Nuestro lugar especial.

Treinta

Adam*

Ya estamos en la fiesta post ceremonia, oficialmente estoy graduado y salido del closet.

No he sabido nada de mi papá, ni siquiera se presentó a la ceremonia pero la verdad es que prefiero que pasara así.

Me di cuenta que en realidad veo más como papá a mi tío que a mi propio papá, yo lo amo, pero mi tío es quien desde que tengo memorias me ha apoyado siempre.

—¿bailemos?— preguntó el Cris extendiendo su mano la cual acepte.

—te vez precioso, los trajes te quedan bien —dije mientras sentía mis mejillas sonrojarse pero la verdad si le queda muy bien ese traje azul.

—tu igual te ves precioso, en especial cuando te sonrojas— lo abrace porque hoy ando muy mamón, supongo que por lo qué pasó antes.

—¿me quieres contar qué pasó?— asentí pero permanecí en silencio —¿ahora o después?, no te estoy presionando sólo me preocupas.

De verdad quiero contarle, pero no quiero hacerlo sentir incómodo o que es su culpa de algún punto, porque no lo es, no es su culpa que mi papá se un aweonao.

—Tampoco es tan importante, solo estoy feliz de tener a mi tío y a mi prima —respondí.

—Que no se te olvide que también me tienes a mi ¿si?, ambos sabemos que esto no iba a ser un camino recto pero lo haremos juntos —el tomo mi mano y me robó un piquito.

Creo que sus besos podrían ser declarados algún tipo de droga fácilmente.

—¿que estarán haciendo la Pau con la Reni?, se que no están con el Fabián porque no está pescando a nadie, aparte el Javier fue a la playa a ver a unos tíos.—se cuestionó el Cris.

—Buena pregunta pero son ellas, podrían estar durmiendo, llorando, viendo alguna serie, comiendo o todo a la vez —respondí y ambos no reímos.

Después de conversar un rato más fuimos a bailar ganando varias miradas, es que en realidad nunca confirmamos que estábamos juntos y ahora nuestros cursos se enteraron muy repentinamente.

Bailamos por lo menos cinco canciones pero pedí un receso, eh tomado muy poco pero son como la una de la mañana y yo soy un abuelito que a las once ya está durmiendo.

Me puse a ver mi teléfono mientras el Cris iba con algunos amigos de su curso, también tengo amigos pero la mayoría siguen bailando y yo me vine a tomar un poco.

Revise WhatsApp y en verdad nadie me había hablado, mi prima sabia que estaba aquí y aparte estaba con la Pau, mi tío me dijo que le hablara cuando tenía que venir a buscarme, el Cris estaba aquí y bueno con la Ale nos alejamos bastante a si que no hablamos hace mucho tiempo.

Me puse a pensar que ahora la mayoría de los que estamos aquí el próximo año entramos a la U, pero yo aún no le digo a nadie que me voy a Canadá.

Me da miedo, en realidad solo me da miedo decírselo al Cris, vamos a miles de kilómetros de distancia y ahora estamos bien, por fin siento que nuestra relación tiene futuro.

¿Y si reacciona mal?, peor ¿si me dice que no quiere estar más conmigo porque estaríamos a distancia?, no quiero terminar lo que tenemos, no quiero alejarme de el, no quiero que el decida no tenerme más en su vida.

Porque si me preguntan a mi, yo lo veo como el amor de mi vida, mi hilo rojo, mi alma gemela como quieran decirle.

Quizá es porque aún nuestra relación es "nueva" y estoy bajo sus encantamientos, pero yo si me veo con el hasta ser viejitos, dudo podamos tener hijos y menos nietos, aunque nunca eh querido ser papá pero no se el.

—¿que pasa amor? —pregunto llegando a mi lado el Cris.

Esperen...

¿Como me acaba de decir?

¿Me dijo amor?

¿Tome mucho?

—¿que dijiste?— pregunté apenas saliendo de mi lapso.

—te pregunte que pasab... —lo interrumpí —no, antes de eso, ¿como me dijiste?

—¿amor?— pregunto desentendido y sentí mis mejillas calentarse un poco, menos mal hay poca luz.

—¿que pasa?, ¿estás bien? —volvió a preguntar acercándose a mi y poniendo una de sus manos en mi mejilla.

Entonces pasó, no me aguante y le di un beso sin importar quien chucha estuviera mirando.

Me separé un poco nervioso a los pocos segundos porque no sabía si le molestaría pero su sonrisa me tranquilizó.

Bueno y también que me besó de vuelta, pero también duró poco gracia a que nuestros compañeros nos empezaron a webiar.

—¡VIVAN LOS NOVIOS!— se escuchó gritar a alguien seguido de una risa general.

Por primera vez en público senti que nadie nos estaba juzgando y espero poder sentirme así siempre que salga con el Cris tomados de la mano o cuando me da por robarle piquitos.

—que dices pololo mío ¿bailemos y seamos el centro de atención? —ofreció el Cris mientras extendía su mano hacia mi.

—¿pololo? A mi nadie me ah pedido pololeo y yo que sepa tampoco a nadie— su expresión cambio a una bastante seria y me reí.

—tranquilo tampoco soy fan de las formalidades —tome su mano aún extendida —seamos el centro de atención.

Su expresión volvió a ser esa sonrisa que me tiene enamorado hasta las patas mientras bailábamos una canción que no conozco pero al parecer el si.

¿Somos el centro de atención? No, la mayoría están tomando o bailando por lo que no somos nada fuera de lo común pero estoy feliz aunque no miren mis dotes de baile.

Me pase el resto de la noche así, sin pensar en el que dirán, ni en mi papá, ni en Canadá, solo disfrute el momento porque no me gradúe para pasarla mal en el carrete.

Cuando ya eran como las tres y vi que el Cris estaba pasándose un poco para el otro lado decidí hablarle a mi tío para que viniera por nosotros, quien estuvo aquí como en cinco minutos.

O quizá es porque ya perdí un poco la noción del tiempo, pero según yo en media hora el Cris ya estaba en su casa acostado y yo en la mía poniéndome pijama.

Ni cagando duermo con traje que incómodo.

—Oye —escuche decir a alguien en la puerta de mi pieza.

—¿si?

—puedo pasar verdad, no se si estas vestido po— reconocí la voz de mi tío.

—pase no más, ya me iba a acostar.

Se sentó en mi cama y me miro en silencio unos segundos pero no se me hicieron incómodos, todo lo contrario de hecho.

—quería decirte que estoy orgulloso de ti cabrito, estoy orgulloso de verte crecer cada día más y poder ser parte de tu vida, no dejes que nunca nadie te apague, sea quien sea porque yo mismo voy y te recuerdo lo mucho que brillas ¿estamos claros?— hablo y sus ojos se empezaron a cristalizar, bueno los míos también.

—¿alguna vez le eh dicho que lo amo como a un papá?— su cara tomo cierto brillo que me agrado haber causado.

—y yo a ti como un hijo, ahora duérmete que la caña que vas a tener mañana te la encargo.

Salió de mi pieza sin hacer ruido porque las chiquillas están durmiendo, aunque lueguito las alcancé también.

....

Hola gente bonita, perdónenme la espera tenía esto escrito hace mucho tiempo pero no podía editarlo ya que últimamente tiempo el que menos tengo jdkdndn.

Espero disfruten este cap del Winnie con el Adam como yo disfrute escribirlo<3