21.

58.6K 3.4K 502
                                    

—Pareces poseída, Holly —Dash suelta en un gruñido, logrando captar mi atención—. ¿Puedes sentarte en ese sillón y tratar de ser normal?

—¿Puedo irme a casa? No quiero estar aquí —Me alejo del enorme ventanal, llamando la atención de Dash. Sus ojos grises se despegan de la computadora frente a él, y me observa con su característico ceño fruncido—. Lo siento, pero no puedo pretender que no estoy preocupada por la posibilidad de que tú hermano entre aquí a matarme.

—Adrien no es como yo, Holly —Puedo sentir la amargura en su voz, pero él cambia su tono con rapidez—. No te hará daño, primero debe pasar sobre mí.

—Dash —Me rio, sintiendo como si sus palabras fueran una completa locura—. ¿Te estás escuchando? Es tu hermano de quien hablamos... No puedes ponerme a mí sobre tu familia.

—Tú me pusiste por sobre tu familia, Holly.

Me mantengo callada por sus palabras, pero niego segundos después.

—Yo no tengo familia, Dash —Digo, pasando por alto a Alison—. Siempre fuimos mi madre y yo... sólo nosotras dos.

—Alison es tu familia, Holly —Él suelta, sin preocupación alguna—. Ahora toma ese teléfono y pide algo para que podamos comer, aun no puedo solucionar esto.

—No voy a pedir nada —Me cruzo de brazos, observando algo irritada a Dash—. Aun no entiendo porque sigo aquí, tú no me mandas.

Aun con brazos cruzados, soy capaz de acercarme a la silla junto al tatuado para tomar mi mochila. Los gruesos y largos dedos de Dash se cierran en mi muñeca, tirando de mí hasta lograr tenerme entre sus piernas, parcialmente apoyada en el escritorio.

—No vas a salir de aquí sin mí, Holly.

—El problema que tienes con Shawn no me concierne, Dash —Intento liberarme de su agarre pero lo único que logro es que él apriete más y se coloque de pie frente a mí. Su cabeza se agacha un poco para observarme a los ojos. Estaba enojado, podía sentirlo por la tensión irradiando su cuerpo—. Ustedes me están envolviendo en problemas que son sólo de ustedes.

—¿Crees que te tengo aquí sólo porque quiero? —Él gruñe, liberándome de su agarre y observándome completamente enojado—. Estoy tratando de salvar tu pellejo, Holly.

—Mi pellejo no estaría en problemas si no fuera por ti —Suelto, completamente enojada. Cuando Dash se aleja unos cuantos pasos de mi, logro tomar mi bolso, colocándolo sobre mí hombro—. Soluciona toda tu mierda con Shawn, Dash. No quiero formar parte de esto.

Le doy una última mirada al moreno lleno de tatuajes, que parece contrariado consigo mismo, antes de abandonar la gran oficina.

Mis pasos se ven frenados cuando encuentro a Adrien a unos cuantos pasos de mí. Su boca se abre, pero no le doy tiempo a decir nada, por si sola, hago mi camino hacia el ascensor y agradezco mentalmente cuando este no tarda más de tres segundos.

Ocupo el último rincón del ascensor cuando me encuentro con tres personas más, todas vistiendo traje, todo completamente en orden, menos yo. Yo no pertenecía a un lugar como este.

Yo sobraba en tanta elegancia.

En cuando la puerta se abre en la primera planta, salgo lo más rápido posible, recibiendo malas miradas por parte de los ejecutivos. La chica que anteriormente había temblado por la presencia de Dash, me observa arqueando una ceja.

Claramente sacando a relucir que debía marcharme.

—Que tenga un buen día, gracias por su visita. —Su voz suena con socarronería, aumentando el enojo en mi sistema. Cuando suelta una pequeña risa, me detengo, respirando con tranquilidad.

BAD GUYS I: AGGRESSIVE © |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora