CAPÍTULO 15

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Estaba agitada, no conseguía calmar su respiración y no podía escuchar lo que todos los demás hablaban, había ruido blanco dentro de ella, uno ensordecedor.

-¿Nos recuerda? -Escuchaba la voz lejano de un joven.

-Ni siquiera nos mira ¿Estará en transe? - Respondió la voz de otro - ¿Elsa?

La platinada lo miró con sus pupilas azuladas, pero recordarlo era recordar el último momento que se vieron, entre el caos y amenaza. Tal acción le regresaba el ámbar de las pesadillas a la defensiva.

-No te atrevas...No te atrevas a tocarme - Gruñó, pero cerró los ojos con fuerza mientras llevaba dos manos a cubrir sus orejas.

-Será mejor que nos la llevemos, nos podrían atrapar.

Tales palabras provocaron a la platinada apuntarle con ambas manos al frente envueltas de aura azulada, provocando ahorcarlo de frialdad el cuello.

-Te he dicho que no -Gruñó encendiendo sus ojos ámbar.

-Elsa ¡Elsa! Sólo queremos ayudarte -Escuchó la voz del otro sujeto, pero lo ignoraba.

Intentó matar a quien estaba ahorcando, pero sintió una pinchada a su espalda para distraerse en intentar quitárselo. Levantó una vez más la mano para señalar a la otra presencia, pero su vista se nubló para perder conciencia.

Habían noticieros rodeando la zona, oficiales corriendo de un lado a otro con paramédicos atendiendo a los compañeros policías y a la gente inocente que salieron lesionados.

El oficial Hamada rodeó la cuadra logrando encontrar a su compañera junto a otros de su equipo.

-Gogo, Gogo ¿Me escuchas? - El pelinegro se apartó el casco para acercar su oreja a su pecho - Tiene latidos, llevenla con los paramédicos.

Cuando la entregó a su equipo se fijó por última vez en el lugar sin saber que estaba siendo visto por un hombre y una mujer.

-Esto se salió de control, se salió de control y no estamos cerca de ayudarla -Susurró la mujer desde la ventana de la plaza vecina donde habían más civiles mirando la escena -Creo que no hay duda que esta vez sí tenemos que desaparecer.

-No, no vamos a desaparecer porque apenas empezó esto -Dijo el peligros mirando al frente - Fueron por ella.

-¿Y si ninguno de ellos hace lo correcto, Aster?

-Créeme, Tooth -La miró a sus ojos con decepción - Más acciones correctas harán de lo que nosotros hicimos con ellos.

Tooth suspiró regresando la mirada al edificio.

Avanzada las horas del día ya hacía el castaño inconsciente, su rostro sucio y golpeado estaba siendo atendido por unas manos con algodón y medicamento para sus raspones.

-Está anocheciendo ¿Cuántas horas hace efecto ese sedante? -Dijo la voz de un sujeto.

-Escuché a Tomago decir que eran para Elsa, evidentemente necesitaban algo fuerte contra ella - Dijo la voz de Merida.

Jack empezaba a parpadear cuando fue consciente de sus voces y el ardor que sentía su rostro.

-Por dios ¿Vieron las cámaras de vigilancia? -Dijo la voz de un sujeto - Elsa estaba volando y....

-Shh-La voz de otra mujer los calló - Creo que está despertando.

Los dedos de alguien más se acercó al rostro de Jack para abrir su párpado derecho y ver si su pupila reaccionaba a la luz.

-Yo lo veo aun jodid....-Sus palabras callaron cuando el castaño soltó un puñetazo al entrar en pánico.

Se levantó con los puños en alto después de patear a otro sujeto frente a él, se giró sobresaltado buscando una salida pero fue detenido cuando d enuevo le sujetaron las muñecas.

Tras Nuestras Sombras. JelsaWhere stories live. Discover now