Amigos

7.6K 556 113
                                    

Salimos del salón para dirigirnos a descansar. Pasamos cerca de la concesionria de la cafetería y Haru se detuvo a comprarse algo de comer, que resultó siendo un paquete con unas galletas con sabor a vainilla de animalitos

-¿No quieres una?-me pregunta el pelinegro, mientras extiende una galleta con forma de gato hacia mi persona. Sonrío amablemente ante el gesto, pero me veo obligado a rechazarla

-No, muchas gracias-respondo, mostrándole una sonrisa, para que no se sintiera tan herido. El pelinegro asiente y se lleva la galleta a la boca para comérsela. Me quedé viendo su boca moverse y saborear aquella golosina, con gesto relajado. Por cada segundo que transcurre, este chico me atrapa más en sus redes; sé que no lo hace con intención, pero quiero sentirlo cerca, de verdad me gusta tenerlo al lado

-¿Acaso no tienes hambre?-me pregunta Haru, con su mirada fija en mí

El sonrojo se apodera de mi cara cuando sus ojos se posan tanto en mi persona. Me ví forzado a sacudir la cabeza y responderle a aquel chico que me tenía completamente enamorado

-No te preocupes, no paso hambre-saco mi botella con agua y bebo un trago, para semostrarle mi punto. El ojiazul suspira satisfecho y continúa comiendo de sus galletas-¿Te molesta que pasemos a ver a un amigo mío?-le pregunto al pelinegro de ojos azules, quien me mira mientras posa otra galleta en su boca

Haru asiente y nos encaminamos hacia mi amigo, rezando internamente para que no pase nada malo en este breve rato

-¡MAKO-CHAN!-Kisumi se me abalanza, al verme poner un pie en una de las áreas de descanso del campus, junto al chico nuevo-¿¡Donde estabas?!...¡Me tenía preocupadísimo!-me reprocha el pelirrsado, con sus brazos en la cintura

-Lo siento Kisumi, es que estuve pasando el rato con Haru-el pelinegro se aparece trás mi espalda y entabla un duelo de miradas fijas con el pelirrosado. Los ojos de ambos chicos tienen un brillo intenso, un brillo que no supe corresponder en ninguno. Algo de sudor frío se deslizó por mi nuca y me rasqué el cuello de la pura ansiedad que me provocaban sus miradas

-¿Tú eres el amigo de Makoto?-pregunta Haru, para luego carraspear un poco para aclarar su garganta

-¡Así es!-responde alegre el pelirrosado, mientras extiende su mano-¡Soy Kisumi Shigino, encantado!-Haru se encontraba renuente a estrechar manos con alguien como Kisumi, pero correspondió el gesto de forma amable-¡Vamos, sientensé!-señala el ojipúrpura, palmeando la banca en la que se encontraba

Por alguna razón extraña, quedo en medio de Haru y Kisumi. El pulso de mi corazón se aceleró al sentir la cercanía con el pelinegro, mismo sentir que manifesté durante la primera cátedra del día

-Así que Haru...dime qué te trae a la facultad de Literatura de la universidad de Tokyo...-pide el pelirrosado con soltura

-Bueno...en realidad me transferí por...un tema personal...-acto seguido, Haru agacha su mirada y una mueca se gesta en sus labios. Sentí un particular interés por saber más, pero al apenas conocerlo, no era correcto averiguar sobre un tema que parecía delicado-...estoy viviendo con un amigo que estudia diseño...y entré aquí ya que pude convalidar las materias de mi antigua carrera...

