mire la hora, las 11. Normal, todos nos dormimos muy tarde.

Bajé, escuché algunos susurros. Al llegar al final de la escalera me encontré a Lucas hablando con Mel. Me quedé allí, nuestras miradas estaban conectadas. Saudi mi cabeza lentamente y salude.

-Buenos días- dije seria.

-Buenos días Ken...- dijeron al mismo tiempo.

Pasé hasta la cocina y allí estaba Diego quedándose dormido en la mesa sobre su plato de comida. Amber cocinaba quién sabe qué y Sofía comiendo. No he visto a los demás, quizás estén durmiendo.

-Buenos días- dije.

-Hola- me saludó con una gran sonrisa Amber.-¿Cómo te sientes?-

-Mejor, gracias- sonreí.

Una Casa,  3 Problemas. Where stories live. Discover now