Maroon. | Joe Burrow. (L2)

Capítulo 45.

- ¿Te agrada la idea de que vayamos a vivir con papi? - Volvió a preguntar Elisse, para ella era completamente importante la opinión de su hijo, pero al saber que él ya se refería a Joe como lo que era, su padre. Joshua no respondió nada, bajo la cabeza y se quedó abrazado a Elisse.

- ¿Y papá Mac se enojará si me voy con ustedes? 

Joe y Elisse se miraron entre ellos. Inmediatamente Joe lo tomó en sus brazos para abrazarlo.

- No, no, Josh, no quiero que creas que esto hará que Mac deje de ser un padre para ti, el siempre lo será. 

El pequeño levantó su diminutivo rostro para ver a Joe, quién viera la escena de los tres ahí presente podría confirmar que en efecto eran una familia feliz, pero definitivamente no, había altibajos y aún había demasiado por resolver, todavía quedaban cosas por hacer y algunos problemas que debían deshacer antes de poder ser una familia. Podía decirse que esa tarde era el inicio de su comienzo como familia, pues Joe y Elisse pudieron convivir con su pequeño Joshua, explicándole sólo lo que harían, no querían molestar a Zac, después de la pequeña discusión que había tenido con él, habían decidido quedarse en un hotel, se llevaron las cosas necesarias para Joshua y ellos, sólo sería hasta que a Joe le confirmarán la casa dónde vivirían los cuatro. Sus dos hijos, y ellos dos, como siempre debió de ser. 

Había sido un día bastante agotador para ambos, lo mínimo que querían era dormir, Joshua estaba en medio de ambos en la cama sumamente grande de la suite de lujo que Joe había reservado para los tres, Elisse acariciaba la cabeza de su pequeño hijo y también lo arrulló, el dormía tranquilamente mientras recibía los cariños de su madre, ella no se imaginaba que esto lo uniría a los tres, que podrían estar juntos después de todo lo que había pasado. Pero sin duda agradecía al cielo por tener a sus tres más grande amores.

- ¿En que tanto piensas? - Preguntó Joe mirando a Elisse, seguía despierto para hacerle compañía.

- En todo y a la vez, puedo decirte que en nada.- Se rió. Hizo una corta pausa mientras se acomodaba en la cama. - ¿No te parece que todo esto es como un sueño?

Él también se rió, pero no por burla hacía ella, sino porque se sentía igual a ella. Si hace tres años le hubieran dicho que este sería su momento, no lo entendería. 

- Sí, lo es.- Respondió con voz suave.- Pero es el sueño más hermoso que he tenido.

- Nunca imaginé que podríamos tener esto.- dijo con voz temblorosa por la emoción, nadie podía describir la felicidad y entusiasmo que tenía.- Estar aquí juntos, como una familia... es más de lo que jamás había soñado.

Joe asintió, se movió en la cama tratando de no despertar al pequeño, sólo para besar la frente de Elisse, posteriormente hizo lo mismo con Joshua.

- Yo tampoco lo imaginé.- Admitió sinceramente.- Pero ahora que lo tenemos, no cambiaría nada por el mundo.

Se quedaron en silencio por un momento, se miraron fijamente. Probablemente esa calma que ambos sentían no la volvería a sentir en un millón de años, y es que sólo ellos dos se entendían se entendían. Sabían que estaban exactamente donde debían estar, en el lugar donde sus sueños se habían convertido en realidad.

(...)

Elisse no supo en que hora se habían dormido, pero al abrir sus ojos sólo notó que Joe y Joshua dormían como ángeles a su lado, así era como se veían para ella, como unos ángeles. Se movió en la cama sin despertarlos, ella aún se sentía cansada pero el malestar en su cuerpo se había ido por completo, pues parecía estar como nueva, ni siquiera lucía como si hubiera tenido un accidente. Se paró de pie para dirigirse a la mochila de ropa que había traído de su casa, primero se ducharía y después los despertaría.

Durante la ducha pudo notar que siempre estuvo una pequeña bolita en ella, y se trataba del crecimiento de su pequeño bebé, no podía creer que vivía con Joe ese momento, porque cuando estuvo embarazada de Joshua no pudo experimentar el amor de verdad y los sentimientos más lindos que se supone que una mujer embarazada debería sentir. 

Después de la corta ducha, Elisse se detuvo en seco, sus ojos se posaron en el teléfono de Joe, que descansaba sobre el tocador pero vibraba fuerte y parecía no detenerse nunca. El zumbido continuó, Elisse pensó en salir y responderlo, pero notó como Joe se despertaba para tomarlo en sus manos, por lo cuál decidió quedarse detrás de la puerta para escuchar la conversación. 

- ¿Bueno? - Respondió él, se estuvo en silencio un par de minutos, levantándose de la cama.- Sí, lo entiendo.

Escuchó la voz de Joe, ligeramente tensa. Se preguntó por varias veces lo que podía tratarse, pero no se animaba a salir de su escondite.

- Gracias por avisarme. Iré más tarde.

Elisse sintió un nudo en la garganta mientras su mente se llenaba de preguntas y temores. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué Joe sonaba tan preocupado?, no quería adelantarse a sacar ideas y mucho menos quería dudar de Joe, las cosas estaban muy bien entre ellos como para que se empeorará de está forma con sus inseguridades. Antes de que pudiera pensar en algo más, se cambió de ropa rápidamente para que unos minutos después Elisse pudiera salir del baño justo cuando Joe se sentaba en la cama.

- ¿Estás bien? - Preguntó Elisse, tratando de obtener una respuesta positiva de él. 

- Sí, ¿tú lo estás? ¿cómo te sientes? - Preguntó acercándose a ella.

Ella asintió, pero la preocupación no abandonó sus ojos y tampoco sus pensamientos, la seguían carcomiendo pensando que se trataba de algo malo entre ellos.

- Tenemos que hablar.- Dijo Joe con voz seria, y Elisse sintió que su corazón se hundía en su pecho.