Y no habló, no gritó, no dijo nada, se quedó quieto ahí mismo, con Krystal de su lado. Volví a mis sentidos cuando Jack habló, obviamente sin darse cuenta de lo que su comentario me había afectado.
- Vamos al estacionamiento, seguro ya llegó mi bebé.
Vaya, debía de sospecharlo, un egocéntrico que le ponía un nombre a su carro, o ¿hablaba de su novia?
Cuando bajamos me acerqué directamente hacia mi auto.
- ¿Te parece si nos vamos en mi bebé? - ¡Ja! Lo sabía. Observé a mi auto desconfiada, caminé tras él, lo que vi me sorprendió.
Oh no, tenía años que me montaba en una de esas.
- ¿Qué? Es solo una bicicleta, ayuda al medio ambiente. ¿Quieres que consiga un casco?
Negué, no me sorprendía la bicicleta si no el hecho de que él la manejara y le llamara "bebé". Pestañé unas cuantas veces y acepté, él ya se había subido, debía de pararme sobre los diablitos, bueno los metales que sobresalían de las llantas, eso creía.
- Vamos seguro cabes sentada atrás de mí. - Había una barra sobre la llanta trasera, aquello dolería.
Puso su suéter sobre la barra y me senté de costado, bueno no era tan incómodo aunque con el tiempo dolería. Llevaba las manos cerradas en un puño agarrando solo un pequeño pedazo de su playera. ¿Qué demonios estaba haciendo? Tenía miedo.
Él tomó con delicadeza mis muñecas e hizo que le rodeara la cintura con mis brazos. Me exalté un poco, luego recordé que el contacto físico no era tan difícil o penoso en otras culturas. Él iba hablando acerca de dónde iríamos, primero a la Torre Namsan, luego un recorrido por los grandes mercados tradicionales, algunos museos, templos, y finalmente el Rio Han. Me sentía comprometida a acompañarlo, principalmente porque era mi jefe y luego porque por alguna extraña razón, quería saber más de él.
Su perfume me inundaba los pulmones, el aire provocaba que estuviera fresca y aunque no había sido para nada mí tarde, estaba relajada.
Dejamos la bicicleta en un anclaje especial para ellas y comenzamos a subir los escalones de la Torre Namsan, era extraño puesto que Minho nunca me había llevado ahí.
- ¡Vamos! Cuéntame de ti. - Me animó Jack.
Lo miré perpleja, que rápido estaba pasando todo esto. Pensé ya bastante tarde que iba para otro lado, así que comencé por decirle lo esencial.
- Pues soy mamá de un niño hermoso llamado Minhyuk, estudié Cinematografía y arte en mi país y vine aquí porque quería estudiar en el extranjero, sin contar que me enamoraría.
El abrió bastante los ojos, parecía sorprendido a lo que acababa de decirle.
- Vaya, eso no me lo esperaba. ¿Entonces estás casada?
Fue mi turno de sorprenderme, la palabra casada, me causaba escalofríos.
- No
Dije cortante, seguimos subiendo los escalones.
- Entonces... Cuéntame de ti. - No quería seguir con el ambiente pesado.
- Pues soy de Londres, comencé haciendo vídeos idiotas en Youtube, después fui madurando y ¡Me encanta viajar por el mundo! Me encantan los niños, los ancianos, el ambiente.
Todo aquello lo dijo mostrando una hermosa sonrisa, como si por sus ojos pasaran imágenes. Parecía que disfrutaba de todo ello, me parecía encantador. Me hizo pensar en qué hubiera pasado si no pedía el intercambio y conocía a Minho, Jack era el tipo de hombre con el que me hubiera gustado estar. ¿Estaba engañando con el pensamiento? Según yo no, peor era enterarme que el hombre que hacía unos días me había hecho el amor como nadie, ahora se estaba alejando de mí y sobre todo llevándose más con Krystal a quien había escuchado decir que su objetivo sería atraparlo para ella.
Debía averiguar si era cierto lo del beso que Jack mencionó.
Luego de subir la Torre Namsan, y enterarnos de la historia que guardaba, decidimos ir a alguno de los templos marcados en la lista, ahí no fue tan incómodo, la mayoría del tiempo nos mantuvimos en silencio, respetuosos y haciendo oración y reverencias como nos pedían. Jack parecía bastante cómodo con eso y a mí no me molestaba.
Luego de haber terminado decidimos comer en un puesto que encontramos en la calle, pusimos la bicicleta a nuestro lado y comimos, o mejor dicho nos atragantamos disfrutando de los bocadillos; tenía unas ideas muy equivocadas de Jack, esperaba que fuera de otra manera. Definitivamente era agradable.
Pedí que regresáramos al edificio de la KBS para recoger el carro, me hizo prometer que lo acompañaría una vez más a otro recorrido y justo estaba por subirme al auto cuando habló.
- Lamento haber utilizado que soy tu jefe para hacerte salir conmigo, pero soy más tímido de lo que crees. Y lamento el doble si te hice sentir incómoda ahora que ya formaste una familia, solo quería saber cómo eras.
La forma tan tierna por la que habló me hizo sonreír.
- No lo lamentes, fue agradable. Por favor que esto no nos afecte en el futuro.
Ambos nos sonreímos y despedimos, a pesar de estar tranquila debía llegar a casa y hablar con Minho había cosas que preguntar.
Hello 0/
Bueno pues este capítulo fue más para describir la forma de ser de Jackson Harries.
Por cierto ¿Pueden ver los gifs?
Yo no :( jajaja
Buenas noches-tardes-días. (Depende cuando lo lean)
