26. Esen | A la deriva.

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26.
A LA DERIVA.

¿Quién es la nueva enamorada de Constantino Karravarath?

Quise lanzar la pequeña pantalla a la piscina frente a mí, tal vez así pudiera ahogar todos los rumores, desistí para mejor arrojarme yo.

Ya habían pasado veinticuatro horas del gran honor que me había dedicado Venicio Lessar, pero los rumores seguían creciendo, alimentándose con la información de cada hora.

En Senylia, los perfiles de todas las redes y contactos de los ciudadanos estaban juntos en la Zerta, una gran red que administraba los perfiles de todos sus usuarios, plataformas de streaming, dedicadas a fotografías, juegos, videos, incluso a perfiles de negocios o simples cuentas de entretenimiento.

Todo se reducía ahí.

Quizás era una buena forma de control.

Yo solo sabía que Constantino, Karravarath, Esen Harseth y Alina habían sido temas punteros durante todo el día.

No tenía idea exacta de cómo se manejaban esas tendencias, pero por lo que podía suponer según Raizel, al revisar no me encontraría con comentarios especialmente amigables.

Tenía que estar por lo menos aliviada de que el Cenagal ya no pareciera un problema para mí, sin embargo, eso se había sentido más como una amenaza.

También había buscado información sobre los Karravarath, no encontré mucho más de lo que ya supiera, pero sí me interesó conocer la opinión pública sobre ellos.

La mayoría de la gente, por sus comentarios en la Zerta, les tenía cierta fascinación, sobre todo por el morbo y misticismo que los envolvía.

Hechos extraños siempre estaban sobrevolando el apellido.

Habían llegado poco después de la Instauración, la ciudad necesitaba un mecanismo efectivo de protección y los Karravarath lo habían ofrecido cuando nadie más podía.

Según se nombraba, en la época Pre-Instauración habían sido una empresa farmacéutica, luego mutaron rápidamente a una empresa de defensa contra ataques biológicos, compraron y absorbieron otras empresas armamentistas.

Luego estaba el hecho de que Eliseo Karravarath nunca había cortado relaciones por completo con los países de la Vieja Alianza, decían que manejaba grandes redes de tráfico ilegal por todo Senylia.

Ellos conformaban un monopolio de seguridad, los encargados de aprobar y resguardar cada cargamento que era trasladado por todo el país, estaba claro que les era fácil moverse a sus anchas.

Tuvieron cinco causas en cincuenta años, pero ninguna prosperó en la Cámara Federal, donde se decía que tenían contactos.

Después estaba la extraña desaparición de Feriza Karravarath, salió en un vuelo privado hacia Balderena, pero solo se encontraron los restos del avión en las montañas, lo que quedó luego de una explosión, ningún rastro de ella o el piloto.
Algunos medios amarillistas habían señalado rumores de que se trataría de un ajuste de cuentas a la familia.

Decían también que Eliseo Karravarath sabía del ataque y que lo dejó pasar, sin importarse en la seguridad de su hija.

La única imagen que encontré de ella era una donde debería tener unos ocho años, y se la veía con un Constantino de muchísimos años menos, pero con la misma expresión huraña de siempre.
No reconocí el viejo salón donde se encontraban, pero sí una gran similitud entre ambos.

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