Escapando de mi ex I TaeTen

28

En la mañana Ten despertó primero, el cuarto estaba casi oscuro debido a las gruesas cortinas, sin embargo la luz era suficiente para ver los rasgos de la persona a su lado; estaba de lado, con su cabello negro desordenado, tapado hasta abajo de sus ojos hecho bolita. Ten lo observó un momento antes de sentirse avergonzado, pero el rostro de Taeyong era bonito, ¿qué debía hacer entonces?

Ten decidió bajar a la sala, donde se encontró a Yongsun y a Lawan haciendo el desayuno, pero no pasó más de media hora para que lo hicieran volver a la recámara.

Taeyong despertó mientras Ten no estaba. Ya eran pasadas las doce pero él seguía teniendo mucho sueño, y habría seguido durmiendo de no ser porque su celular no paraba de vibrar.

Taeyong se dio la vuelta y antes de alcanzar su teléfono bostezó. Se sentó sin salir de la cama, se talló los ojos y contestó la llamada.

—¿Diga? —su voz salió ronca.

—¿Bueno? —contestó un hombre desde la otra línea —¿Es Taeyong?

—¿Quién habla?

—...a-ahm, Kim Doyoung. ¿Sí eres Taeyong?

—Sí...

Taeyong pensó un momento, el nombre le parecía familiar y por alguna razón se sentía emocionado.

—¿Sigues ahí? —suspiró —Disculpa haberte quitado tu tiempo-

—E-Espera, ¿cómo dijiste que te llamas? —dijo apresurado.

—Doyoung.

Lo recordaba, sí, aunque se había vuelto más grave nunca iba a olvidar esa melodiosa voz.

—¡¿Doyoung?! —exclamó emocionado.

Ten, que iba entrando a la recámara se espantó, tanto por el grito como por Taeyong que lamentablemente había encontrado despierto. No quería ni verle a la cara.

Por otro lado, el mayor ni siquiera se había dado cuenta de su presencia.

—¿Me recuerdas?

—¡Claro que te recuerdo! —sonrió —¿Cómo no lo-? —suspiró —¿C-Cómo...? Voy a llorar, ¿cómo te atreves? Creí que no volvería a saber de ti.

Doyoung rió —Yo también, pero aquí estamos.

—Te extrañé.

—Yo también.

Ten necesitaba procesar todo lo que acababa de oír. ¿Quién era esa persona? Taeyong acababa de decir que iba a llorar y que extrañaba a este desconocido enfrente de sus ojos, ¿Qué poder tenía sobre él para que lo dijera así de fácil? Ni siquiera a él, su supuesto mejor amigo, se lo había dicho sin antes pensarlo dos veces. Chittaphon se movió en la recámara como sin nada y siguió escuchando la conversación.

Taeyong se levantó y siguió hablando, abrió las cortinas, saludó a Ten rápidamente y fue al baño a arreglarse un poco.

—¿Qué?

—mhm.

—No, repítelo, ¿en serio?

—Sí, tengo vacaciones ahorita y quiero aprovechar para ver a mi familia y no sé, salir.

—¿Entonces es seguro?

—Sí, voy a ir a Corea, de hecho mi vuelo sale en unas horas.

—¡¿En serio?! —Taeyong gritó emocionado.

—Así es.

—¿Qué hora es allá?

—Aquí en Londres son casi las 4.

—¿De la tarde?

—De la madrugada.

—¿De verdad? ¿Qué haces llamando tan temprano? ¡Vuelve a dormir!

—Mi vuelo sale a las 8 y estoy terminando mi maleta.

—Oh. Espera, entonces vas a venir y tu vuelo sale ya... no puede ser.

—Sí... entonces no sé si pudiéramos vernos. Tal vez es imprudente porque hace mucho que no nos vemos, así que no hay problema si dices que no.

—¡Hay que vernos! ¡Vamos a vernos! ¡Tenemos que vernos! Kim Doyoung hace tres años que no te veo.

—¡Nos veremos! ¡No puede ser! ¿Cuándo? Dime cuándo puedes.

—No sé, ¡No sé, ah!

—Avísame. Dime cuándo y después vemos el lugar.

—Sí, te aviso.

—¡Voy a verte! ¡Taeyong, también te extrañé mucho! Tengo que colgar, nos vemos después.

—Nos vemos.

En seguida terminó la llamada y Taeyong no podía parar de sonreír, iba a volver a ver a su mejor amigo de la secundaria. Taeyong salió del baño apresurado y bajó corriendo con su madre. Ten estaba más que extrañado.

—¡MAMÁ! —Taeyong llegó a la mesa —Buenos días señora Lawan. ¡¡¡¡MAMÁ!!!!

Ten llegó después y se sentó para desayunar con los demás, porque inicialmente había ido a despertar a Taeyong.

—¿Qué pasó? Taeyong, baja la voz-

—¡MAMÁ, DOYOUNG VA A VENIR! ¡DOYOUNG VA A REGRESAR A COREA!

—¿Quién? Taeyong siéntate.

Taeyong obedeció y se sentó entre ella y Ten.

—Doyoung. Doyoung me llamó y dice que va a venir, su vuelo sale hoy.

—No sé quién es.

—De la secundaria, se había mudado a Inglaterra porque su papá trabaja allá. Mira... —Taeyong sacó su teléfono y lo buscó en Instagram tal y como le había dicho, luego le mostró las fotos —Es él... wah, está muy cambiado. ¿Tú te acuerdas de él? —se dirigió a Ten.

Ten miró las fotos y negó —No muy bien.

De sus pocos recuerdos con él, sabía que ese niño era amable y que le había quitado la atención de su mejor amigo en la secundaria. Estupendo.

—Oh, Phonie —intervino Lawan —¿No es el que te caía mal?

—No.

—¿Seguro?

Chittaphon la miró y con los ojos le pidió que no dijera más —No, no es él, lo estás confundiendo.

Le había caído mal, bastante mal, le había robado a su mejor amigo, quitado el primer lugar en mejores calificaciones y para arruinarlo más, al idiota de Taeyong le encantaba oírlo cantar porque el tipo cargaba con una preciosa voz. Pero vamos Chittaphon, no puedes tener ese comportamiento infantil si no lo has visto en años, pensó.

—¿Te caía mal Doyoung? —preguntó Taeyong.

—No. Sinceramente no lo recuerdo bien. —Ten dijo desinteresado.

El tema de conversación durante el desayuno fue el regreso de Doyoung a Corea, y Chittaphon no podía hacer nada más que tratar de actuar como si no se sintiera hecho a un lado, porque el centro de atención ya era Doyoung y el hombre ni siquiera estaba presente, ¿qué le esperaba cuando ya estuviera ahí? el regreso de Doyoung ni siquiera le interesaba, con trabajos podía recordar las cosas malas, definitivamente no se acordaría de si al menos se llevaban "bien".

Y segundo, no podía dejar de pensar en que el comportamiento normal de Taeyong era demasiado extraño debido a lo que había sucedido en la madrugada, ¿o quizás él era el único raro? ¿qué tal si lo había soñado? ¿Por qué tendría que estar extraño si no había significado nada? Ten no podía sacar eso de sus pensamientos, era como si el pequeño incidente fuera como un disco rayado reproduciéndose sin parar en su cabeza.

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buEno si, actualizo esta semana otra vez.

Gracias por leer y linda noche, día o tarde.