Juegos Del Destino.

Capítulo 12

Rin.

Una semana y media después.

Después de que Yako se recuperar al 100% fue llevado de regreso a Moscú. Cuando lo traje a la central Kagura se asustó de ver al animal, como hubiese deseado ordenarle que la atacará, pero todavía no es el momento.

Sesshomaru me ordenó que lo sacará pero no lo hice. Hemos estado ensayando la misión y la tensión sexual ha incrementado, Eri se quejo con el general ya que en ningún momento la hemos llamado para ensayar; como era de esperarse, Sesshomaru lo mando al diablo y se niega a aceptar que su padre esta un puesto más alto que él.

Ya es de noche y estoy en mi habitación, ensayando las palabras que le diré a la familia.

—… La vida no le quiso dar una segunda oportunidad a Tsubaki— decía mirando el espejo —, sin embargo, tenemos que comprender que murió peleando y aunque no fuera un miembro tan importante, tendrá un lugar especial en el cementerio familiar— finalicé.

Escuché la puerta sonar y fui abrirla, era Yura junto a Uh, ambos me saludaron.

— ¿Y bien? — pregunté, ya que me extraño su presencia.

— Su padre si estará en aquella reunión donde estarán los Italianos, la Yakuza y algunos clanes —. Me dijo Uh.

— Su prima también estará — termino Yura —, ese día usted le dará baja a la hija de su tío.

Asentí, ellos ya sabían los planes que tenia. Yura me ha demostrado lealtad.

— Perfecto. Si no la mató yo, quiero que uno de ustedes lo hagan, ¿entendido? — cuestioné.

Ambos asintieron y Yura me dijo que Kanna me ha estado siguiendo, que debería de tener cuidado con ella.

— Tal vez sospeché o nos escucho hablar. Ustedes también tengan cuidado — dije —, ahora vallan a dormir.

Ambos se despidieron y se marcharon.

[…]

El día de la dichosa misión llegó finalmente y como Yura me lo advertio, Kanna ha estado muy cerca de mi, ella piensa que no me doy cuenta pero esta equivocada.

La ropa que me pondría yacía sobre la cama. Me meti a bañar, me tome mi tiempo para ponerme bonita ya que la ocasión lo pedía. Mi cabello ya tenía su color natural y los pupilentes ya los había retirado, me alegre al mostrarme como soy.

Cuando terminé maquillaje, meti mi cuerpo en un vestido negro escote corazón fruncido de muslo con abertura. Iría de luto, ya que esta noche moriría mi prima. Me puse unos tacones negros de diez centímetros. El cabello lo llevaría suelto.

Yura entro a la habitación para decirme que ya nos iríamos al lugar donde se llevaría acabo la misión.

— È bella signora mia — me dijo en Italiano —, cuando el amo la vea se sentirá orgulloso de usted —.

Le sonreí, tener a mi papá orgulloso era lo primordial para mi.

Ambas bajamos al lugar donde nos reuniríamos todos, mis soldados me decían que me veía hermosa, incluso Renkotsu no me quitaba la mirada de encima y eso solo alimento mi ego.

— Se ve hermosa con el cabello y los ojos negros —. Me dijo Shippo.

Sonrei, si supieran que esa es mi verdadera identidad.

Eri ya estaba con Sesshomaru, no negare que se miraba bien pero no había comparación entre ella y yo, obviamente yo estaba en otro nivel.

— Mi coronel — salude mirándolo a los ojos.

— Te vez hermosa —, me dijo con la voz ronca.

Los días que estuvimos "ensayabamos" ganamos confianza y nos tuteamos sin pena.

— Gracias — susurre.

Me extendió su mano para que la tomará y así lo hice, me ayudó a entrar a la camioneta después de que Toga nos dijera que ellos se adelantarian.

En todo el camino la tensión sexual se sentía, incluso Eri se movía incomoda. Si ella no estuviera estoy segura de que ya nos hubiéramos quitado la ropa.

No nos quitabamos la mirada y para calentar más el asunto mordí mis labios mientras pasaba mi mano sobre mis muslos y pechos.

Su respiración sonaba agitada y sonreí satisfecha. El camino no era largo y cuando llegamos ayudó a bajar a Eri y después a mí.

Cuando estábamos en la entrada tomo a Eri de la mano y a mi me tomo de la cintura, cerca del límite de mis glúteos. Salió un joven que no reconocí, tal vez era un hombre común y corriente.

— El matrimonio Rizzo bienvenido a la fiesta entre clanes — 

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Capítulo ¿¿¿¿???

— Te has enamorado y no lo notaste — le dijo su madre.

Rin le daba la espalda, sus ojos se llenaron de lágrimas. Ella no podía sentir ese sentimiento, es más, no tenía derecho a sentirlo.

¿Qué pasará si ella queda embarazada de él? Fácil, su tío se cobraría el sangre por sangre. Se vengaria por lo que le hizo a Tsubaki.
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