Final

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Jennie se mantenía dentro del auto, tenía la mirada perdida, absorta, lejos de la de Lisa, la tailandesa le había contado todo y ahora ella estaba batallando con sus propios pensamientos e ideales, tenía los ojos humedecidos por escuchar el sollozo de su esposa.

—¿Alguien más sabe de esto? -preguntó sin verla.

—No.. -sus mejillas estaban cubiertas de sus lágrimas- solo Sieun, nos encargamos que nadie sepa de esto -alzó la mirada para verla, su esposa parecía ignorarla- amor.. -posó con temor su mano a la de ella, Jennie no se alejó, pero ante el contacto sintió que se iba a quebrar, Lisa le había mentido todo ese tiempo- yo te amo.. en serio lo hago -apretó los labios para calmar su sollozo, estaba siendo sincera, pero temía que Jennie no le creyera- haré lo que tú me digas, si debo entregarme.. lo haré -pronunció con la mirada baja. Pasaron segundos y la coreana seguía en silencio, eso ponía en silencio a la más alta- amor..

—¿Sana también está grave? -Esa pregunta desorientó a Lisa.

—Sí.

—¿Sabes si Jihyo tiene algún familiar?

—Ella.. solo tiene amigos, sus padres murieron hace años -Jennie volvía a mantenerse en silencio- Amor..

—Espérame aquí -salió del auto sin darle alguna explicación, Lisa estaba asustada e intrigada por lo que iba a hacer, a pesar de su miedo, decidió esperar en el auto.

Mientras tanto, Sieun alistaba sus maletas para poder irse, no iba a ser tan tonta de quedarse luego de que Lisa le avisara lo que iba a hacer.

Un día después, Lisa detenía su auto nuevamente a las afueras del hospital, volvería a esperar a Jennie, quien bajaba tranquilamente del auto e ingresaba dentro del edificio.

***

—¿Cómo siguen? -preguntó Jennie.

—Sana ha logrado estar estable, podrá recuperarse a paso lento, pero no quita el riesgo de que algo salga mal, y Jihyo, ella aún necesita dos operaciones más.

—Eso significa que si muriesen.. ¿no habrá ninguna sospecha?

—No, todo apuntará a que no resistieron. ¿Desea seguir con el plan?

—Para eso estoy aquí -Jennie sacó de su bolso un cheque, entregándoselo en sus propias manos- haga bien su trabajo, y si ocurre algo, no mencione nada de mí, ¿entendido?

—Entendido -guardó el cheque en su bolsillo- nadie se enterará sobre nuestro trato.

—Doctor Nam.. -detuvo al hombre antes de que se retirara- quisiera hablar con ellas antes de irme -el doctor asintió.

***

Sana se mantenía débil, pero logró escuchar la puerta abrirse, abrió los ojos con debilidad y encontró frente a su camilla a quien había cuidado de ella esos dos años.

—Lamento haber llegado a esto -Jennie comenzó a hablar- te tenía un gran aprecio.. pero no sabía lo que eras -observó los tubos conectados a su muñeca, su débil y pálido rostro, por un momento sintió pena por la rubia- pero los actos de Lisa fueron tu culpa, si no hubieras asesinado a su novia por un capricho, nada de esto hubiera pasado, mereces estar aquí -Sana solo la observaba- adiós, ya no deseo seguir viéndote -comenzaba a retirarse.

—Cuídala.. -pronunció por lo bajo, haciendo detener a Jennie cuando estaba por salir- y cuídate tú.. -su voz salía con dificultad- porque si Jihyo muere.. juro que iré por ustedes, y las mataré de la manera más cruel e inhumana posible -su voz era débil, pero firme- no van a escapar de mí.

Jennie escuchó sus palabras nerviosa, y salió de la habitación de inmediato, afuera pudo divisar a las amigas de Jihyo esperando en los pasillos, por suerte ellas no la conocían, y por lo que Lisa le contó, tampoco sabían sobre la presencia de Sana en el lugar.

Cruzó a la siguiente sala y se detuvo frente a la habitación de Jihyo, se fijo que nadie esté observando e ingresó. Jihyo se encontraba en el mismo estado que Sana, a diferencia que estaba inconsciente por la anestesia, Jennie solo pudo observarla, hubiera deseado conocerla en otra situación, pero ahora era más importante la vida de su esposa para ella.

—Adiós, Jihyo.. -fue lo último que dijo.

Una hora después, Lisa y Jennie iban rumbo a Inglaterra, en busca de una nueva vida para ellas y lejos de alguna clase de sospecha por parte de la policía.

La historia que tanto Sieun como Lisa y Jennie habían dado, era que Jihyo había intentado detener a Sana cuando esta intentó huir del internado, ambas mujeres batallaron con el arma, y en uno de los forcejeos el arma se disparó en el pecho de la castaña, Sana aprovechó esto para huir pero Jihyo aún consciente, le disparó por la espalda, no podía dejarla ir, era una asesina.

La policía creyó la historia.

Y en ese preciso momento, en donde Jennie se recostaba sobre el hombro de su esposa en el avión, el doctor que había hecho el trato con ella, se encargaba de inyectar una extraña sustancia dentro del cuerpo de Sana y Jihyo, aprovechando que ambas estaban inconscientes.

Segundos después, las máquinas dejaron de captar sus latidos.

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Bloody love - Sahyo G!PWhere stories live. Discover now