36: "CLARO QUE NO"

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Andy estaba muy preocupado, no había señales de Ellen o Jane y Danna se comportaba muy extraña en todo el día, parecía como si tuviera la mente en otro lugar.

Los demás del grupo "F" estaban esperando en la sala a que Andy les de alguna noticia, pero no llegaba.

—  Debemos hacer algo — opinó Alex quien los acompañaba en ese momento — Jane tiene que saber todo.

— Me encantaría decirle a Jane todo — habló serio Joseph — pero no haría más que empeorar las cosas.

— ¿Y si se lo decimos a la señorita Weisz? Tarde o temprano ella debe saberlo.

— No — Kail intervino — no tenemos pruebas, ya no las tenemos, nadie le creería a Jane, mucho menos a nosotros.

— Debemos hacer algo entonces — levantó la voz — no podemos quedarnos de brazos cruzados.

— Yo puedo irme — soltó Joseph, ambos lo miraron con cierto confusión — no puedo dejarlos con estos problemas.

Kail se levantó acercándose al hombre.

— Tienes que ir, es tu sueño.

— Si, pero... ustedes son mis amigos.

— Seríamos unos pésimos amigos si provocamos que te quedes — dijo Alex.

Andy estaba a punto de regresarse con el grupo, cuando recibió la llamada de Ellen diciéndole que no las esperen, que estarían bien.
Con eso en mente, Andy logró calmarse un poco y regresar con el grupo, quienes le llenaron de preguntas sobre Jane.

— Ella estará bien.

Con esas simples palabras todos soltaron un suspiro de alivio, aunque no significaba que todo se solucionó, por lo menos sabían que Ellen estaba con ella.

Ellen convenció a Jane de ir al hospital a visitar a Katy, al principio no quiso porque no quería que Katy la viera en ese estado tan lamentable, pero accedió luego de unos cuantos besos.

Al llegar el panorama ya no era como la primera vez, habían renovado gran parte del hospital, los pasillos eran más limpios e iluminados y ya no había ese apuro en los enfermeros en correr, sino que el hospital logró contratar a más personal de apoyo para que el trabajo se reduzca y algunos voluntarios tambien apoyaban en cosas más simples. Ellen se sentía orgullosa, más todavía al saber que Jane fue la cabeza de ese proyecto.

Al llegar donde Katy, la pequeña las recibió con suave grito, estaba muy felíz de verlas a ambas, Jane se acercó a darle un abrazo.

— ¿Cómo estas pequeña? — sonrió al verla — hace tiempo que no vengo.

Con la intención de que pasen tiempo juntas, Ellen las dejó mientras iba a resolver algunos asuntos respecto al hospital.

Sin perder tiempo, ambas jugaron "UNO" por mucho rato mientras se preguntaban sobre sus días, la conversación avanzó hasta que Jane sintió la necesidad de preguntarle algo sumamente importante.

— Katy... — estaba muy nerviosa — ¿Fui buena persona contigo?

La niña dejó de mirar las cartas para ver a esa chica con confusión, pero con todo gusto se lo diría.

— Bueno... tu arreglaste a mi muñeca Jane, me visitas seguido, y estas conmigo siempre.

La mayor comenzó a recordar esos momentos formando una sonrisa, pero no duró mucho al pensar en Melissa.
La niña lo notó, Jane se veía triste y Katy también lo estaría.

— Nadie hizo todo eso por mi — continuó — eres la mejor persona que conocí.

Esas palabras salidas de una niña tan inocente conmovieron a Jane, tal vez no era tan mala como pensaba. Katy hizo a un lado todo y se arrastró para darle un abrazo a Jane, al recibirlo la chica derramó lágrimas abrazándola tambien.

SOMOS INSTANTESWhere stories live. Discover now