Capítulo 26.

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Robin no dejaría que las cosas se quedarán así, ella estaba decidida a descubrir la verdad. A escondidas de su esposo y incluso de Joe, se dirigió a la casa de Zac, dónde seguramente podría encontrar a Elisse. Su hijo le había llamado para explicarle que estaba con unos amigos, así que no estaba preocupado porque estuviera con Elisse, tenía la fé en encontrarla y poder enfrentarla, defender a su hijo y tal vez,  a su nieto. Llegó al lugar y se encontró con Zac, el padre de Elisse, quién la recibió en su despacho para que pudieran hablar con privacidad y sin nadie que pudiese interrumpirlos. 

- Zac, necesito hablar contigo.- Dijo Robin, tomando asiento frente a él.- ¿Cuánto tiempo me harán estúpida tú y tu hija? 

Soltó ella, Zac frunció el ceño sorprendido.

- ¿Qué? ¿De que me hablas? - Estaba lo bastante confundido ante su forma de hablar, tan directa y sin miedo, parecía estar decidida. 

Robin tomó su teléfono y lo dejó en el escritorio, ahí estaba mostrándole las fotos en su teléfono. Zac frunció el ceño al ver las imágenes. 

- ¿Qué estás haciendo con esas fotos, Robin?

- Sabes perfectamente lo que hago con eso, si no entonces no estaría aquí. - Ella le sostuvo la mirada, paso en seco para soltar lo que no quería hacer más largo.- ¿Joe es el padre de Joshua?"

Zac vaciló por un momento antes de responder. 

- Robin, no sé a qué te refieres. Elisse estuvo casada con Mac, y Joshua es su hijo.

Pero Robin no estaba dispuesta a aceptar respuestas vagas, mucho menos a tolerar más mentiras suyas. 

- Las fotos no mienten, Zac. Ese niño se parece demasiado a Joe. Necesito saber la verdad.

Zac mantuvo su postura, pero sabía que no podría hacerlo por mucho tiempo.

- No sé de qué estás hablando, Robin. Elisse no ha dicho nada al respecto, le creo a mi hija. 

La frustración se reflejó en los ojos de Robin, era tan insistente.

- Zac, quiero ayudar a Joe a encontrar a su hijo, pero necesito la verdad. Si estás encubriendo algo, te estás metiendo en un problema más grande. 

- Señora Burrow, no estoy encubriendo nada. Si Elisse tiene algo que contarme, es asunto suyo. Pero si quiere respuestas, hable con ella.

Robin no respondió nada más, tomo su celular y se dio la vuelta para salir de su despacho. Zac la siguió de inmediato para despedirla la salida, las mentiras de su hija los habían llevado a esto y ahora no había oportunidad de que pudieran escapar y que él hiciera algo para salvarla. Salió con Robin, pero se quedó pasmado en el umbral de la puerta al ver a quién se bajaba del taxi frente a la casa. Volvió a casa preocupado, marcó el número de Elisse una y otra vez, pero el teléfono solo sonaba sin obtener respuesta.

(...)

El sol se reflejaba en la dorada arena de la playa mientras Elisse, Joe y Joshua disfrutaban de un día tranquilo junto al mar. Parecían una familia feliz, pues las risas de Joshua resonaban en el aire, casi uniéndose con el dulce canto del mar y los suave murmullos de las olas que besaban la orilla. Elisse observaba con una sonrisa llena de amor a Joshua y Joe jugar, cualquiera que los mirase podría saber la verdad, que eran padre e hijo. 

Para Elisse sería difícil ocultarlo tanto tiempo, amaba a Joe con todo su corazón y tenerlo a su lado era lo más lindo que le había pasado, pero sólo podía pensar en que su familia se destruiría si se lo decía, al igual que el no hacerlo acabaría con ellos. Contempló la escena de su pequeña y linda familia, pensó en miles maneras de decirle a Joe que aquel niño con quién armaba castillos de arena era su hijo.

Decidió acercarse cuando vio que Joshua y Joe se limpiaban las manos en su ropa.

- ¿Ustedes lo hicieron? - Preguntó ella en cuanto se acercó.- Está genial.

- ¡Es el castillo más fuerte y valiente de todos! ¡Y tiene un dragón que protege el tesoro!

- Eso suena emocionante. ¿Cómo se llama el dragón? - Se puso de rodillas en la arena junto a ellos. Sabía que Joe no le despegaba la vista.

- Hmm, creo que se llama... ¡Dragón Patriot! Porque es nombre del equipo de papá. 

Sus últimas palabras le generaron un nudo a ambos, se miraron fijamente, pues Elisse aún no le contaba el hecho de que se divorciaría de él y que no era su padre. Así que Joe decidió romper el hielo de la situación.

- ¡Es un gran nombre, Joshua! ! Y seguro que es el mejor dragón del mundo.

Elisse abrió la boca para responder, pero se vio interrumpida por el teléfono que sonaba impaciente en su bolsillo de su short, así que se puso de pie.

- Denme un segundo, chicos, ya vuelvo. - Antes de irse dejó un beso en la cabeza de Joshua, uno en la frente de Joe.

Elisse se alejó hacia la silla dónde estaba anteriormente para sacar su teléfono de la bolsa de su short. Al ver la pantalla, notó que era su papá quien llamaba, y su expresión se volvió seria al escuchar sus palabras.

- Elisse, necesito que vuelvas a casa. Se trata de Mac, está aquí y te esta buscando. 

Maroon. | Joe Burrow. (L2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora