Mile High Club (SuperCorp)

Capítulo 39 : Ahora estoy en ello

Lena abordó un vuelo a Orlando tres horas después. Le tomó tiempo encajar en los horarios de la pista en ambos extremos, y estaba a punto de salirse de su piel cuando aterrizó. Mientras empacaba, se le indicó al personal que comenzara a investigar las relaciones de Daxam con cualquier socio de L-Corp. También llamó a su abogado principal para que dirigiera la investigación de la publicación de "disculpa" de Mike para ver si había algún recurso legal en su contra. El video de Kara había sido examinado cuidadosamente para evitar cualquier cosa que pudiera ser difamación. Se preguntó si Mike sería tan cuidadoso. Su cerebro trabajaba horas extras planeando cualquier forma en que pudiera reducir las consecuencias para Kara y aumentar el daño para Daxam.

Jess había alquilado una limusina para que la recogiera en Orlando y la trasladarán al hotel en poco tiempo. Al llegar, tomó una tarjeta de entrada para la habitación que Jess había arreglado y dejó su equipaje en la recepción, sin querer lidiar con eso hasta que viera a Kara.

Le envió un mensaje de texto a Kara para avisarle que estaba allí e intentó llamar de nuevo, pero aún así no contestó. Lena asumió que había apagado su timbre debido a que los amigos le ofrecieron apoyo junto con demasiados idiotas de los medios que pedían sus comentarios. Sara le había enviado un mensaje de texto con el número de la habitación de Kara y Lena decidió que no podía esperar más. Minutos después estaba llamando a su puerta.

Alex abrió la puerta y se asomó a través de la cadena cerrada, mirando sospechosamente hacia el pasillo. Sus ojos se abrieron de par en par al ver a Lena y rápidamente cerró la puerta para abrirla y dejar pasar a Lena.

Lena entró, ansiosa por rodear a Kara con sus brazos, pero no se la veía por ningún lado. Vio a Lucy tirada en la cama. Lucy se dio la vuelta para sentarse contra la cabecera para observar a Lena, asintiendo con la cabeza en reconocimiento. Alex se apoyó contra la pared luciendo ansiosa.

"Ella está en mi habitación". Alex explicó. "De alguna manera se filtró el número de su habitación. Están apareciendo imbéciles de los medios de comunicación para tratar de hablar con ella. Nos vamos a mudar, pero no hemos tenido tiempo de lidiar con eso. Tuvo una llamada de 2 horas con Julia, su terapeuta, y luego ella estaba tratando de dormir".

Lena estaba un poco perdida en la pequeña habitación. 
No recordaba haber estado en un hotel tan pequeño. 
Con torpeza, se dirigió al pequeño escritorio al otro lado de la habitación y sacó una silla incómoda para sentarse.

"¿Como esta ella?"

"Ella está bien. Realmente lo está. Se derrumbó un poco al principio, bastante molesta y enojada. Julia ayudó mucho. Ahora tiene una mejor perspectiva".

Lena dejó escapar un profundo suspiro y se dio cuenta de que prácticamente había estado conteniendo la respiración.

"Es tan injusto que ella tenga que lidiar con esto ahora mismo". Lucy se levantó de la cama.

Lena se quedó callada, pero finalmente no pudo evitar hablar.

"Alex, solo quiero que sepas que Mike y Daxam Industries pagarán por esto. Sé que eso no ayuda en este momento, pero pensé que deberías saberlo. Él lo lamentará".

"En realidad, ayuda saber eso". Alex dijo en voz baja.

"¡Dime más!" Lucy se incorporó, pareciendo repentinamente animada.

Lena le contó brevemente lo que tenía reservado para Daxam. Alex asintió pensativa. Lucy era menos reservada.

"¡Oh, Dios mío, no puedo esperar para ver eso! Quiero verlo sufrir".

En ese momento hubo un golpe. Alex se movió para abrir la puerta de nuevo.

"No puedo creer que este hotel ni siquiera tenga una mirilla". Murmuró Alex. "Bastardos tacaños".