Devuelta a la boca del lobo

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Tras un largo papeleo y confesión de la manera en qué transcurrió la misión que Moody, Elena, Lily, Marlene y Alice se arriesgaron a realizar, Yaxley tomó una dura decisión: Darse un tiempo de la Orden del Fénix.

Pues los recientes sucesos la espantaban, ya que temía que algo malo le pasara a ella y, por ende, a sus hijas.

Pero tan pronto y como estas nacieran, regresaría a combatir a los mortífagos para acabar de una vez por todas con Lord Voldemort.

Una vez libres de la Orden, las cuatro amigas se dirigieron a la casa más grande y segura, la de Jasper, donde las parejas de ellas les esperaban.

--¡Gracias a todos los magos que estás bien!-- exclamó James, corriendo hasta Lily, tomándola fuertemente entre sus brazos.

--¿Te hirieron?-- preguntó Frank preocupado, limpiando la mejilla manchada de su novia, quien negó.

--Dime que no te vieron-- le pidió Elena a su hermano, quien también negó.

--Obedecí y me quedé aquí-- respondió él, abrazándola al igual que a su novia.

De repente Elena sintió cómo era jalada hacia atrás, para después ser examinada de arriba a abajo por su prometido.

--¿Estás bien?-- ella asintió, respondiendo al abrazo que Sirius comenzó --Aunque estaré mejor cuando nos mudemos de casa.

--Pueden quedarse en la nuestra-- le ofreció Alice --Era la única que no fue fotografiada por mortífagos  y tenemos el suficiente espacio para ustedes.

--No creo que digas lo mismo cuando Jean y Jane nazcan-- bromeó Sirius.

--Nos encantará tener pequeñas huéspedes en la casa, créannos-- lo tranquilizó Frank.

--En ese caso, no veo por qué no-- respondió Elena.

--Ustedes también pueden venir-- dijo Alice, mirando a Lily y Marlene --Hay suficiente espacio.

--Supongo que una pijamada masiva nunca viene mal-- respondió James.

--Es muy amable de tu parte, Alice, pero creo que será más seguro si Jasper y yo permanecemos por nuestro lado-- se excusó Marlene, y Elena entendió el por qué.

--Además, preferimos tener nuestra "privacidad", si saben lo que quiero decir-- Elena puso cara de asco ante el comentario de su hermano, mientras él abrazaba a McKinnon por la cintura.

--Sigan así y Jean y Jane no serán las únicas bebés que nazcan próximamente-- se burló Black.

--Será mejor que nos vayamos antes de que me dé un coma diabético-- se quejó Elena, desviando la mirada de los mimos de Marlene y su mellizo.

Tras despedirse, los 6 magos se aparecieron en la casa de Frank y Alice, que resultó ser más grande de lo que esperaban.

Alice preparó cena para todos y al irse a dormir, en el cuarto que Lily, Sirius, James y Elena compartían, los cuatro se pusieron en marcha para armar la enorme cuna para las mellizas, quienes nacerían dentro de unas semanas.

Por lo que terminaron por quedarse dormidos a las dos de la mañana, exhaustos y con enormes ojeras.

Pero, para la mala suerte de Elena, fue despertada por el molesto movimiento que sentía dentro de su cuerpo, tomando el frasco del ungüento que Blair le había dado, saliendo a la sala para comenzar con su día productivamente.

--¿Alice?¿Qué haces despierta tan temprano?-- le preguntó, observándola preparar una mezcla en un tazón.

--Bueno, ayer dijiste que tenías antojo de chocolate, así que pensé ¿Por qué no hacerte Brownies?-- Elena sonrió enternecida, abrazando a su amiga.

Historia Mi felicidad y mi tristeza (Pt.2) (Continuación)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora