Ventidos

32 1 8
                                    

Han pasado varios días, no he hablado mucho con el Fabi porque ambos estamos ocupados, el tratando de salvar el año y yo con mis pruebas y tratando de no pasarme royos.

Nuevamente es miércoles y estoy en la última hora de clases esperando para irme, estoy bastante agotada.

Primo🖤
Voy a salir con el Cris.
Nos vemos en la casa.
Y si quieres me cuentas porque andas rara.

Te iba a invitar un helado
Pero cagaste:)

Deje de ver mi teléfono porque el profe seguía hablando y no quería que me lo quitara.

La clase termino y me despedí de la Pau, ahora iba a salir con el Javier, salen caleta últimamente.

Nunca pensé ver eso ah decir verdad.

Cuando iba caminado a la salida me encontré al Fabi y este se me acercó rápidamente.

—¿te vas sola?— pregunto llegando a mi lado.

—si.

—te puedo ir a dejar si quieres, podemos escuchar a Shawn.— dijo sacando sus audífonos mientras empezamos a caminar hacia la salida.

Será este mi ser amado? Ahora Shawn le aparece en el inicio de Spotify.

Iba a seguir hablando pero alguien gritó su nombre.

—sorpresa, te vine a buscar para que hablemos, lo tenemos pendiente— hablo una mina un poco más alta que yo peli negra.

—Estoy ocupado— respondió en Fabi en un tono muy frío.

—¿Con está de ojos claros?, pero si parece que se está yendo.— dijo mirándome con una de las sonrisas más falsas que me han dado en mi vida.

—Fabi otro día nos vamos escuchando música, ahora estás ocupado— dije despidiéndome de él.

—Reni espéra...— escuché decir pero la mina lo volvió a interrumpir —deja que se vaya, tenemos que hablar y ¿ me puedes explicar porque te dijo "Fabi"?

No escuché más ya que me puse audífonos y empecé a caminar en dirección a mi casa, bueno antes a un negocio porque quiero helado.

Con mi helado en mi mano todo mejoró automáticamente, ahora solo debo llegar a mi casa en compañía de mi hermoso perro.

Me pase la mayor parte de la tarde leyendo un libro que me regalo mi papá hace unos días, es de un romance muy bonito, espero algún día llegar a sentirme como los protagonistas dicen sentirse.

Son como las cinco y sentí que abrieron la puerta, casi me mori del miedo pero luego recordé que mi papá me contó que hoy salía antes.

Baje a saludarlo y aprovechar de ir a buscar agua.

—Hola mi niña, ¿y tu primo? pensé que iban a estar juntos.

—Salió con el Winnie, no me dijo a qué hora llega.

—demás se queda con el, últimamente andan más unidos, me gusta su amistad.

Amistad, que risa.

¿te parece si hacemos algo? Aún es temprano y no estoy tan cansado, aparte no salimos hace rato.— propuso emocionado.

—¿que propones?.

—te tengo dos opciones, podríamos ir al río y pasar un ratito ahí, o podríamos salir en bici y después pedir pizza.

—prefiero la segunda, deja me voy a cambiar.— respondí.

Nuestro lugar especial.Where stories live. Discover now