Capítulo XIII

1.4K 108 15
                                    

SIGLO ANTIGUO

PALACIO REAL DE EVIGHEDEN

LIAH'S POV

El viaje de regreso había sido maravilloso, sin igual.

Algunos guardias habían estado detrás de nosotras, pero a una distancia prudente. Sólo los notábamos si queríamos.

Ayude a bajar a la Princesa de la yegua, era lo suficientemente grande como para complicar a cualquiera. Además, debía aprovechar la oportunidad de tenerla cerca y tocarla un poco. Ella agradeció, antes que un mayordomo llegara corriendo. Hizo una pequeña inclinación y luego se centro en mí con cara de angustia. Sabía que venían malas noticias.

-El rey, ha sufrido otro paro cardíaco, Su Alteza. Esta muy grave, los doctores creen que no pasará la noche- informa, mi rostro va perdiendo la sonrisa poco a poco -. La han mandando a buscar, pero los guardias no la encontraron. Debe ir a su habitación en seguida.

Asiento de manera inmediata, caminado hacia dentro del Palacio. Por un segundo olvidó que estaba junto a la princesa Luna, pero no la dejo de lado y la llevo conmigo. Subimos las escaleras con rapidez y llegamos a su habitación a una velocidad impresionante. Luna se queda atrás por unos segundos mientras yo, prácticamente, corro. Mi madre se encontraba allí, quieta e inmersa en sus pensamientos.

-¿Madre...?- susurro. Cuando se gira, puedo notar su rostro de sorpresa al verme de pronto allí y la angustia en cada parte -¿Qué ha pasado...?

De pronto, por su rostro caen grandes gotas de lágrimas. Abro la boca intentando decir algo, pero su cuerpo se estrella contra el mío en un abrazo fuerte, buscando soporte en alguien más. Siento su cuerpo sacudirse con fuerza contra el mío. No entendía bien lo que pasaba y por qué estaba reaccionando así. De igual manera, la sujete con fuerza y la mantuve entre mis brazos.

El doctor de la familia real sale de la habitación de mi padre. Era un hombre mayor vestido de blanco en su totalidad y con una barba igual de blanca y larga. Solo con su rostro pude suponer lo que estaría pasando y al momento en que me mira y niega lentamente entiendo todo. Cae como un balde de agua fría, pero comprendo que mi padre había fallecido. La enfermedad había ganado la batalla y nos lo había arrebatado de nuestras vidas.

Abrace con fuerza a mi madre, sintiendo mis piernas debilitarse. Solo estábamos ambas para apoyarnos mutuamente. No había nadie más, no había familia. Solo ella y yo.

Retengo las lágrimas cuando algunas intentaban salir. Debía ser fuerte por mi madre y por la fortaleza que debía mostrar siempre. Debían verme como su superior, siempre. Sea lo que sea, no podían verme débil. Nadie.

-Estaba bien hace unos minutos...- habla mi madre, entre hipidos -. Hablamos. Dijo que se sentía bien. Cansado como últimamente... Ahora, no está... No está con nosotras, Liah...

Me arrecuesto a la pared más cercana llevando a mi madre conmigo. Puedo notar la presencia de la princesa y su rostro de tristeza. Notando cuánto le había afectado la noticia a mi madre.

Miro hacia arriba, sintiendo las lágrimas querer salir, nuevamente. Odiaba ser débil. Prefería ser fuerte y luego llorar todo lo que debía, pero no lo podía hacer. Odiaba eso.

~•~

DOS HORAS DESPUÉS

La noticia había rondando en todo el Palacio. Era como el polvo. Los sirvientes daban sus condelencias cada vez que pasaban a nuestro lado. Odiaba que lo hicieran, pero no tenía otra cosa que hacer más que sonreír tristemente. Solo deseaba meterme en mi habitación, meditar y dejar salir todo mi dolor que estaba reteniendo.

Crownحيث تعيش القصص. اكتشف الآن