Un nuevo año

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...

Una vez que Susanne salió bien de su cirugía, Elena y Sirius decidieron irse para darle a la pareja su espacio.

Al llegar a la casa, ambos se apresuraron a llegar a su cuarto, vistiéndose con sus pijamas.

--Una pena lo que les sucedió a los Granger ¿No lo crees?-- ella asintió, metiéndose en la cama sin añadir nada más.

Black mordió su labio, contrariado, sentándose en su lugar de la cama, jugando con sus dedos, sin saber si debería comentarle sus pensamientos a su novia.

--¿Estás bien?-- le preguntó Elena, girando sobre su espalda para verlo a la cara.

--Sí, yo... Sólo pensaba en... En...-- trató de proseguir, pero no pudo --En nada, mañana debemos despertarnos temprano para llegar a tiempo a la reunión.

Se cubrió con la sábana, depositando un beso fugaz en los labios de la bruja.

--Será mejor que descansemos-- agregó envolviendo a su novia entre sus brazos, quien se acomodó en su torso desnudo como si fuera su almohada.

--Tienes suerte de que esté cansada y no tenga fuerzas para soltarte la lengua-- se burló bostezando.

--No me hagas imaginar cosas así, Elena, o lo último que haremos será dormir-- la castaña rio ante la insinuación de su novio, quien acariciaba su espalda.

--Gracias por lo de esta noche. Por ayudarme a ver a Venus-- se explicó, recargando su barbilla sobre su pecho para verlo a los ojos.

--Fue un placer, pero no entiendo por qué nunca lograste hacerlo por ti misma, es decir, haz logrado cosas más complicadas que llevarle la contraria a un elfo-- dijo irónico, observándola agachar el rostro.

--Supongo que estaba asustada-- respondió desviando la mirada, formando una mueca.

--¿De qué?-- preguntó Black, acariciando su mejilla.

--Del miedo en sí, temía entrar a esa casa y ser abrumada por lo sucedido en esta, recordar la imagen del cadáver de Vic... Me asustaba que volver a ver a Venus fuera abrumador para mí, pues ella es lo único vivo que me queda de mi hermana, tenía miedo de no estar preparada...

--Oh, Elena-- soltó el pelinegro casi en un susurro.

--Gracias por estar ahí, a mi lado, Sirius-- él sonrió, atrayendo a la bruja hacia él con su mano apoyada en su nuca, besándola.

--Siempre voy a estarlo-- respondió, terminando el momento con un tierno beso en su frente.

Para que después Yaxley volviera a abrazar su torso, quedándose dormida sobre este.

Mientras que Sirius sólo pensaba en una cosa: ¿Sería ya tiempo de proponerle matrimonio?.

Al día siguiente, ambos se despertaron muy temprano, tomaron una ducha juntos, desayunaron y se Aparecieron en la Orden del Fénix.

--Suerte con el caso de mi hermana-- le dijo Elena una vez que sus caminos se separaban.

--Suerte con el caso de la piedra-- respondió el pelinegro, ella asintió y tras un beso de despedida se fueron a sus respectivas reuniones.

--Y yo que creí que llegaba tarde-- se quejó Marlene, quien llegó 5 minutes después que ella.

--Estás viendo la prueba de lo contrario-- dijo respondiendo al abrazo que le ofrecía su amiga --¿Y esas ojeras?-- preguntó tomándola por las mejillas para apreciar la sombra bajo sus ojos.

--Casi no dormí anoche-- se explicó bebiendo un sorbo de su frappuccino.

--Pero si tú y Jasper fueron los primeros ayer en dejar la fiesta después de que James y Lily se fueron-- soltó confundida, robándole un trago de su bebida.

Historia Mi felicidad y mi tristeza (Pt.2) (Continuación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora