Cuando el idol Taehyung es atacado por haters, queda en peligro no sólo su vida sino también la de su mejor amigo, Jimin.
Es ahí cuando su agencia le asigna al mejor guardaespaldas, pero... ¿será suficiente para proteger a ambos?
[Narración + Socia...
—No lo sé —respondió Jimin, inseguro—. Y me da miedo que yo le guste, y no ser bueno en todo esto.
Hobi se mantuvo contemplándolo un momento, pero antes de poder responder, Yoongi entró al estudio. En lugar de parecer que interrumpía, Hobi le tendió la mano a su novio y le sonrió ampliamente.
—Amor —le dijo a Yoongi—, ¿recuerdas nuestra primera cita? La vez que llevaste las mandarinas y... ya sabes...
Hobi comenzó a reír pero Yoongi se puso colorado enseguida. Jimin no pudo evitar su sonrisa e intriga.
—Hobi, ¿a qué viene esto? —dijo Yoongi tratando de detener aquello, pero su novio no dejaba de verlo con cara de enamorado.
—Jiminah me está pidiendo consejos de algo personal, y como creo que tú también puedes ser de ayuda, lo justo es que pagues con la moneda de algo privado para que él pierda la timidez frente a ti.
Jimin estaba más que divertido, y también agradecido de que Hobi no solo trataba de ayudarlo, sino también intentaba hacerlo sentir cómodo.
Yoongi se sentó en el escritorio, lo más cerca de Hobi que pudo y, tras un meneo de cabeza y un suspiro de resignación, dijo:
—Yo le... bueno, yo... Yo le... —Yoongi no sabía cómo decirlo.
—Me sedujiste con una mandarina, dilo. Te comenzaste a comer gajo por gajo mientras hablábamos y comenzaste a chuparlos seductoramente...
Yoongi se puso la mano en el rostro. Jimin no sabía si tenía más rojas las mejillas o las orejas.
—Y luego solo dijiste, "¿quieres comer algo más rico que la comida, Hobi?" Y fue cuando supe que querías que me lanzara a ti. —Pese a que Yoongi y Hobi comenzaron a reír, uno por recordar algo divertido y el otro algo vergonzoso, Jimin borró su sonrisa y lo recordó.
"Ay, no", pensó. El "sí, pero tampoco de comida" que le había respondido a Jungkook, cuando él le había preguntado si tenía hambre... Realmente no había tenido el significado literal que él había creído.
Pero... él había imitado a Taehyung tratando de acercarse más a Jungkook, no sabía que era un doble sentido para otra cosa y ahora se sentía estúpido.
—Creo que lo arruiné —dijo Jimin, enseguida, mientras se cubría el rostro con las manos. La pareja junto a él se giró para verlo y dejaron de reír al notar el desazón del chico—. Dios, él de verdad debe de creer que soy un chico inmaduro y torpe.
—Oh, Jiminah... no digas eso. —Hobi trató de animarlo pero Jimin se encogió de hombros.
—No entiendes, Hyung. Creo... creo que él estaba listo para otras cosas y yo salí con un estúpido pastel de helado. Dios, me siento tan avergonzado...
—Jimin —esta vez fue Yoongi el que intervino, su vergüenza ya se había ido, y ahora solo permanecía abrazando a Hobi—. El tema de las mandarinas no es ni siquiera lo más torpe y vergonzoso que hice tratando de acercarme a Hobi. E incluso después de ser novios, seguimos siendo torpes, pero... Si encuentras a una persona que ama de ti incluso esas partes inexpertas, entonces es el lugar indicado.
La forma en la que Hobi miró a su novio, con tanto brillo en los ojos y esa sonrisa enorme en los labios, le dio esperanzas a Jimin. Pero... incluso así...
—Creo que el problema más grande es... —Jimin no sabía cómo decirlo, se frotó las manos y se obligó a hablar. Era ahora o nunca, ellos estaban ahí para ayudarlo y no podía desperdiciar esa oportunidad—. Hyungs, es que... yo no tengo mucha experiencia... es eso.
Hobi frunció las cejas.
—¿Eso? ¿Qué es eso?
Jimin bufó y masculló entre dientes: "en el sexo", pero fue tan bajito que ninguno de los dos pudo escucharlo.
—Disculpa, ¿qué dijiste?
—En el sexo, Hyung —soltó Jimin, mitad frustrado y mitad avergonzado—. Yo no... no he salido con nadie desde hace mucho. Demasiado. Recuerdo más el tiempo que pasé con ortodoncia que el que pasé con Woo. ¿Y si le gusto e intenta acercarse? ¿Y si estropeo todo? Le preguntaría a Tae pero sé que enloquecería y querrá enseñarme hasta el kama-sutra, y no sé si podré lidiar con ese nivel de auto vergüenza. Solo quiero saber qué hacer, no quiero que él se dé cuenta que no sé cómo hacerlo bien.
Hobi seguía viendo a Jimin desbordando cariño por los ojos. Le dio unos golpecitos a su novio en el pecho y le dijo:
—Amor, creo que es momento de que me dejes solo con Jimin.
Yoongi pareció ofendido.
—¿Qué? Yo también puedo ser de ayuda, bebé.
—Oh, no lo creo. Le daré consejos a Jimin y no quiero que sepas cuáles son mis secretos o si no ya no te podré sorprender.
Aunque con los ojos entrecerrados, Yoongi accedió y se despidió de su novio con un beso en los labios. Luego se acercó a Jimin para susurrarle:
—Descuida, Jiminah. Te aseguro que quedas en manos expertas.
Y tras decir eso, Yoongi se fue. Cuando estuvieron solos, el mayor se cruzó de piernas para acomodarse otra vez y le dijo al chico:
—De acuerdo, Jimin. Responderé todas las preguntas que quieras. No tengas pena, solo... pregunta lo que quieras.
Jimin sonrió, agradecido. Y sintió alivio de tener en su vida a alguien como Hobi Hyung.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.