CAPITULO 13. SOLO AMIGOS

9.5K 551 53
                                    

No puedo pensar en este momento en lo que dijo Miles. Me dejó muy desconcertada. ¿Qué puede saber? Nunca le dije a nadie la verdadera razón por la que me fui de California.

Salgo del edificio lo más rápido que puedo. Brenda está muy asustada por su hijo, se cayó de una silla y, por lo que dijo Erick, fue algo importante.

Corro por el pasillo buscándola, está sentada en la sala de espera hecha un manojo de nervios. Brenda no es el tipo de mujer que sabe sobrellevar las crisis.

- Brenda ¿Cómo está Tommy? – me abraza enseguida cuando me ve.

-Se cayó... no lloraba... se estaba quedando dormido- me dice entre hipos.

- Tranquila, Erick va a cuidar de él, voy a entrar para ver cómo está todo - Brenda abraza a su esposo Tom sollozando en su hombro. Su esposo es marine, muy pocas veces está en casa, es un alivio que esté con ella en estos momentos.

Tommy está en el quirófano, la caída le provocó un coágulo de sangre que le impedía una oxigenación normal. Observo Eric a través del vidrio, es un excelente cirujano y un gran hombre. Tiene todo lo que una mujer puede soñar: cariñoso, comprensible, sincero, detallista y lo más importante no ha roto mi corazón. No puedo permitir que Miles me haga dudar. Me casaré con él, la oportunidad de un nosotros se terminó en cuanto le di el sí a Erick.

La operación toma dos horas, en cuanto Erick sale del quirófano me acerco a él.

- ¿Cómo está Tommy? Dime la verdad

- El golpe fue bastante fuerte, pero afortunadamente pudimos extraer el coágulo, queda esperar a que despierte y evaluar los daños – lo abrazo con lágrimas en los ojos, ese pequeño es muy importante para mí, lo he tenido en mis brazos desde el día que nació y él lo sabe.

- Perdóname, Erick, no quiero que estés enojado conmigo – le digo sincera, no habíamos discutido antes.

- No hay nada que perdonar, morenita; perdóname tú a mí por mi arrebato, me da mucha rabia ver a ese hombre ahí como si nada hubiera pasado.
Quisiera defenderlo y decirle que él no hizo nada, que solo fue un ciego que no veía más allá de sus narices y no lo puedo culpar por eso; me contengo. No quiero empeorar las cosas. Caminamos juntos hacia la sala de espera donde una muy preocupada Brenda corre al vernos.

- ¿Cómo está Tommy? ¿cómo salió en la operación?
Él le explica lo que me dijo hace un momento. Brenda deja escapar un largo suspiro.

- ¿Qué crees Erick? No me mientas, ¿estará bien?

- Tranquilízate, Brenda, el es pequeño aún y podrá recuperarse rápido. Dale tiempo de sanar. Sé que es difícil pedirlo, pero debes tener paciencia.

- Es mi culpa, me descuidé un minuto y se subió en esa silla. Si le pasa algo, me muero.

- Debes calmarte, Brenda, no es tu culpa, los niños son muy traviesos a veces y tú no querías que eso le pasara.

- Gracias por estar con nosotros, Tate. No sé qué haría sin ti.

Han pasado dos días y Tommy aún no reacciona, no me he movido del lado de Brenda, cada minuto su angustia crece, es un dolor que solo una madre puede entender. La he tratado de convencer para que vaya a descansar un rato pero se niega. Lo único que puedo hacer es estar aquí con ella.

- Brenda, voy a buscar un café ¿quieres algo? – Ella agita su cabeza diciendo que no, lleva horas sentada al lado de Tommy, no quiere apartarse de él, se siente responsable por lo que le sucedió. La culpa es un veneno que si no lo sacas de tu cuerpo te puede consumir. Camino distraída mirando el suelo cuando escucho mi nombre.

UGLY LOVE: FOREVER YOU (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora