LavinaDespués de las "disculpas" del neandertal y de la persecución fallida ya que no pude encontrarlo, cabe destacar que es muy bueno corriendo o escondiéndose; volví a mi cabaña y para mi sorpresa se encontraba Brent hablando muy animadamente con Bailey, mientras ella le sonreía <Raro> pensé, ella no es de conversar con gente que no conoce, es más odia a la mayoría de las personas sacando a su familia y a nosotras.
- ¿Qué hace el enemigo aquí? – cerré la puerta y me quedé parada enfrente de ellos buscando una explicación
-No soy tu enemigo.
- Tu amigo es mi enemigo, por lo tanto, también lo eres tú ¿qué haces aquí?
- Traje personalmente a Jesse para que se disculpara y ahora estoy platicando con tu amiga ¿Esta mal?
Él miro a mi amiga haciendo que esta se sonroje. ¿Qué le hicieron a Bailey?
Sacudí mi cabeza -Supongo que no.
-Bueno, me alegro. Ahora debo irme. No quiero meterme en problemas. Fue un gusto hablar contigo- le dijo a Bailey, luego me observo - Lavina te doy una sincera disculpa en nombre de Jesse, no es malo solo le gusta bromear y a veces no mide las consecuencias.
Rodé los ojos, no tiene que hablar por su amigo, aunque lo encontré algo lindo de su parte, pero conste que sigue siendo un enemigo y se lo hago saber haciendo que se carcajeé.
Se despidió de nosotras con un beso en la mejilla, una vez que cerré la puerta, me volteé para ver a mi amiga que ya está acostada mirando el techo.
- Brent parece lindo ...-deje la frase sin terminar esperando que dijera algo.
Me miro por un momento y frunció levemente sus cejas- Brent, un chico que no conozco se quedó conmigo un rato mientras nuestros amigos se perseguían por el campamento como dos locos. Si, me pareció linda su actitud - se encogió de hombros.
- ¿Solo su actitud? Oh, vamos estabas muy a gusto platicando con él. Algo paso- señale acusándola.
La conozco prácticamente desde que usaba pañales y sé que si un chico se le acerca, sabría perfectamente cómo ahuyentarlo sin problemas.
- No paso nada, tu sabes como soy con respecto a los chicos. Y no te olvides, el pacto sigue en pie. ¿Las chicas? –dijo cambiando de tema.
- Creo que están bañándose- me acomode en la cama- ya se han bañado tres veces en lo que va del día. – Bailey se acostó en su cama.
-Acabaran con el agua.
Apague las luces.
- Buenas noches- dijo Bailey.
Cuando estoy por cerrar los ojos, mis otras dos amigas entraron a la cabaña en silencio, las escuché hablar un rato y después caí rendida en un inmenso sueño.
*
- No puedo comer esto, no es sano - comento Ciara apartando su plato de hamburguesas, ¿COMO PUEDE RECHAZAR ESTE MANJAR? CLARAMENTE NO ESTA BIEN.
Me encogí de hombros y agarre su hamburguesa para ponerlo en mi plato. Mis amigas me miran fijamente ¿qué hice ahora?
- ¿Qué? -dije con la boca llena, toda una señorita.
- Tienes tres hamburguesas. ¿Cuatro no son suficientes? - Marleen trato de quitarme una, pero le pegue en la mano para que la deje en su lugar, con mi comida nadie se mete.
- No, sabes que no. Ahora si me disculpan necesito seguir alimentándome, estas preciosas imploran ser devoradas por mi- señale a las hamburguesas.
- Hoy es la fiesta, ¿qué se pondrán? – hablo Ciara concentrada en su ensalada baja en calorías.
Típico almuerzo suyo.
- Lo que llevo ahora- dijo Bailey señalándose, lleva unos jeans rotos en las rodillas, unas vans y una remera con rayas. Ciara la miro y negó con la cabeza resignada. Después le pregunto a Marleen, y entraron en una charla, pero no puse demasiada atención.
- ¿Y tú? – me pregunto finalmente mi amiga, le hice una seña con la mano para que espere a que mastique mi comida.
- Iré con lo que llevo puesto, no me da ganas de arreglarme.
- Pero, el lugar estará lleno de chicos, necesitas estar bien vestidas - argumento Ciara. Alguien olvido nuestro pacto.
- Recuerdas el pacto, ¿no? -pregunto Bailey- Ademas no necesito vestirme para nadie. Me siento cómoda con lo que tengo puesto y así iré.
*
Y aquí estamos en la puerta del gimnasio "vestida como la gente" según Ciara, digamos que después de vernos a Bailey y a mí con nuestros atuendos, se negó a dejarnos salir. A diferencia mía, Bailey le dijo amablemente que si no dejaba de molestarla cortaría su pelo mientras durmiera. Así que, dejó de insistirle y me hizo una Fashion emergency, así lo llamo.
- ¿Listas para brillar? – hablo Ciara emocionada chocando caderas con Marleen.
Bailey y yo nos miramos y suspiramos rendidas.
Algo en común que tengo con ella, es que odiamos las fiestas.
- Solo quiero entrar y sentarme durante toda la noche - gruño Bailey. Le di mi mano como apoyo moral, estoy igual o casi peor que ella, digamos que no me siento cómoda con la ropa que traigo.
Nos adentramos a la fiesta que ya es un descontrol y eso que apenas pasaron veinte minutos desde que comenzó.
Marleen y Ciara se van directo a la pista de baile y se unen a unos chicos mientras que nosotras nos quedamos paradas sin saber que hacer mirando a la multitud enloquecer.
- Iré por algo de tomar, ¿quieres algo? - le grite al oído, por la música alta es imposible hablar. Ella asintió y le dije que me espere en una mesa que está cerca de la puerta del gimnasio.
Me dedico a ir en dirección por donde se encuentran las bebidas esquivando a todos, estoy caminando cuando alguien me empuja y siento que algo corre por mi espalda, obviamente alguien acabó de derramar su bebida sobre mí. Me di vuelta lista para increpar a la persona por su descuido y claro, dios no puede ser tan bueno conmigo. Realmente estaba feliz por no habérmelo cruzado en todo el día.
- Neandertal- dije pausadamente, mirándolo con odio.
- Estoy muerto ¿no? - pregunto alejándose de mí, cuando quise reaccionar, Jesse ya está corriendo en dirección a la puerta. Rápidamente lo perseguí mientras iba empujando a todas las personas que se interponían en mi camino.
Este chico se está convirtiendo en una pesadilla.
En tu pesadilla.
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