Capítulo 44

76 15 3
                                    

Advertencia: Esta historia NO ES MÍA, es una adaptación del libro "Allegiance of Honor" de NALINI SINGH, por lo tanto todos los derechos de la historia son para ella, al igual que los personajes de Masashi Kishimoto usados en esta adaptación, ahora si disfruten de su lectura.

Advertencia 2: A partir del libro 11 la traducción de la saga es realizada por fans, por lo que el trabajo de esta traducción es de; CarpeDreams.


KAGUYA LEYÓ EL reporte corto y conciso que Ivy Jane Zen envió a la Coalición Gobernante sobre la seria deficiencia en la Red.

De humanos.

Nadie, pensó Kaguya, habría predicho eso, y ni siquiera el poder y el dinero a disposición de la Coalición Gobernante y asociados podría repararlo. Queriendo confirmar esa suposición, contactó a Sakura para preguntarle si los Psy podrían coaccionar psíquicamente a los humanos para vincularse a ellos.

Los otros Es estarían horrorizados y pasmados por su pregunta, pero Kaguya sabía que aunque Sakura estaría igualmente horrorizada, no estaría pasmada. Su hija entendía cómo funcionaba su cerebro.

–No –respondió Sakura, sus ojos cardinales estrellados con chispas de colores por lo que fuera que estuviese haciendo antes de su llamada–. Nadie sabe cómo los humanos están integrados en la Red sin ser una parte activa de ella, pero sí sabemos que la coacción no funciona. –Su expresión se ensombreció–. Si fuera así, habría más secciones saludables.

Sakura no necesitaba decirlo en voz alta, no a Kaguya: era demasiado tonto imaginar que no ha habido al menos algunos Psy en el mundo controlando a humanos, a través de un enlace telepático en algún punto dado en el tiempo. En lo personal, ella siempre prefirió utilizar otros métodos, no debido a ninguna consideración ética, sino porque el control mental era un desperdicio de tiempo y energía.

Después de la llamada a Sakura, realizó una a Inoichi, usando cada herramienta a su disposición para mantener la discusión estrictamente sobre los negocios de la Coalición. Era más difícil de lo que debería haber sido. No solo porque Inoichi poseía un intelecto tan afilado y una voluntad tan fuerte como la suya, sino porque en cierta forma él neutralizaba sus defensas sin siquiera realizar algún acto agresivo.

¿Un hombre así de poderoso, esa inmisericordia helada cuando la ocasión lo ameritaba, quien no la eliminó del tablero de juego mientras estuvo herida e indefensa? ¿Uno que en realidad la protegió?

No concordaba con la visión del mundo de Kaguya.

Tampoco su propia reluctancia a ver sus acciones como una debilidad que ella podría explotar.

O su decisión de llamarle cuando pudo perfectamente haberle enviado un correo electrónico.

Finalizando la llamada antes de que él viera demasiado, como tenía el hábito de hacer, se alejó del comunicador fijo en la pared para dirigirse a su escritorio y a su silla ejecutiva de cuero negro. Como no había nada que pudiera hacer para ayudar a los Es en su búsqueda de una solución para el problema humano, no desperdiciaría su tiempo en ello. Cuando y si ellos necesitaran de sus habilidades y conexiones, la contactarían.

Ya que por ese día terminó con los negocios de la Coalición, pasaría la segunda mitad de la mañana revisando el soporte financiero de una compañía de aviones de alta velocidad que estaba interesada en adquirir por...

Dolor atravesó su abdomen antes de que alcanzara su asiento.

Un cuchillo apuñalándola una y otra vez.

Aferrándose a su silla, inhaló y exhaló hasta que desapareció. Los cirujanos y la Psy-M hicieron un trabajo espectacular, pero ella sufrió una herida crítica, y existían ciertos tipos de sanación que simplemente no podían acelerarse.

Alianza de HonorWhere stories live. Discover now