La Caída De La Princesa Al Atardecer [Dee Y Heavy X (T/N)]

"Salven a la reina"

Comenzaba a caer el sol para dar paso a la fría noche, así que habíamos decidido llevar de regreso a mi abuela, solo que estábamos esperando a que despertara de su siesta, mientras tanto Heavy se levanta del sofá para irse a otra parte, no se dónde pero mas tarde su voz lo confirma.

-¡Hey! ¡No hay papel...!- Exclama desde el baño.

-Dee, llevale un rollo, estoy levantando los platos- Dije inexpresiva.

-Estoy ocupado- Responde el rubio desde la barra sin dejar de mirar su laptop.

Ninguno de los dos se mueve hasta que escuchamos los pasos de Heavy acercándose y me sorprendo al ver que tenía los pantalones hasta los tobillos pero su camisa holgada cubría hasta sus muslos; negué con la cabeza y saqué el rollo de debajo del lavaplatos para después entregárselo y se da la vuelta.

-Dee...- Lo llama, así que el ojiazul con molestia lo mira pero de pronto el pelirojo levanta su camisa de atrás mostrando su trasero- Eso es por no traerme papel.

-agh, eres asqueroso- Dee vuelve la mirada a su computadora- Y tus nalgas parecen el señor y la señora cara de papa.

-Jodete- Responde antes de desaparecer por el pasillo.

Después de unos minutos la abuela sale de mi habitación.

-Que escándalo traen. ¿A caso los rusos gritan para hablar todo el tiempo?- Se queja y yo sonrió por la ironía de sus palabras, ya que nuestra familia latina siempre hablan así al igual que ella- Bueno... Hora de irnos.

-¡Ya voy!- Exclama Heavy desde el baño.
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Después de una hora nos encontrabamos fuera de la casa de mis padres y todos nos bajamos para acompañar a mi abuela y despedirla.

-Nos vemos pastelito, no olvides comer tus verduras, ya después le traigo ropa para que se me cambie esa de vagabundo- Dice mi abuela a Heavy mientras Pellizca sus mejillas- Dios me lo cuide y me lo proteja- Lo persina y heavy solo seguía su mano con la mirada para después dar un respingo cuando pone su mano en su boca al finalizar la cruz.

-Gracias...- Ríe nervioso para después dedicarle una sonrisa amplia.

Mi abuela se acerca a Dee pero solo lo mira un par de segundos con incomodidad.

-Te cuidas Marika- Le da unas palmadas en el brazo y Dee hace una mueca de confusión.

-¿Gracias?- Responde dudoso y mi abuela se dirige a mi.

-Deberías venir para hablar con tus padres- Sugiere con seriedad.

Mi sonrisa desaparece y dirijo la mirada hacia mi antigua recidencia, debatiendo si debía o no hacerlo, pero de nuevo recordaba esa vez que me golpearon y hace unas semanas que intenté arreglar las cosas pero no querían saber nada de mi.

Hice una mueca sintiendo temor y coraje acumulándose en mi pecho causando mi respiración pesada, así que negué con la cabeza en modo de respuesta.

-Tal vez otro día- Sonreí amargamente. Mi abuela me mira indulgente y besa mi frente, dirije su mano a mi frente pero la retira nuevamente con incomodidad- Si tú respetas mi forma de pensar... Yo te respetaré también- Dije con sinceridad y una sonrisa. Vuelve a dirigir su mano a mi frente y me persina rápidamente para después abrazarme.

-Todo va a mejorar, ya verás- Se separa de mi y mira a los chicos- Ellos son raros, sobre todo la rubia oxigenada- Hace una mueca- Pero se nota que te quieren, sabes que nunca me equivoco- Concluye con orgullo, algo que me hace reír.