This is (not) our baby || Stydia

21.

Cinco meses más tarde

Stiles POV

Liam cumplía un año hoy. Estábamos preparándole una fiesta, en la que habíamos invitado a la pareja oficial ya, Scott y Kira. Lydia se estaba encargando de organizarlo todo, quería que todo estuviese perfecto para el cumpleaños del pequeño.

En los últimos cinco meses, hemos cuidado aún más a Liam, si es que se podía. Desde la "agradable" visita de sus padres biológicos, no nos separábamos de Liam ni un solo momento. El simple hecho de pensar que podrían quitárnoslo me aterraba completamente.

Sin embargo, no todo había sido malo. Habíamos hecho progresos con el bebé, bastante destacables, además. Para empezar, Liam había aprendido algunas palabras, estaba comenzando a hablar poco a poco. Ya no decía solamente papá, decía también mamá y lobo, por su tan amado peluche. Había comenzado a comer algo más, como purés caseros. El asma estaba controlado, no tenía muchos ataques. Y cuando los tenía, Lydia o yo íbamos corriendo con el inhalador para solucionarlo. La relación con él estaba resuelta, él se había acostumbrado a nosotros y nosotros a él.

Mi relación con Lydia... Difícil de definir. Si estuviese en un caso policial, claramente estaría por determinar. Mis sentimientos no tardaron mucho en ser claros para mí: estaba enamorado de ella. No me daba vergüenza admitirlo, pero parecía que las palabras agobiaban mucho a Lydia, por lo que nunca lo he dicho en voz alta, al menos a ella. Ella tampoco hablaba mucho de sus sentimientos, por lo que no sabía si sentía atracción o amor propiamente dicho, pero no quería presionarla con preguntas. ¿Por qué estaba por determinar? Porque no estamos saliendo, al menos no en una verdadera relación. Esto no quita para que nos besemos y actuemos como una pareja, salvo que no lo somos. La situación era complicada, pero había tomado una decisión: le pediría ser mi novia en el cumpleaños de Liam, es decir, hoy. No tenía motivos para estar nervioso, porque como Scott me había asegurado, Lydia tenía tantas ganas como yo por salir conmigo. Pero claro, la preocupación estaba ahí, especialmente teniendo en cuenta mi historial de relaciones amorosas pasadas.

Salí de mis pensamientos en el momento en que vi a mi mejor amigo y Kira entrar por la puerta, de la mano. Vi como Lydia fue rápidamente a saludarles, dándoles dos besos a ambos. Yo me acerqué a saludarles también, habría sido de muy mala educación no hacerlo.

Después de una amigable charla, nos sentamos, dispuestos a comer. Por supuesto que él primero en hacerlo fue Liam, ayudado por Lydia y yo. Veía a Lydia hacer tonterías con Liam para que comiese y yo no podía hacer otra cosa que mirarles con admiración. Mi mirada sin embargo adquiría un brillo distinto al mirar a Lydia. Un brillo que reflejaba muchos sentimientos, pero, especialmente, amor.

La hora de los regalos llegó justamente después de haber comido la tarta. Scott y Kira le regalaron a Liam un pequeño traje de lacrosse, una de las pasiones que ambos compartían. Era muy gracioso porque en la espalda ponía Dunbar y el número 9, como si él mismo fuese un jugador del equipo.

—Estaría gracioso que gracias a este regalo se aficione al lacrosse, ¿no creéis? —preguntó Kira emocionada.

—Claro, pero si le pasase algo malo la culpa iría para los tíos Scott y Kira—contestó Lydia, con una falsa sonrisa.

—Era una broma, pelirroja. Yo protegería a Liam como si fuese mi hijo—respondió Scott. Yo le miré mal—. No, hijo no. Hermano, como si fuese mi hermano, mucho mejor.

—Menos mal que has rectificado amigo, estabas a punto de convertirte en hombre muerto—contesté yo, escondiendo una sonrisa. Todos reímos, sabiendo que claramente estábamos bromeando.

...

Una vez la fiesta terminó, Scott y Kira se fueron a su piso, ya que ahora vivían juntos. Parecían haberse fusionado en una persona, hacían prácticamente todo juntos. Cuando se fueron, cogí aire lentamente. Había llegado el momento en que le pediría salir a Lydia, estaba nervioso.