Camp Goys [1] EDITANDO

44.

COLT

Me sudan las manos, estoy templando de los nervios. No tengo idea de cómo haré esto, nunca tuve una cita.

Termine de subir la foto  a Instagram y al instante obtuve un me gusta de Fiona, carajo.

Realmente me siento preocupado por ella, nunca la vi tan enojada conmigo. Sé que últimamente nuestra relación de amigos tenían altibajos pero tampoco es para llegar al punto de matarme a golpes, a veces me complica tratar de entender a las chicas.

Estoy esperando a Leah, le pregunté como le gustaría que sea  su cita ideal y dijo que le gustaría al aire libre mirando las estrellas, por eso estoy en la orilla de la laguna con un ramo de flores y  una caja de bombones.

 Espero que no sea demasiado, no quiero espantarla en nuestra primer cita.

Para pasar el rato mire un poco mi Instagram y un comentario de mi madre me llamó la atención.

'Mi hijo en una cita, oficialmente es un hombre grande *emoji llorando* Jon Fawaeer mira nuestro muchacho acaba de conseguir novia #padressorgullosos #papadicequenoteolvidesdelcondon #teamomibebe #mihijoconnovia #nolopuedocreer'

Y por esos motivos no se debe tener a los padres en las redes sociales, siempre buscan la manera de avergonzarte. Oprimí bloquear su usuario y listo.

Fin de mi miseria.

—Perdón por la tardanza, tenía que escaparme de mi prima y Eleanor. A veces pueden ser algo molestas.

La salude con un beso en su mejilla y no aparte la mirada de ella en ningún momento, hoy está más linda que nunca. Lleva su pelo recogido en una simple coleta sin nada de maquillaje y un vestido blanco suelto con unas zapatillas.

Está vestida normal y en cambio yo, me puse un traje.

Leah me observo y se tapó la boca con una mano.

 —¿Había que venir formal? Lo siento mucho, viniste elegante y yo con estas ropas, estoy horrible— dijo apenada.

La agarré una mano para que se sentará a mi lado.

—No te preocupes, creo que exagere un poco. Tu estas hermosa.

Me dio una pequeña sonrisa.

—Y tú estás impresionante. El traje te hace ver interesante.

—Gracias, mira esto es para ti —le entregué el ramo de flores y la caja de bombones—  Espero no asustarte pero debía traerte un presente.

—Es muy amable de tu aparte— agarró la caja pero no el ramo, eso llamó mi atención. 

Que tonto, estamos en el siglo 21, nadie quiere flores. Le hubiese traído un teléfono de última generación eso hubiese sido un buen regalo para la primera cita.

—¿No te gustaron? Sé que no son lindas, las corte de la ventana de mi cabaña y están un poco secas pero....

—No es eso, en serio me gustan— me interrumpió —Pero soy alérgica a las flores.

Rápidamente tire las flores a la laguna. El agua les hará bien, creo.

—Lo siento mucho.

Leah comenzó a estornudar, le ofrecí un pañuelo que llevaba siempre conmigo.

—No lo sabias, no te preocupes.

Me tranquilice después de ver que Leah estaba bien.

—¿Qué quieres hacer?— pregunte nervioso, esta cita está saliendo demasiado mal y eso que recién comenzó.