15

173 31 5
                                    

—¿El de la tienda de artes?

—Ajá.

Llegó a un cuarto blanco y Taeyong vio que movía algo pesado, entonces pareció que apoyó el teléfono en algo y por fin su vista fue clara. Era una recámara blanca, en sí era un estudio donde su madre llegaba a trabajar, pero Ten lo ocupaba para pintar; un lado estaba lleno de libros, un escritorio y una computadora, mientras que el otro tenía cajas con pinturas, cuadernos y lienzos apoyados en la pared, entonces supuso que estaba usando el caballete para apoyar el móvil.

—Tiene un amigo. ¡Taeyong, tiene un amigo! ¡Es increíble!

—¿Qué bien?

—¡No! ¡Taeyong, mira!

Taeyong volteó y Chittaphon ya había acercado un lienzo al teléfono. Era un ojo, un único ojo lleno de colores brillantes, la piel que lo rodeaba variaba entre azul y verde, la pupila eran varios tonos de rosa y rojo, tenía pestañas blancas; todo era muy brillante y detallado, aún con esos colores se veía realista.

—Acércalo más.

Ten obedeció —También hice un retrato, es un hombre bailando.

—Es increíble... —Taeyong dijo genuinamente sorprendido.

Ten sonrió, dejó la pintura en su lugar y acercó un banco. La guitarra de Taeyong ya había perdido su completa atención puesto que ahora miraba al tailandés sin pestañear.

—¡Oh! ¡Es que su amigo es profesor de artes!

Taeyong asintió rápidamente.

—¿Entiendes?

Taeyong negó con la cabeza aún sonriendo también.

—¡Lo conocí! Le enseñé un poco de lo que pinto... ¡Me invitó! Sus alumnos van a hacer una exposición y ¡¡me invitó a participar!!— Ten prácticamente gritaba de la emoción.

—¿Qué?

—¡¡QUÉ VOY A PARTICIPAR EN UNA EXPOSICIÓN!! —gritó sonriendo.

—¿De verdad?

Ten asintió frenéticamente —Sí, Taeyong. ¡Sí!

—¡Es increíble! ¡Qué bien! ¡Muchas felicidades!

—¿Verdad? Gracias.

—A-Ah, de verdad, es increíble. Mereces que vean lo que haces. Chittaphon, yo quiero estar ahí.

—Tienes que estar ahí. Definitivamente vas a ir.

—Claro que sí.

Ten asintió y guardó silencio, su expresión era extraña, como si acabara de recordar algo pero a la vez estuviera preocupado.

—Por cierto... —empezó inseguro.

—Dime.

—Me pidió opciones... Es que, digo, aún falta un semestre, pero si yo quiero ingresar, entre todo me piden un portafolio con mis trabajos; estuve hablando con él y me dijo que si eran buenos podía contarlos como parte de lo que le entregue.

Escapando de mi ex I TaeTenHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin