En algún lugar en la Toscana, se cruzan dos personas - una extraviada y otra que aprovecha un mes de libertad. Sin responsabilidades. Sin expectativas. Sin juicios. Sólo ellos y el campo.
¿Será ésta la escapada que tanto anhelan o un desastre a pun...
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La noticia de lo que pasó en el estacionamiento fue lo único de lo que todo el mundo hablaba anoche. Uno de los paparazzi había grabado todo en vídeo y, por primera vez en semanas, el odio no era dirigido hacia mí. La gente estaba hablando de ello e incluso algunos de mis amigos famosos habían hablado sobre el acoso que enfrentamos de parte de los paparazzi. También se habló de la seguridad en el circuito y estaba segura de que Milo había hablado con ellos tan pronto como nos fuimos ayer. También se vio un vídeo de él escribiendo el nombre del fotógrafo y los datos de contacto, pero no sabía dónde estaban porque no me los había dado.
Los médicos de guardia del centro médico limpiaron los arañazos en mi pie y me dieron un medicamento para el dolor en la pierna. Estaba hinchada y algunos moretones habían llegado a la superficie, pero eran un tono más claro en comparación con las dos líneas a cada lado de mi pierna que se habían vuelto más oscuras de la noche a la mañana. Tuve que colocar un vendaje sobre la pierna para comprimir el área hinchada, pero todavía se podían ver algunos de los pequeños moretones. Debido a esto, me puse un par de pantalones cortos y sandalias negras, ya que usar zapatos y pantalones cubiertos lo haría más difícil. Llevaba una camisa blanca sencilla y una chaqueta de cuero roja que le pedí a Olivia que comprara a Ferrari Style.
—¿Estás segura de que todavía quieres ver la carrera? No me enfadaría si decidieras quedarte —Charles dijo mientras salía del baño, pasándose una toalla por el pelo.
—No me perderé la carrera solo por un estúpido paparazzi, Leclerc —dije y lo vi sonreír a mi tono. Ayer estuve en silencio la mayor parte del tiempo, tuve una llamada telefónica muy larga con mis padres anoche y Charles tuvo que asegurarles que estaba bien y que no necesitaban volar aquí solo para ver cómo estaba.
—Está bien, pero antes de irnos, hay algo que tengo que mostrarte —devolvió la toalla al baño antes de sentarse a mi lado en la cama, con el teléfono en la mano. Abrió su Instagram mientras me apoyaba en él, mi barbilla colocada sobre su hombro mientras su otra mano encontraba la mía. Charles abrió un borrador que había hecho, mostrando una foto suya ayer durante la clasificación antes de mostrarme el pie de foto.
@charles_leclerc: Publico esto tarde porque las últimas 24 horas han sido largas.
No soy alguien que publique activamente sobre mi vida personal, pero cuando se trata de las personas importantes en ella, no me quedaré callado. Estoy seguro de que todo el mundo ha visto lo que pasó ayer y agradezco a los fans que no han sido más que atentos al compartir sus preocupaciones por Valentine. El acoso que ha experimentado ayer, además de todas las historias y rumores que se han dicho en las últimas semanas, son cosas que ya no puedo ignorar.
Nunca engañé a Chiara Bonnet. Ella me engañó. Mi relación con Chiara terminó después de Abu Dhabi el año pasado, pero ella llegó a un acuerdo sin mi consentimiento para seguir actuando como mi novia a los ojos del público. Por motivos de privacidad, no mencionaré nada sobre el acuerdo, pero sé que nunca fui infiel en toda nuestra relación, a diferencia de ella. La próxima vez, consideren el hecho de que hay dos lados en cada historia y puede que estén creyendo en el equivocado.
