ENTRE EL SOL Y LA LUNA - (KSJ - JHS)

30-Fin... o no...

Luego del multitudinario acto en que más de trescientos estudiantes recibimos nuestros diplomas de graduación llegó el momento de las fotos en las que posábamos individualmente y en grupos por carrera. Todos estábamos felices y eso se sentía hasta en el aire.

Nos estábamos sacando unas selfies con Hana, con la que pronto nos separaríamos para volver a vernos quien sabe en cuántos años nuevamente, cuando se asomó Seokjin para sumarse en un par de fotos.

– ¡Me encantó tu discurso Jin, fue muy emotivo! –dije.

Él había sido el encargado de dar el discurso por parte de los estudiantes de este año, y la verdad que había dado un discurso muy sentido.

–Bueno, al menos alguien lo escuchó sin dormirse –bromeó y se rio divertido de su propio chiste, su risa contagiosa hizo que riéramos también.

Mis padres se acercaron a felicitarme y abrazarme.

–Cariño felicitaciones –dijo emocionada mi madre.

Mi padre besó mi frente y me dijo cuán orgulloso se sentía.

Jin se acercó a saludar a mis padres de manera cortés. Inmediatamente mi madre nos pidió que posemos juntos para una foto.

–Mamá no es necesario, ya tenemos las fotos del grupo.

–Pero yo quiero tener esta foto de ustedes que estudiaron juntos y se ven tan lindos así vestidos.

Él se pegó a mí para complacer a mi madre y apoyó su mano en mi espalda, innecesariamente porque con la toga su brazo no se vería en la foto, pero no le dije nada, quería que ese incómodo momento terminara pronto.

Jin se despidió amablemente de mi familia, se marchaba con su padre a celebrar. Me saludó con un amistoso beso en la mejilla, y yo me despedí deseándole éxitos y un buen viaje, ya que era la última vez que nos veríamos.

Hana también vino a saludar a mis padres y avisarme que se marchaba y que nos veríamos luego, para salir a festejar juntas, ella recién se marcharía en un mes, por lo que tenía tiempo todavía para seguir disfrutando de mi amiga.

– ¡Felicitaciones arquitecta! –dijo una voz que conocía bien, al girarme estaba Jungkook con una amplia sonrisa y un pequeño paquete en sus manos, me acerqué hasta él.

–Te traje un pequeño presente.

–Gracias, no tenías que molestarte –le dije y besé su mejilla.

Abrí el paquetito y me encontré con una memoria USB, lo miré interrogante.

–Tiene una lista de canciones mías, espero te gusten.

–Gracias, seguro que sí, muchas gracias –le di un abrazo corto pero con mucho cariño.

En eso mis padres miraron hacia nosotros, por lo que él les hizo una reverencia a la distancia y luego levantó una mano a modo de despedida. Besómi frente y se marchó.

Tae y Jimin se acercaron a saludarme, pero en realidad solo fue de cortesía ya que estaban buscando a Hana, cuando les dije que se había marchado se despidieron a prisa para ir en su busca.

Cuando estaba por volver junto a mis padres alguien tocó mi hombro, al girar solo vi un gran ramo de flores que me hizo sonreír, detrás de estas apareció lentamente una sonrisa gigante y mi corazón latió emocionado.

–Para la más bella arquitecta que conocí en mi vida –me dijo entregándome las flores.

Las tomé y sin decir nada me colgué de su cuello con mi mano libre y lo besé, él respondió al beso con timidez.