—Estás hablando con él —dijo Seokjin seriamente, quien también esperaba en la sala—, no le mientas a Gong, por favor.

—Yo... Yo no... —Cuando Jimin se sentía intimidado, agachaba la cabeza y comenzaba a tartamudear.

—Seokjin, deja a Jimin. —Eun estaba también presente y miró con mucho amor al chico para que no se sintiera intimidado por el guardaespaldas—. Mimi, si sabes algo de Tae, por favor dinos, ¿sí?

—Él.. está por llegar... —Jimin no quería delatar a su amigo, pero tampoco quería verse como alguien débil delante del que había sido guardaespaldas de su ex-novio por muchos años, así que levantó su rostro con valentía hacía Seokjin—. Pero les advierto que algo trama y será mejor que se preparen.

—Con un demonio... —Gong estaba apunto de quedarse calvo, pero no tuvo tiempo de despotricar porque enseguida se escucharon unos pasos y con eso las puertas de la sala de conferencias se abrieron.

—¡He llegado! —soltó Tae con una enorme sonrisa—. Una disculpa, es que mi tatuadora estaba ocupada esta mañana y tuve que esperar a que terminara con sus otros clientes para que me hiciera esto.

Taehyung llegó de lo mas feliz a la sala de conferencias, con un levis negro más apretado de lo usual y una camisa azul fajada con los primeros 3 botones desabrochados que dejaba ver en su brazo izquierdo algunos de sus tatuajes. Se miraba como un sueño; hermoso, guapo y sexy, pero lo que más sorprendió fueron esos dos piercings que tenía; uno en el labio inferior de lado izquierdo y otro en la ceja derecha.

Jimin estaba asustado y sorprendido por lo malditamente bien que se le miraban.

—¡Tienes que estar bromeando, Taehyung! ¡Dime que son falsos! —Gong no podía controlar su voz, estaba emputado.

—Claro que no son falsos, Gong. Casi se me sale la lágrima con el del labio, pero lo logré. ¿No crees que se miran sexys, mimi? —Tae ignoró a todos en la sala y se sentó al lado de su amigo para que observará mejor sus nuevas perforaciones (porque obviamente no eran las únicas que tenía).

—Se te miran muy bien... —Jimin quería reírse por lo que estaba haciendo su amigo, pero sabía que no debía hacerlo si no quería que Eun lo regañara. Sin embargo, Tae le guiñó el ojo y comenzó a contarle cómo su tatuadora le sugirió hacerse otro tatuaje.

—Iré a hacerle un té al pobre de Gong —dijo Eun, poniéndose de pie—. Y creo que yo también necesito uno. ¿Y tú, Seokjin?

—No, gracias, Eun.

La manager de Jimin salió de la sala con un nuevo dolor de cabeza.

—Taehyung... —Gong, un poco más tranquilo, se acercó a los dos idols—. Te presento a tu nuevo guardaespaldas, Kim Seokjin. Él se encargará de tu seguridad de ahora en adelante.

Jin se levantó del sillón en donde se encontraba y le tendió la mano a Taehyung.

—Un gusto, Taehyung, espero que podamos llevarnos bien y que puedas confiar en mí para tu seguridad. —Jin había pasado días meditando sobre ser el guardaespaldas de Taehyung, y finalmente llegó a la conclusión sobre que, si lo iba a hacer, lo iba a hacer bien. Sería el protector que Taehyung siempre necesitó incluso aunque el chico ni siquiera comprendiera que lo necesitaba.

—En primera —dijo Tae altivamente—, debes saber que no estoy de acuerdo con esto, no quiero ni necesito una niñera. Y en segunda, la confianza se gana, y si te crees tan capaz de ganarla espero que lo demuestres y soportes pero para serte sincero te doy un mes para que huyas. —El tono de rebeldía de Taehyung estaba sacando de quicio a Gong, pero para sorpresa de todos Jin simplemente bajó la mano mientras sonreía.

Problematic Assignment || jikook + taejin || [Terminada✓]Where stories live. Discover now