Sabor a almendras -Camren-

CAPITULO 19

Lauren POV

No quería dejar a Camila esperando por mi mucho rato, así que tomé todas mis herramientas y salí disparada. Pero antes de atravesar el umbral de la puerta de salida, recordé algo.

El dibujo del girasol.

No era normal en mi hacer tal tipo de regalos, menos a alguien con quien solo había compartido una noche; pero Camila me hizo sentir totalmente diferente y sentí una cercanía que no acostumbraba con otras mujeres.

Camila era únicamente perfecta.

Estaba segura que la morena me diría que era una cursi; pero no quería dejar pasar la oportunidad de demostrarle que había sido más que una sesión de sexo para mi. Que de verdad me importaba todo lo que sucedía con ella, quería seguir conociéndola y compartir mas tiempo juntas. 

Creo que me estaba enamorando, y si, estaba un tanto asustada, pero las ganas de estar junto a Camila eran mucho más fuertes que el miedo que me poseía al pensar en volver a permitirme ser vulnerable frente a alguien más. 

Así que tomé el post it, tome mi bolso y las llaves del auto; y salí hacia el elevador. Una vez dentro de él, apreté el botón de planta baja y esperé llegar allí. Cuando escuché el tan familiar pitido que indicaba mi destino, di un paso hacia delante y comencé la marcha al abrirse las puertas. 

 El momento a continuación fué una total pesadilla.

Camila no estaba en el hall del edificio. Mis ojos no lograban encontrarla. En cambio divisé a Jeremías hablando en una postura firme, con una rubia.

Me encontré pidiendo que por favor no sea quien yo creía que era. Pero como siempre, las cosas no salen como uno las planea.

Mis pasos resonaron cuando salí del elevador, ocasionando que Jeremías se girara hacia mi con una mirada de pena. Cuando lo tuve de frente, mire a su espalda y confirmé mis sospechas.

-¿Dónde está Camila? - dije con tono firme mirando hacia Jeremías.

-Buenos días señorita Lauren... Ca... Camila... -quiso responder, pero su voz no lograba salir claramente debido a los nervios que tenía por la situación.

-Camila se ha ido -dijo Chloe- No debía estar aquí en primer lugar.

-¿Disculpa? - dije elevando una ceja y mirando directamente a la rubia que aún permanecía detrás de Jeremías.

El chico se había quedado cuál estatua en su lugar. No había movido un solo músculo de su cuerpo desde que hablé por primera vez. Sentía pena por él, no se merecía estar en el medio de todo esto. Y me odiaba por haberlo involucrado al traer chicas constantemente.

-¿Qué hacía esa chica aquí? - dijo Chloe acercándose a mí y cruzando sus brazos en su pecho.

- ¿Y quien eres tu para hacerme tal pregunta? -dije ya notoriamente enojada.

-Lauren... -comenzó a decir pero la corté.

-No. - dije firmemente- Dime que le has dicho a Camila para que se vaya.

Chloe cambió su mirada a una de susto y abrió la boca para comenzar a hablar, pero nada salió de entre sus labios.

-¿Jeremías? - dije mirando al chico, esperando una respuesta.

El joven tragó en seco. Seguro se moría por desaparecer de tal situación.

-Jeremías, solo dime que escuchó Camila. - dije apenada- Por favor.

- La señorita... -dijo mirando a Chloe- le dijo que era su novia. Y... Y la chica simplemente se fue.

-¡Dios mio, Chloe! -dije mirándola enfurecida- ¿Por que mierda le has dicho eso? -pregunté esperando respuesta, pero no hizo más que mirar hacia otro lado - Te he dejado claro que no iba a pasar nada más entre nosotras, y debes entenderlo. No se cuantas veces más tendremos esta conversación... Esta bien, se que te llamé algunas veces, pero siempre fui clara con mis intenciones. No era más que pasar la noche y tu estuviste de acuerdo; sabes de sobra que no me interesa tener una relación contigo. No puedes negar que no te lo he dicho. Así que ¡¿Por qué le dijiste que eras mi novia?! No lo entiendo.

-Pero Lauren... Sabes que te quiero y si me dieras una oportunidad...

-No. Ya basta. -dije cerrando mis ojos y poniendo las manos en mi cabeza - Por favor vete.

-Pero...

-Vete, ahora. -respondí dándole la espalda.

Chloe no quería irse de allí sin antes dar pelea; pero al ver que no iba a obtener nada de mi decidió irse. Estaba segura que no se iba a dar por vencida tan fácilmente, y que esto traería consecuencias. Pero no quería pensar en ello ahora. Mi mente solo estaba en un lugar, y ese era Camila.

Un suspiro de derrota salió de mis labios. No podía creer que esto hubiera sucedido.

Me giré hacia Jeremías que ahora había tomado asiento y miraba hacia el piso.

-Jeremías... - dije y el chico levantó su cabeza y miró en mi dirección.

-Señorita Lauren, lo siento tanto... -comenzó a disculparse, pero lo detuve elevando una de mis manos.

-¿De qué hablas? No tienes que disculparte por nada. Soy yo la que debe pedir perdón, por ocasionar todo esto. Te aseguro que no era mi intención.

-No, esta bien. No es problema. Estaba siendo aburrido el día de todas formas. - dijo riendo y elevando sus hombros; y yo reí en respuesta.

-¿Dijo algo Camila antes de irse? ¿Viste a donde fue? - tenía tantas preguntas.

- No señorita Lauren. Lo siento. No dijo nada, simplemente se la vio sorprendida y se fue como un rayo. Y... creo que se fue en aquella dirección - dijo señalando hacia su lado izquierdo.

-Bien. -dije tomando mi cabeza, intentando pensar cómo iba a encontrarla ahora - Gracias Jeremías. Y nuevamente, lo siento por el escándalo.

Jeremías sonrió y asintió en respuesta; y volvió a su lugar.

No sabía cómo iba a hacer ahora para encontrarla. Lo único que sabía de ella era su nombre "Camila Cabello". No tenía trabajo, así que no tenía donde ir a buscarla, no sabía donde vivía y tampoco le había pedido su número de teléfono.

Felicidades Lauren, nunca fuiste tan estúpida como hoy.

Tomé mi bolso, que lo había dejado en el piso hacía unos minutos; y me dirigí a la salida. Caminé hasta mi auto y entré en él dejando mis pertenencias en el asiento del copiloto. Cuando estuve en calma, dejé caer mi rostro sobre el volante. Y mis ojos se llenaron de lágrimas. Mis manos se cerraron en puños dejando de color blanco mis nudillos.

¿Ahora cómo iba a encontrar a Camila?

¿Cómo iba a hacerle saber todo lo que provocaba en mi?

¿Cómo iba a hacer para dejar de pensar en ella?

¿Cómo iba a dejar de sentir su aroma en mi cama cuando volviera a la noche?

¿Cómo iba a poder dormir sin sentir su cuerpo a mi lado?

¿Como iba ahora a darle su girasol?