Nankurunaisa (Gavi x Pedri)

18. Las primeras veces

Los siguientes meses fueron una montaña rusa de emociones para la pareja. Ambos se adentraron en su primera relación seria y además con una persona del mismo sexo, descubriendo el amor y la intimidad de una manera completamente nueva a como la conocían, pero con una serie de desafíos que con una chica sabían que no ocurrirían.

Cada día era un proceso de aprendizaje, de comprender y aceptar sus propios sentimientos y cómo mostrar su amor al mundo. Aunque deseaban abrazarse y besarse con total libertad, se restringían a gestos más sutiles, como besos en el cuello y abrazos, que solo se permitían en momentos especiales, como cuando celebraban un gol en un partido o en los entrenamientos cuando las cámaras no estaban mirando. Temían las miradas y los juicios de aquellos que podían no entender su amor.

La decisión de compartir su relación con los demás no llegó de forma impulsiva. Ambos creían que debían proteger su relación y asegurarse de que era fuerte y estable antes de enfrentarse a los comentarios y prejuicios externos. Fueron más de dos meses de cuidado y consideración, esperando hasta finales de octubre para revelar su verdad a alguien más.

El primero en quien confiaron fue Xavi, su entrenador. Sabían que podían contar con él, ya que desde el principio había mostrado su apoyo incondicional y los había animado a ser auténticos y ser ellos mismos. Sentían que Xavi era alguien en quien confiar plenamente, alguien que los entendería y los respaldaría contra cualquier problema que pudiera surgir.

Cuando de verdad tuvieron la seguridad de querer contárselo a alguien, se acercaron a su míster llenos de nerviosismo. Compartieron con él los detalles de su relación, las alegrías y los obstáculos que habían enfrentado juntos.

Y para su alivio, Xavi respondió con comprensión y apoyo, reafirmando su confianza en ellos y fortaleciendo aún más los lazos que los unían: -Me encanta que tengáis la confianza de contármelo. Y no os preocupéis que de mi boca no saldrá ninguna información hasta que estéis listos. Y si en algún momento sucede algo con este tema que os moleste, no dudéis en decírmelo para ayudaros en todo lo que pueda.-

Abrirse a alguien que no fuera de su familia o sus mejores amigos, significaba que su relación definitivamente era real para el mundo y no solo para ellos. Tenían a Xavi como un faro de guía y comprensión, una persona en quien apoyarse cuando las dudas y los temores amenazaban con perturbar su felicidad y aunque les jodiera reconocerlo, en parte se lo habían dicho por sus contactos. Sabían que si surgía alguna información, podía llegar a hacer que nunca saliese a la luz o que se olvidase por completo.

Gavi y Pedri le agradecieron enormemente que guardase su secreto sin ni siquiera tener que pedírselo. Reconocieron en él un verdadero ejemplo de integridad y humanidad, alguien que iba más allá de su papel de entrenador y su confianza en él se fortaleció aún más, sabiendo que tenían un gran apoyo en su viaje.

Después de que su conversación con Xavi fuera tan bien, tuvieron ganas de contárselo a alguien más. Pensaron en Lewan. Era una opción tentadora, ya que se llevaban muy bien. Sin embargo, teniendo en cuenta que había crecido en Polonia, un país conocido por su actitud conservadora hacia la comunidad LGBT, decidieron que sería mejor no decírselo por el momento. Temían que las creencias arraigadas en su país de origen pudieran afectar su relación.

Por esa misma regla, consideraron a Frenkie que, siendo de los Países Bajos, donde la aceptación de la diversidad sexual es más abierta, intuían que podría ser un buen aliado. Sin embargo, a pesar de coincidir en el centro del campo y compartir muchos ejercicios durante los entrenamientos, la confianza con Frenkie no era tan sólida como para contarle este gran secreto. Así que, finalmente, decidieron que por el momento era mejor mantenerlo entre las personas que ya conocían su verdad.