Sadness ➵ Aidan Gallagher.✔

c i n c u e n t a.

— Nada — negó sin quitar ese gesto — Algo me dice que ustedes se traen algo — insinuó.

— No — negué, pero mi nerviosismo lo delataba.

Es decir, el profesor es obvio que no tiene un mínimo interés más que seguir motivándome, pero yo...mi comportamiento me ha cambiado estando cerca de él, y cada vez que me lo mencionan o estoy con el maestro, mis dudas existenciales siguen creciendo.

— Hablaremos de eso después — me miró con los ojos entrecerrados.

— Ya va a empezar — anunció Haley y todos nos preparamos para ver el juego.

El lugar estaba muy lleno, con demasiados espectadores colocando toda su atención a la partida, todo inició cuando cada equipo se presentó, y de ahí vi a Ethan entre todos ellos, el juego comenzó, y por supuesto, la tensión, la emoción, y los gritos no faltaron.

Así pasó como una hora y media, observando cómo se pasaban el balón de un lado a otro hasta llegar a la canasta, el equipo de Ethan al principio fue perdiendo, por lo que atrevidamente Blake se colocó de pie y le gritaba barbaridades para animarlo, y era de esperarse de que el asiático se irritara para dirigirle una cara de pocos amigos haciendo que nosotros riéramos.

Como parte final, el marcador dio giro, y resultó que el equipo contrincante terminó ganando, así que era un día para festejar por Ethan que manejó bien su puesto en el juego.

— Eso estuvo genial — dijo Blake aplaudiendo el logro.

— No sé de que reírme, si los gritos que diste o las caras molestas de Ethan — habló Jeremy —  ¡Einwang, pasa la pelota y muévete! — imitó la voz de Blake ya que a mitad del tiempo le había gritado eso a Ethan.

— Tonto — le dio un golpe en el hombro — Iré a verlo, luego regreso junto con él — anunció yéndose a los vestidores.

— Hey, espera, voy contigo, quiero felicitar a esa cara de gato — se puso de pie Jeremy siguiéndolo.

— Ay...esos chicos — suspiró con gracia Haley — Oh...mi soda se acabó —agitó su envase vacío — ¿Me acompañas a comprar?.

— Claro, está bien — acepté sin problemas.

Abandonamos nuestro lugar y nos dirigimos a unos puestos que colocaron aquí mismo, a medio camino, choqué con el hombro de alguien.

— Lo siento — dije sin mirarlo.

— Oh, eres tú ______ — respondió y reconocí quien era, lo miré afirmando que era el profesor Gallagher.

Haley de la misma forma se detuvo, y antes de irse me susurró.

— No te preocupes, te dejo si quieres, buscaré a los chicos después — me dijo discretamente y se fue dejándome con él, guiñándome el ojo como si me hubiera hecho un "favor".

— ¿Qué tal el juego? — se animó a conversar él.

— Estuvo fuerte, pero fue entretenido — respondí tímidamente.

— Genial — únicamente responde.

— ¿Usted vino solo? — seguí.

— Si...— asintió no contento de ello.

— Pudo haber estado con nosotros, así para que no estuviera tan aburrido...— recomendé dudosa.

— ¿No estuviste con tu amiga nada más? — se medio confunde.

— No, es que unos amigos nos acompañaron — informé.

— Oh...ya veo — asiente — De todas formas gracias, pero no creo que haya sido necesario, así para que se hayan sentido cómodos...

— Ok...— dije alargando la palabra.

— Por cierto...¿Cómo vas con Robert? Creo que llevas dos meses con el tratamiento — mencionó al psicólogo.

— Si...sobre eso, estamos sacando nuevas soluciones para mi depresión, y como poder actuar en cada ámbito, sea con mi papá, mi hermano, o mi mamá, cosas así — expliqué.

— Eso es un buen avancé — sonrío levemente colocando sus manos en los bolsillos — Sabes...no quiero sonar como un entrometido, ¿pero has dormido bien? — preguntó viéndome directo a los ojos, tal vez notó las ojeras que ando cargando.

— No tanto, el fin del ciclo escolar se acerca y más que nada me tengo que esforzar al máximo, o no podré obtener mis papeles — conté, pero mi problema también eran los dolores que atacaban más fuerte en mi cuerpo cada noche.

— Trata de dormir bien, eso te va a ayudar a concentrarte más — aconsejó preocupado.

— ¡_______! — me gritaron desde lejos.

Los dos nos volteamos a ver, y era Jeremy quien fue el dueño del grito, y a su lado venia Ethan, el podría ser serio y todo pero esta vez se le nota una leve felicidad al ganar la partida.

— Te estamos buscando — dijo Jeremy cerca de nosotros — Debiste decirnos que te ibas a ver a tu flaco — señaló al profesor.

Abrí los ojos más de lo que acostumbro al oír semejante locura que acabó de decir, y gracias a eso, se ganó una risa disimulada de Ethan.

— ¿Cómo su qué?... — pareció indignarse el maestro.

— Jeremy, él es un profesor — le aclaré directamente y este abrió los ojos sorprendidos a la par.

— Ups...— hizo una mueca y pareció ponerse tenso — Lo siento, es que como usted se ve joven y...— se dirigió a él  — Olvídelo, un gusto, me llamo Jeremy  — se presentó.

— Soy Ethan — respondió el otro como si nada.

— Un gusto — respondió viéndolos algo molesto — Me llamo Aidan.

— Oh...— alargó Jeremy viéndome de reojo — Si, ______ una vez nos habló de usted.

¿Cómo le hago para que deje de avergonzarme?.

— Si para tonto no se necesita estudiar — murmuró Ethan.

— Mejor nos vamos — dijo al darse cuenta de sus errores — Ven Ethan, vámonos con los demás, y _______....— me miró — Haley ya está con nosotros, así que te esperemos fuera de los vestidores, tenemos algo organizado para más tarde.

— Si, está bien — respondí esperando a que se vayan.

Los dos se fueron, dejándome una vez más a solas, pero con una situación incómoda.

— Lamento mucho lo de mi amigo, siempre dice locuras y anda de bromista — me disculpé.

— No es nada — le restó importancia — Así que...¿les hablaste de mí? — medio sonrió.

— Si...digo no — corregí finalmente, lo nervios siempre de traicioneros — Solo...hablé de la ayuda que me está ofreciendo, nada más — respondí.

— Bien...siempre y cuando sean cosas buenas — ríe finalmente — Me gustaría quedarme tranquilo o descansar, pero me esperan a una junta de supervisores.

— De acuerdo...— dije sin oposición.

— Nos vemos después ______, lindo día — se despidió.

— Igual — dije y me devolvió una sonrisa, para mi siempre seguirá siendo novedoso verlo de esa manera porque no es frecuente que esté contento, y seguirá causándome más cosas dentro mi.

Si en verdad tengo dudas todavía, tengo que buscar la ayuda de los chicos, y saber como manejarlo, dar o no el siguiente paso.