El lago

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Me dejé caer esperando lo peor, cerré los ojos, mantuve la respiración y caí. Sentí el golpe del agua rompiéndose y luego una paz increíble. Mi cabello estaba comenzando a tomar su tono celeste, mi cuerpo palideció, luego de un instante pude respirar normalmente, y me di cuenta que no había nada en el lago, absolutamente nada.

-Rubí, ¿Estas seguro que este lago es peligroso?

-¿Qué?¿Entró en él? Debe salir de ahí de inmediato.

-Cuando cumpla mi propósito.

-Bien, como usted diga, cuando apenas caes al lago, parece un lugar muy calmado, pero avance hasta el fondo de él Madamme, y no sólo encontrará lo que busca, también encontrará cosas muy peligrosas.

No tardé en observar que el lago tenía la forma de un embudo que el centro era increíblemente oscuro, cualquiera pensaría que no había nada más ahí que yo y el agua, era la nada misma.

-Allá voy.

Nadé hacia la oscuridad, al poco tiempo descubrí que se me hacía muy fácil nadar, iba demasiado rápido.

Luego de nadar por veinte minutos comencé a creer que jamás encontraría la esmeralda, estaba oscuro por todas partes, cuando mi vista se acostumbró a la penumbra, comencé a ver pequeños destellos por todas partes.

-¿Acaso es posible que algo brille en la completa oscuridad?

-Todo es posible.

Me acerqué a un grupo de brillos y tomé uno de ellos, este se iluminó aún más, era una perla muy bonita... Decidí guardarla en mi brasier. Luego tomé otro brillo y este también se iluminó, era un rubí.

"Me encanta, pero... No puedo llevarme todo"-pensé-.

Seguí buscando entre todos los brillos hasta dar con una enorme esmeralda.

-Ésta esmeralda es inmensa...

-Entonces tomaste la correcta, sólo vete y no hagas ruido.

-No sé por que tanta preocupación, aquí no parece haber nada, es sólo un mito, supongo...

-Todos los cuentos son reales en Baj Terra, Mia.

Me alteré al oír una fina, celestial y melodiosa voz.

Era un canto hermoso, pero me estaba mareando, sacudí la cabeza hasta recuperar a mí cerebro, me sentía sedada, como si algo estuviera bloqueando mis pensamientos y relajando todo mi cuerpo.

-¿Quién esta ahí?

-¿¡Como osas, entrar en nuestro hogar y robar nuestras piedras!?

-¿Quién eres? No puedo verte.

No podía entender de dónde salia aquella aterradora voz.

-Soy una hermosa sirena.

De pronto una luz parpadeo en frente de mí hasta encenderse, era unos de esos extraños peces con luz, un diablo negro.

Grité al ver a aquel ser horripilante, una clase horrible de sirena. Tenía los ojos rasgados de un color negro intenso, su cabello parecía paja pegada y todo su cuerpo esquelético estaba rodeado de escamas asquerosas. Al menos yo, creía que las sirenas eran mitad pez mitad humanas.

-Un placer conocerte.-Dije tratando de evitar el asco-. Pero debo irme.

-Deberás quedarte aquí, niña agua.

-Wito, si no le importa.

-¡No me importa! ¡Ahora eres Mia!

-Ya soy Mia.

Eternal Fire [Completa/En Corrección]Where stories live. Discover now