-¿Y qué estudiabas en Osaka?-pregunté con una mirada curiosa

-Psicología...-fue la respuesta del pelinegro, quien me devolvió una sonrisita muy pequeña. Ver ese adorable gesto me hizo sonrojar un poco. Haru me mira un poco extrañado-¿Por qué la gente siempre es tán esquiva?-el pelinegro lanza esa pregunta al aire, como si con eso llegara su respuesta, respuesta que nunca llegó por motivos obvios

-Oye Haru-chan; no te molesta que te llame así, ¿verdad?-espeta Kisumi, con un gesto picaresco. Al parecer a Haru no le gustó, puesto que suelta un bufido con sus dientes apretados; reí suavemente por aquel gesto-En fín, estaba pensando que después de clases, podríamos salir a algún lado...Para que conozcas un poco la ciudad, hablar, hacernos amigos...¿Qué dices?-Kisumi saca su mejor mirada de perrito, esa que hace que cualquiera (incluyéndome) cayera para cumplir sus caprichos

-No sé...acabo de llegar...y necesito hablarlo con mi amigo...-resopla Haru, con una expresión algo nerviosa

-¡Por favor Haru-chan!-el pelirrosado se pone de pie y se abraza a las rodillas del ojiazul

-¡Sueltamé!-rezonga Haru, quien se sacude y se sonroja-¿¡Acaso no conoces la palabra "vergüenza"?!

-Creeme, no lo sabe-le murmuro suavemente contra su oido, lo que provoca un leve escalofrío en el pelinegro. Sonreí complacido-Solo dile que sí, para que te deje en paz

-¡ESTA BIEN, ESTA BIEN. SALDREMOS!-grita el pelinegro con las mejillas sonrojadas a más no poder

-¡Genial!-exclama el pelirrosado alegre; suspiré con pesadez, puesto que Kisumi Shigino logró salirse con la suya...otra vez-¡Si quieres puedes invitar a tu amigo a que venga con nosotros!-mi amigo pelirrosado se acomoda en su lugar inicial en la banca, sin borrar esa sonrisa de victoria en el rostro

-Uhm...-resopla el pelinegro, sacudiendosé algo de polvo de sus pantalones-Préstame tu celular-murmura Haru; saco mi teléfono del bolsillo y se lo paso. Juguetea un poco con el y me lo devuelve al rato. Lo miré bastante confundido, y enarcando una ceja-Es mi número, es para llamarte por lo de las notas después de clases-sonrió el pelinegro, con sus bellos ojos azules centellando

El calor se apoderó de mi cara y desvié mi atención al suelo embaldosado a mis pies, mirándolo como si fuera la novena maravilla del mundo.

Una llovizna suave azotó nuestras cabezas al salir de la facultad. Me cubrí como pude con la gabardina que estaba usando, mientras Kisumi sacaba una sombrilla y la ponía sobre mi cabeza. Haru hizo lo mismo con una propia y nos miró una última vez, antes de ir por su camino

-Supongo que...nos veremos más tarde...-y Haru emprende marcha, con rumbo desconocido

Al quedar a solas, Kisumi me mira muy fijamente; suelto un suspiro, puesto que sé de antemano de lo que me va a hablar

-Sabes que no es posible...lo que tú quieres con ese chico no se podrá...-respira el ojipúrpura, con una expresión triste en su cara

-Lo sé...pero estoy dispuesto a correr el riesgo; de verdad me gusta, y creo que merezco tener una oportunidad

-Lo sé, te entiendo...pero...no será nada fácil...¿y si de una u otra forma lo lastimas?-me pregunta mi amigo, con un deje de preocupación en la voz

-Por ahora trato de no pensar mucho en ello...-respondo con la mirada gacha bajo la sombrilla-...trato de ser algo más positivo...

-Espero que te resulte-Kisumi me abraza por encima de los hombros y me regala una sonrisita comprensiva. Su gesto se me contagia de forma inevitable, mientras caminamos a mi casa, a pensar un poco sobre la salida de esta noche

*Nota de autora*  

Me van a querer sacrificar; pero no se preocupes, puesto que cumplí la actualización prometida

Ahora bien, la razón de mi desaparición es que ya empecé las clases y necesito organizarme bien con todo para no cagarla, así que he estado algo ocupada :)

Sobre el pasado de Haru, mi idea era de que tuviera un ex bastante celoso y retorcido, pero no se me ocurre quien podría ser; mis dos opciones más viables son Rin y Sousuke (me dio arcadas el solo teclear su nombre)

Cuento con sus opiniones y espero que les halla gusado el cap 

Pingu-chan dice Bye .3.

Solo una mordidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora