Fate: Mi madre es el Rey Arturo

Capítulo 8: Clarent - espada real radiante y brillante

Las consecuencias de rechazar a Roma pronto se hicieron evidentes.

El gran ejército de Lucio Tiberio no apareció en la costa de inmediato. Después de todo, las fuerzas romanas necesitaban algo de tiempo de preparación.

Sin embargo, inmediatamente surgieron problemas con las rutas comerciales que importaban alimentos del continente.

"¡Ni un solo grano caerá en manos de los rebeldes!", eso es lo que ordenó el emperador romano.

Por supuesto, con el poder centralizado de Roma occidental, los funcionarios locales todavía podían desafiar en secreto las órdenes del Emperador.

Pero el precio de los alimentos se disparó.

"Bueno, no tenemos otra opción. Desde que el Emperador lo ordenó, nuestros riesgos han aumentado".

"Estamos contrabandeando alimentos a riesgo de perder la cabeza, por lo que el aumento de precios ya es bastante bueno. Deberían estar agradecidos, británicos".

Los comerciantes fingieron estar indefensos mientras se reían en secreto.

Gracias a ello, la situación en Gran Bretaña, que ya estaba experimentando una reducción de cosechas, empeoró aún más.

Aumentó la frecuencia e intensidad de las disputas entre los Caballeros de la Mesa Redonda.

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"Merlín, ¿cometí un error?", Artoria, preocupada por estas consecuencias, dijo. "Todo el mundo se muere de hambre. Si no tenemos los alimentos importados de la Galia, Gran Bretaña no podrá aguantar..."

"En realidad no~", dijo Merlín en un tono relajado. "Mostrar la dignidad de un rey también es un aspecto importante. Si te sometieras a Roma, también dañarías la majestad de un rey~"

"Sólo...olvídalo".

Artoria sintió que debía haber sido una tonta al discutir con Merlín sobre este asunto. Entonces, volvió a sacar a relucir el tema de la guerra.

Gracias a su benevolente tío, el rey Vortigern, la influencia de los sajones en Gran Bretaña se hizo más fuerte. De norte a sur ocuparon casi toda la isla.

Aunque Artoria, como gobernante, había ganado varias batallas desde su ascensión, todavía quedaba un camino considerable por recorrer antes de expulsar por completo a los sajones de Gran Bretaña.

Entonces la guerra tenía que continuar. Artoria, como comandante en jefe, junto con Merlín como estratega, se prepararon para la guerra.

"Pero también sabes que esto no logrará mucho ~", le dijo Merlín a Artoria al final. "Incluso si matas a diez mil sajones, habrá cien mil más desembarcando. Mientras Vortigern los ayude, pueden desembarcar fácilmente en la isla. Es interminable".

"La guerra contra Vortigern se librará, pero no ahora...", respondió Artoria y decidió cambiar de tema. "En la próxima batalla, deja que Artorius se una a la lucha".

"¿En serio? Sólo tiene trece años...hmm, ¿o catorce?"

"Agravain me dijo que ya es un excelente caballero. Ya sea manejo de la lanza, manejo de la espada, manejo de la equitación o tiro con arco, sobresale en todos ellos...y tú mismo le has enseñado bastante, ¿no es así, Merlín?"

"Jajajaja~"

Incluso si se descubriera el secreto, el mago de las flores solo se rió alegremente, sin preocuparse en absoluto.

Al darse cuenta de que este tipo no tenía remedio, Artoria decidió cambiar de tema.

"¿Qué pasa con Artorius? ¿En qué ha estado ocupado últimamente?"