2da. TEMPORADA. capitulo 31 "final"

234 25 12
                                    

Se levantó de golpe lo más rápido que pudo, sentándose en la orilla de la cama y calmó su respiración, me lanzó la sábana encima y me reí pero en realidad me quejé de la cortada de inspiración que me había dado.

     —Jane, Jane, ¡Jane!...— me talle el rostro frustrado y la mire de reojo.

     — si vas a estar aquí Jeff... vas a seguir mis reglas, y ponme en contacto con Liu que ha de estar preocupado.—

...

Y así pasó, Jane se comunicó con Liu y habló con él durante horas, llegamos al acuerdo de que me quedaría los siguientes meses esperando la llegada de quien se llamaría Jenna, o así lo determinó Jane, no me consultó para nada si yo tenía alguna idea, nombres grandiosos como "linda princesita", "frambuesa", los mejores nombres para una niña linda.
Las primeras semanas fue difícil acoplarme a sus rutinas y fue difícil aprender a usar la lavadora y secadora, ya no quería ser un estorbo, y verla respirar con dificultad, y como la gran panza le molestaba, tuve que acoplarme a ser un adulto bastante independiente y no sólo aportar económicamente. Mi sonrisa se mantiene oculta tras cubrebocas y bandas en las mejillas; y así seguirán por que no quiero que lo que vea Jenna al nacer sea un maldito psicopata. Tambien el sobrevivir estos últimos dos meses sin tocar a Jane han sido una total locura, no se como he soportado tanto tiempo, yo mismo me sorprendí de mis capacidades de soportar, por que se que no está cómoda y se que en estos momentos que está a apunto de explotar puedo hacerle daño de alguna manera.

—¿Jeff?, ¿me estás escuchando?.— llamó mi atención Jane mientras tenía su mano hacia mi esperando a que le pasara la almohada. Se la di y me senté a un lado de ella mientras con las llenas de los dedos acariciaba los finos cabellos de Jenna. Jane la acomodó en la almohada y comenzó a darle pecho, se miraba hambrienta y está rápidamente se aferró a su mamá. —últimamente tienes la mente en otros lados, ¿debería preocuparme Jeff?.— negué y seguí mirando a Jenna comer con sus ojos cerrados.

—no, solo pensaba, ¿Liu vendrá la próxima semana cierto?.— Jane asintió y tomó la mano de la pequeña sin dejar de mirarme — pero, yo no tengo por que irme ¿cierto?, ¿te gusta aquí Jane?, podemos quedarnos aquí si es lo que quieres...— mire a sus ojos en busca de esperanza sin dejar de acariciar los finos y suaves cabellos de mi hija; Jane rió y arqueó su ceja.

—¿y quien te dijo que te quedarás con nosotras? Eso lo has asumido tu solo.— habló en un tono confuso y medio sonrió, como si me estuviera molestando a pesar de querer sonar lo más seria posible.

— por favor Jane, me porte bien estos últimos meses, y quiero estar aquí, no me puedes pedir ahora que abandone esta cosa pequeña bien hecha.— roce mi nariz en la pequeña cabeza de Jenna y después un corto beso. — soy adicto a su olor, a sus sonidos, su suavidad, incluso sus lloriqueos, así como soy adicto a ti, a tu esencia, a tu amor, y ahora a verte siendo madre—. Sabía que la estaba haciendo sonrojar, antes de poder decir cualquier otra palabra, Jenna hizo un sonido de haber terminado y Jane la colocó sobre su pecho para hacerla repetir, solo teníamos un mes de conocerla pero era la cosa que más amábamos en la vida.

— de verdad tenemos problemas serios, ¿no lo crees?...— ambos reímos y asentí. — yo no, yo no podré perseguirte o ser la misma después de esta pequeña cosita, quiero ser feliz Jeff, y yo sé, cómo me lo dijiste un día, jamás podré reemplazar a la familia que tuve pero, quiero empezar de cero con esta.—

— lo sé, lo sé y lamento lo que te grité, empecemos desde cero, todos juntos, ¿te parece?—. Me estiró a Jenna y la tomé con cuidado entre mis brazos, recargándome en el sofá. —no he dejado la medicación, aprendí a hacer desayunos...—

— quemados...— me reí y torcí los ojos.

—bien, quemados, pero nunca escucho que te quejes...— suspiré y miré a Jenna que dormía plácidamente, sin inmutarse de nuestra conversación. — lo que quiero decir es que, llevamos un mes maravilloso, ¿por que no una vida entera así? Yo te amo y te seguiré amando Jane, y si tú me amas, que yo se que si, ¿por que no intentarlo?.— Jane se levantó del sofá y se frotó sus brazos mientras miraba por la ventana, suspirando, como si pensara en cada palabra.
Deje a Jenna en el sofá con unos cojines con mucho cuidado y me acerque a Jane por detrás, timándola de la cintura y levantando un poco su suéter para poder rozar un poco su piel con mi dedo índice mientras encajaba mi rostro en su cuello.

—te dije que no ibas a quedar mal, recuperaste tu cuerpo muy rápido y te quedaste con lo mejor.— le susurre mientras cerraba los ojos y me dejaba envolver por su aroma.

—yo quiero vivir aquí, tiene un lindo jardín donde Jenna podrá jugar.— asentí y me froté en su cuello como un gato lo haría.

— todo lo que tú quieras, yo te complaceré en todo, tu eres mi vida, mi amor, mi adoración, mi todo.— soltó una risita y giró su rostro para mirarme a los ojos.

—¿y Jenna?.— ambos volteamos a verla y volvimos a nosotros.

— ella también, pero se que un día se irá y hará su vida, pero tú y yo estaremos juntos de por vida, tú siempre serás mi Janie...— me quise acercar y plantarle un gran beso pero me contuve y solo me limité a sonreír.

Grande mi sorpresa cuando ella fue la que se volteó a besarme y me rodeó el cuello con sus brazos pegándome más a ella, poco a poco me sumergí en el beso y mis manos se metieron bajo la blusa acariciando su espalda, me separé un momento después de un largo beso y me lamí los labios.

— solo estás incitándome a romper mi promesa.—
Sonrió y beso la punta de mi nariz.

— está bien, te revocó de tu castigo, vamos a ser felices Jeff.—

-TRUST ISSUES- [+15]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora