Condena Prometida. ♧ [Completa]

29.♤[Parte III]

Retrocedo unos pasos y me quito el saco para colocarlo sobre la arena seca. El agotamiento que siento hoy es extremo y no me extrañaría nada que termine durmiendo aquí.

Tomo asiento sobre el y le hago espacio para que se siente a mi lado. Me extraña ligeramente que lo haga sin titubear y con una expresión neutral en su rostro. Casi parece que no le he dicho nada importante.

-Entonces...-giro mi rostro y clavo la mirada en ella. Mantiene la mirada perdida en algún punto de la arena.-nuestra historia empezó desde que éramos niños...-asiento con la cabeza en respuesta y ella desvía la mirada hacia mí.-¿te amé desde que era pequeña?...-niego con la cabeza en respuesta y dejo escapar un suspiro frustrado.
-Solías fastidiarme todo el tiempo mientras tu padre no nos veía y juro que deseaba que te golpearas con algo para que me dejarás en paz...-eso le arranca una risa. Dios, verla reír por la historia ha aliviado la carga emocional que llevaba en el pecho.-creo que te empecé a gustar cuando cumpliste doce años y te regalé la cámara que querías para fotografiar las cosas que más te gustaban...-me rasco el cuello mientras analizo si realmente fue en ese instante o fue mucho después.-o quizá siempre te gusté y me fastidiabas por ello...-la risa que escapa de los labios de ella es más sonora y con más sentimiento.-amaba tantos detalles de ti, tantas imperfecciones y tantas habilidades, pero me negaba a aceptar que así era y por eso nunca fuimos nada hasta que tuvimos madurez suficiente para llevar lo que sería una relación...-bajo la mirada al suelo y trago una roca de saliva ante lo que esta por salir de mis labios.-cuando tenía catorce, las doce mujeres me encerraron en el sótano de la mansión, me amarraron de pies y manos a una cama vieja en la que me violaron hasta el cansancio...-coloco un dedo sobre la arena y comienzo a dibujar una gran línea.-me castigaron por haberme negado a continuar con sus caprichos dejándome amarrado ahí toda la noche...-ella coloca su mano sobre la mía y me hace detener el rumbo del dibujo.-¿puedes adivinar quién me encontró ahí?...-alzo la mirada y la clavo directamente en sus ojos. Veo tanto miedo en sus ojos de que le diga que ha sido ella.-fue tu padre...-deja escapar un suspiro cargado de alivio y sorpresa ante mis palabras.-sentí tanta vergüenza de que me viera desnudo y cubierto de sangre que solamente cerré los ojos, esperando que eso me hiciera desaparecer...-niego con la cabeza y dejo escapar una risa sin humor. Que maldita vergüenza siento con el solo recuerdo de ello.-pienso y veo las violaciones todo el tiempo, pero ese día quedó aún más marcado en mi mente que los demás...-giro mi mano para que nuestros dedos queden pegados unos con otros.
-Juro que si pudiera te daría mi memoria ahuecada para que encuentres la paz que mereces...-ella entrelaza los dedos con los míos y se lleva mi mano a sus labios para plantar un pequeño beso en el dorso.
-Las complicaciones vinieron después de que él se diera cuenta de lo que Hope me hacía, ya que decidió que me protegería a como diera lugar de ella y de sus amigas...-cuando nuestros ojos hacen contacto visual, veo ahí el terror que siente hacia mis palabras.-funcionó por un tiempo, ya que tu padre trabajó en la mansión como chef y tenía acceso a la terminé llamando "prisión" en la que me encontraba encerrado...-bajo la mirada a nuestras manos entrelazadas y niego lentamente con la cabeza.-pasaba tanto tiempo con ustedes, mayormente contigo sentados en la colina en la que solía ver los atardeceres con Samuel, que de vez en cuando, cuando tenía arranques de valor absurdo, me atrevía a tomar tu mano o darte uno que otro beso en la mejilla o labios...-admito que decirlo me avergüenza más que hacerlo, pero en ese momento me creía el más valiente de los valientes.-no imaginábamos que el mal nos acechaba y que tarde o temprano nos arrancaría la poca felicidad que sentíamos...-suelto su mano para tomar la carpeta que me dio Eda. Debo enseñarle lo que hay aquí.

Le ofrezco la carpeta y ella, con bastante extrañeza y cautela, la toma con ambas manos. Le impido abrirla por ahora para poder terminar la historia antes de que vea todo lo que hay ahí.

-¿Que hay aquí?...-pregunta sin mirarme. Quisiera decirle que hay verdades dolorosas y finales infelices, pero mejor se lo cuento.
-Cuando Hope me advirtió que tenía que alejarme de ti o habría consecuencias, tuve miedo y le hice caso...-dejo escapar un suspiro frustrado y bastante profundo.-pero me seguías insistiendo para que explicara las cosas o que al menos te demostrara que no te amaba, lo cual es algo que jamás pude hacer ni siquiera en este punto de nuestras vidas...-me inclino un poco hacia ella para quedar más cerca uno del otro.-te aseguro que lo que siento por ti aumenta cada día de mi vida, muero por besarte a cada segundo y tenerte entre mis brazos cada que se pueda...-ladeo la cabeza ligeramente y le regalo una pequeña sonrisa.-nunca dudé de mi fuerza hasta que sentí mi corazón romperse cada que llorabas o sufrías por mí...-uno mi frente con la suya y cierro los ojos con fuerza.-por ello decidí que jamás te lastimaría ni que dejaría que te hicieran daño...-una sonrisa se dibuja en mis labios cuando recuerdo ese momento específico.-te pedí que te casaras conmigo...-se aleja un poco para mirarme fijamente a los ojos. Hay tanto en su mirada.-y lo hicimos...-su rostro se llena de esperanza, de emoción y una pizca de curiosidad.-abre la carpeta y mira la prueba...-ella la abre lentamente y observa el certificado de nuestro matrimonio.
-Estamos casados...-dice con una sonrisa antes de soltarse a llorar. Al principio creí que era de tristeza, pero al mirarla mejor me doy cuenta que es de felicidad.

Desearía que su felicidad por esto durara, pero quizá no sea posible. Lo peor esta por venir en esta historia y el enredo en el que nos metí a ambos es incluso peor en voz alta que en mi mente.

-Te aseguro que estar casada conmigo no es algo para sentirse feliz...-alza la mirada del certificado y me mira directamente a los ojos con mucha confusión.-Hope se enteró del matrimonio y lo primero que hizo fue quebrar todo objeto de vidrio que había en mi habitación, esa mujer estaba desquiciada y su estado iba empeorando poco a poco conforme pasaban los minutos...-las imágenes de la sangre, el vidrio, el espejo, el anillo y las uñas quebradas vienen a mi mente.-enloqueció tanto que introdujo sus diez uñas a su boca y de un mordisco se las arrancó de raíz...-ella me responde con una cara de asco y horror ante lo que le he dicho.-pero no detuvo su locura ahí...-alzo la mano izquierda y levanto el dedo en el que debe ir el anillo de casado.-por el espejo de mi habitación vi como tomó un pedazo de vidrio de un jarrón quebrado que se encontraba en el suelo y se acercaba a mí...-todavía puedo verla frente a mí con ese pedazo de vidrio apuntándome.-creí que me lo clavaría en el pecho y moriría, pero en su lugar se lo clavó en el costado y cayó de rodillas frente a mí...-dejó escapar un suspiro frustrado cuando recuerdo como acostó su cabeza en mi estómago mientras se desangraba frente a mí.-su cabeza descansaba en mi estómago cuando exclamó las palabras que siempre me decía: "Todo es tu culpa"...-una risa sin humor escapa de mis labios ante eso. Solo sé que tengo culpa de muchas cosas.-algo muy malo pasa en su cabeza y yo he tenido que lidiar con ella solo porque su única obsesión he sido yo desde que era un niño...-la cálida mano de Valeria se coloca encima de la mía y la aprieta ligeramente.
-Ella es una mala persona que hizo cosas malas por su propia cuenta, no tienes culpa de ello...-le regalo una pequeña sonrisa triste y bajo la mirada a la arena.
-¿Sabes porque ella me hizo esa herida en la espalda?...-mis ojos se llenan de lágrimas y los de ella también. Odio todo eso.-para marcarme como su propiedad, ya que un hombre con una palabra marcada en su espalda es la mierda más repulsiva y asquerosa que hay en la tierra...-una risa escapa de mis labios ante eso. Empiezo a frustrarme por todos estos recuerdos.-resulta que para ella, el ser hijo de una alemana y un estadounidense no es algo bien visto, pero aún con esa limitación, cuando me vio en una fotografía de una revista junto a mi padre, una voz en su mente le dijo que ese niño le iba a pertenecer para siempre...-dejo escapar un gemido frustrado ante la rabia que empiezo a sentir.-le parezco una mierda desagradable y una abominación, pero se atreve a tomar mi pene a la fuerza y meterlo en su trasero cuando se le antoja...-limpio mis mejillas con el dorso de la mano y niego con la cabeza varias veces.-siempre vi casos de mujeres que sufrían esto, pero jamás creía que le sucediera a un hombre...-paso una mano por mi cabello al tiempo que dejo salir un suspiro.-después de su episodio de locura, le dije que nos habíamos divorciado y que tu padre había dejado de trabajar aquí para mantenerte lejos, pero todo fue una mentira...-giro mi rostro hacia ella y clavo la mirada en sus ojos.
-Yo...Creí...Creí que tu te habías...Te habías...¡Oh Dios!...-dice antes de inclinarse hacia adelante para llorar sobre sus piernas. Coloco una mano sobre su espalda y la acaricio con delicadeza.

Mi historia es tan jodida y la nuestra tan quebrada que no puedo separar una de la otra. Lamentablemente todo tiene vínculo con todo y ella debe saber todos los asquerosos detalles de ello.

-Antes de que siquiera creyera que le daría la oportunidad de hacerme algo, me casé con una mujer frente a sus ojos...-saco mi teléfono y busco la fotografía de Victoria en la galería. Solo verla en esta foto me pone la piel de gallina.-su nombre de soltera era...-ella gira su rostro ligeramente para mirar la fotografía de mi segunda esposa.-Victoria Marie Rowell...-su mirada se levanta lentamente hacia mis ojos.-tu hermana...-abre sus ojos un poco más de lo normal y en ellos puedo ver el terror por lo que he dicho.