Headcanon's Zoro

💚118💚

Una tarde lluvia de viernes, Zoro se encontraba en la sala de su hogar charlando con el pequeño Kaito sobre temas triviales. Entre tanta conversación llegaron (sin saberlo) al tema de la fuerza física.

-¿Bromeas? Mi mamá te gana -Declaró Kaito muy seguro de su respuesta.

Zoro respondió con una carcajada ahogada, casi inflando sus mejillas.

-Por favor Kaito, una pelea de mí contra tu madre acabaría en menos de lo que tú esperas -Kaito permanecía con su boca abierta por las palabras de Zoro- _____ no puede contra mí.

Enseguida, el pequeño Roronoa cubrió su boca con una de sus manos.

-¡Le diré a mamá lo que dijiste! -Señaló acusante a su padre-

La expresión de Zoro que antes era de superioridad cambio a una de sorpresa, alzando sus cejas.

-¿Enserio vas a ir de chismoso?

Al no recibir negación de su hijo, tragó en seco.

-Ya se, te daré veinte dólares si no se lo dices -El rostro de Zoro trataba de demostrar tranquilidad.

Su hijo instantáneamente lo miró con el ceño fruncido.

-Mi dignidad no vale veinte dólares -Declaró indignado.

Y ahí fue donde su único plan se fue por la tubería. Entonces, si Kaito no cedería con dinero, aún existía otro método...

-¿Ah si? Entonces le diré a tu mamá que sacaste un siete en el examen de matemáticas y yo lo firmé para que ella no te regañara.

-Pero nos van a regañar a los dos

-No me importa, si me delatas te llevo conmigo.

Solo le tomó un par de segundos a Kaito para decidir.

-Entonces papá, aquí no pasó nada -Extendió su mano a Zoro, quién enseguida la estrechó formando una especie de trato-

Ambos creyeron salir ilesos, pero sus planes se fueron por la borda sin que ellos supieran. Pues _____ estaba escondida tras el marco de la entrada hacia la sala, donde escuchó toda y cada una de las palabras.