Nankurunaisa (Gavi x Pedri)

3. Tengo que contarte algo

Cuando Pedri cerró la puerta tras suya, se encontró a Gavi sentado en el borde de la cama. Se le vinieron en ese momento las palabras de su hermano: "¿Le has dicho ya que eres bisexual?" y supo que era el momento de decírselo, ya que si se lo contaba otro día, después de dormir con él, podría llegar a pensar que no se lo dijo porque se quería disfrutar de su compañía más allá de una amistad.

Pedri sin poder aguantar más, inició la conversación con un tono serio -Pablo, tengo que contarte algo antes de que te quedes a dormir.-

Gavi levantó la mirada hacía la silueta del canario en la oscuridad. -Si me vas a decir que roncas, no te preocupes. Tengo el sueño muy profundo y no creo que me despiertes- Dijo mientras se reía.

-Por favor, es algo importante para mí- Comentó mientras se acercaba a la cama y se sentaba al lado de su amigo.

El sevillano eliminó la sonrisa de su cara al ver que se trataba de un tema difícil por la postura que había adoptado su amigo, el cual escondía la cara entre sus manos. -Puedes contarme lo que sea. Sabes que estaré aquí para lo que quieras-

El canario no sabía como dejar caer el tema sutilmente, por lo que decidió coger aire como si estuviera aspirando todo el valor que pudiese y decidió soltarlo sin más. -Soy bisexual, Pablo- Después de decirlo, estuvo unos segundos sin levantar la cabeza evitando ver la expresión de Gavi mientras esperaba su respuesta.

-¿Y?- Preguntó Pablo quitándole hierro al asunto, pero al ver que su amigo seguía sin levantar la cabeza, paso un brazo por el hombro en señal de apoyo y continuó hablando. -Supongo que me lo cuentas porque te gustan también los chicos ademas de las chicas, pero te vuelvo a decir lo mismo. ¿Y qué?-

-No me hagas decirte el por qué. Eres suficientemente listo para saber porque te lo he contado precisamente ahora.- Respondió levantando la cara para mirar a Gavi.

Con un semblante mitad serio para demostrar a su amigo que comprendía lo importante que era para él y mitad amistoso para que también comprendiese que no le importaba su orientación sexual, habló con un tono irónico a pesar de saber porque se lo decía. Creía que era necesario que Pedri soltase todo lo que pensaba para desahogarse. -Pues seré tonto, porque no entiendo a que te refieres- comentó el sevillano.

Pedri tenía las manos agarrando fuertemente la tela del pantalón a la altura de los muslos. -Joder, que no quería que durmieras conmigo sin que supieras que me gustan los tíos y que comprendería que quisieras irte a tu casa o dormir en el sofá después de saberlo. Que aunque no lo quiera, entendería que se enfriase nuestra relación de amistad después de saber mi secreto.- Cuando empezó a hablar, sintió que no pudo parar, pero fue interrumpido.

-Pedri, para, para- Dijo parándole su discurso. Le cogió la cara con las dos manos obligándole a mirar hacía él. -No me voy a ir a ninguna parte. No soy uno de esos heteros que se alejan cuando su amigo le confiesa que es gay o bi. Somos muy buenos amigos, los mejores diría yo y me encanta que hayamos conseguido tener esta confianza para que puedas contarme estas cosas.-

-¿De verdad que no te importa?- Preguntó el canario ,preocupado por la situación. Necesitaba confirmarlo definitivamente.

-No me tiene que importar nada, tío. Tú eres como eres. Además ahora que lo sé, podré provocarte.- Comentó el andaluz con una sonrisa de niño que planea hacer alguna maldad.

-Si crees que puedes ponerme cachondo, lo tienes difícil- Replicó orgulloso con una sonrisa después de tranquilizarle la forma de tomárselo de su amigo.

-Ya, claro.- rebatió seguro de su mismo. -No se me ha resistido nunca nadie-

-Bueno, voy a por algo que te puedas poner para dormir mas cómodo- dijo cambiando de tema mientras se levantaba y se dirigía hacía el armario.