Riquillos presumidos [KookTae]

cincuenta y seis

Falta mucho menos para el final, y tengo dos alternativas.

1- Publicar cuando los vaya terminando de escribir.
2- Esperar, escribir todo y publicarlos como una maratón.

Que nostálgica estoy.

Capítulo dedicado a: moimentita

PD: cualquier error ortográfico hacérmelo saber por favor.

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JiYeon y Daehyun se miraban fijamente, con rostros completamente serios.

─ Ahora que ya despertó, ¿cómo planeas decirle?

─ De la manera más directa por supuesto, ahora que despertó podemos iniciar el proceso, el testimonio que de Jungkook es fundamental para esto.

Daehyun bebió de su café, mirando a su esposa, quién asintió a lo que había dicho.

─ En todo caso, ¿crees que acepte? Sabes cómo es. ─ JiYeon froto sus manos en sus brazos, acción que hacía cuando estaba nerviosa.

─ Tiene que, no podemos dejar a MinJae suelto, dios sabe lo que pase si está suelto.

JiYeon suspiro, volteando a ver a la habitación de su hijo, ahora mismo este se encontraba durmiendo.

─ Sí, tienes razón.

─ Señores Jeon. ─ Los esposos voltearon, encontrándose con el doctor, quien traía consigo una carpeta.

─ Doctor, buenas tardes. ─ Ambos dieron una pequeña reverencia.

El señor con bata blanca les sonrió.

─ Buenas tardes igualmente, solo quería decirles que en dos días su hijo podrá volver a su casa, no presenta nada grave, y la recuperación fue inmediata para nuestra sorpresa. Eso sí, tendrá que seguir tomando medicamentos, pues aún presenta los dolores en la herida.

─ Oh claro, por supuesto.

─ Eso es todo, nos vemos.

Daehyun suspiró una vez el doctor se había ido.

─ Esto no se puede quedar así JiYeon.

─ En eso estoy de acuerdo Daehyun.

Los dos asintieron a la vez, entrando a la habitación de JungKook. Quien sorprendentemente no estaba dormido, estaba despierto leyendo un libro de cosmos.

El pelinegro alzó la vista de su libro, sonriéndole a sus padres.

─ Hola, no creí que entrarían. ─ JungKook dejo a un lado el libro acomodándose en la camilla. ─ Ahora, quieren decirme algo, así que sueltenlo.

Su padre suspiro, todavía no se acostumbraba a eso.

─ Iré al grano, pensamos denunciar a Kim MinJae por lo que te hizo JungKook, y estabamos pensando que debes testificar en contra de él.

JungKook se quedó en silencio, pareciendo pensarlo.

¿Por qué siquiera lo pensaba? ¿No debería dar su respuesta inmediata?

─ No lo haré. ─ Los señores Jeon se sorprendieron cuando la voz de JungKook sonó tranquila.

Daehyun golpeó la mesa al lado de Jungkook, pero este ni siquiera se inmutó.

─ JungKook, él te acuchilló, ¿por qué no testificaras en contra? ─ El pelinegro se alzó de hombros.

─ No pienso hacerlo, así de simple y sin explicaciones padre.