Camilo Madrigal.

Capítulo 22:

Helena se había pasado horas en aquel árbol, no se atrevía a entrar en la casa porque sabía que Camilo ya habría contado todo a la familia y ella no podría soportar las miradas y el odio que ellos le tendrían.

La rubia no había cumplido su parte del plan, ella tendría que haber abierto un portal para que su hermano pudiera entrar y conseguir la vela, pero después de todo lo que pasó con Camilo, no se atrevía a hacer aquello... Ni siquiera se atrevía a irse, se había quedado en aquel estúpido árbol, con la esperanza de que Camilo volviera y le diera otra oportunidad, aunque eso nunca pasó.

Cuando al fin la chica se convenció de levantarse y caminar hacia el bosque, solo para alejarse de todo, un grito la detuvo, venía del interior de la casa. No tardo en correr hacia dentro de la casa para ver de que se trataba. Corrió hacia la cocina y allí vio a un grupo de hombres encapuchados y armados apuntar a toda la familia allí reunida.

-¿Qué demonios...?

-Hola hermanita - Helena sintió un escalofrío recorrer su espalda mientras se giraba lentamente, frente a ella estaba su hermano, un hombre alto, de cabello rubio y ojos color café. - ¿De verdad pensabas que te librarías de mi solo por no abrir el portal? - soltó una carcajada - por favor, eres muy estúpida.

-Me prometiste que no les harías daño - le recordó Helena intentando estar lo más firme posible. - Óscar por favor...

-Yo te prometí que si conseguía lo que quería, no les haría daño, pero me has complicado mucho las cosas al no hacer el portal - Óscar sonrió.

Antes de que Helena pudiera contestar, otro hombre entró en la sala con la vela en sus manos, al verlo, Alma soltó un pequeño grito.

-No nos puedes quitar nuestro milagro - sollozo Alma, cosa que sorprendió a Helena, nunca la había visto tan asustada y débil - Ese milagro nos pertenece...

-¡Estoy harto de los milagros que pertenecen a unos y no a otros! - le interrumpió él - ¿Os creéis que sois únicos y especiales por tener poderes? - Óscar soltó una carcajada y agarró a Helena con mucha fuerza del brazo - ¿Ella no os contó que su poder también es fruto de un milagro como el de vuestra familia? - Helena intentó que Óscar le soltara el brazo pero él la tenía agarrada con mucha fuerza -¡Nuestra familia también fue muy desgraciada por una época, hasta que unas malditas mariposas amarillas nos dieron este anillo! - levantó el brazo de Helena en el que llevaba aquel anillo para mostrarlo a la familia - ¡Eramos dos hijos, pero mis padres decidieron que el milagro solo lo merecía ella!

Óscar empujó a la chica haciéndola caer.

-¡Si tus padres decidieron eso por algo sería! - intervino Camilo.

-Si, por que la pobre niña pequeña no podía defenderse sin un anillo que le diera poderes.

-¿Y porqué no le quitas el anillo a ella y dejas nuestra vela? - cuestionó Isabela

-¿Crees que no lo intenté? - Óscar volvió a reír - Ese anillo solo obedece a Helena, mis padres se aseguraron de ello. ¿Cómo os sentiríais ustedes si vuestra madre solo pudiera elegir a un hijo suyo para que obtuviera un milagro, y eligiera a vuestro hermano?

-Por mucho que lo intentes, esa vela solo otorga poder a los Madrigal - dijo Alma con desdén.

Helena sintió la mirada de Camilo, pero no se atrevía a mirarlo, ni a él ni a ningún Madrigal.

-¿Quieres apostar? - Alma trago saliva. - Espero que esta vela os haya echo muy felices, porque ahora me pertenece.

Dicho eso se giro para salir, pero una enredadera le agarró del pie.